Entre la de jamón y morrones, la de anchoas y la de longaniza, sale cada tanto una grande de berenjenas, albahaca y nuez. O una porción de verdura para comer de "dorapa" en la barra. Podríamos estar en cualquier pizzería de moda en Palermo, pero estamos en Güerrín, una de las más emblemáticas y tradicionales de Buenos Aires. Y escuchar al maestro pizzero gritar "Marche una de champignones, espárragos y almendras" llama la atención. Sorprende.
"Seguimos siendo una pizzería clásica, pero decidimos dar una vuelta de rosca para aggiornarnos a los tiempos de ahora. Así fue que incorporamos al menú opciones veganas, sin huevo ni muzzarella", cuenta Marco Giaccaglia, encargado de la pizzería en diálogo con LA NACION.
"En realidad nosotros siempre hicimos pizzas veganas. Muchos clientes nos hacían el pedido por teléfono, pero ahora decidimos incorporarlas oficialmente en la carta, diferenciándolas del resto con color verde", explica Giaccaglia.
El menú veggie consiste en 4 pizzas: la clásica fugazza; la de acelga, portuguesa y aceitunas; la de berenjenas, albahaca y nuez y la de champingones, cebolla, espárragos y almendras. "Sinceramente nos fue bastante bien. Aunque las clásicas con muzzarella siguen siendo las más pedidas, notamos que con las pizzas veganas hemos ganado un público mucho más joven. Chicos de 20, 22 o 25 años frecuentan más el lugar", asegura Giaccaglia.
Muzzarella = muerte
En noviembre pasado, la pizzería de la calle Corrientes y Uruguay sufrió un escrache organizado por un grupo de militantes veganos. Las imágenes y videos de la protesta se viralizaron rápidamente en las redes sociales: en ellas, se veía a un grupo de jóvenes golpeando los vidrios del restaurante con pancartas que rezaban "Muzzarella = Muerte" y al grito de "Liberación animal".
"El escrache nos sorprendió a todos -recuerda Giaccaglia-. Si bien respetamos el reclamo, no nos parece bien la agresión. Me gustaría que se acerquen a pedirnos disculpas por el episodio. Yo respeto que tengan su punto de vista, pero también tienen que respetar que acá hay gente que está comiendo panceta con todas las ganas".
Jacqueline Guzmán es estudiante de Filosofía, tiene 25 años, y hace dos que es vegana. Activista en Voicot y Save the Movement, dos organizaciones que luchan por los derechos de los animales, fue una de las jóvenes que participó de la protesta frente a la famosa pizzería. "Ser vegano es una ideología. El cambio en la alimentación es sólo una consecuencia", asegura.
Es que el estilo de vida vegano no se limita sólo al hecho de excluir de su dieta los elementos obvios como carne, pescado, leche, queso, huevos y miel, sino que evitan consumir ingredientes "ocultos" como gelatina o colorantes de origen animal.
Tampoco utilizan productos en los que se haya experimentado con animales -ya sean de cosmética o de belleza-, ni que los involucren en su producción, como vestimenta de cuero e, incluso, de lana.
"Cuando tomé conciencia del sufrimiento y la explotación que viven los animales, cambié mi alimentación. Es una matanza brutal como ninguna en la historia de la humanidad. ¿Sabías que se matan 4000 animales por segundo en todo el mundo? Y eso sin incluir a los peces, que se cuenta por toneladas", plantea Jackie.
"Me alegro mucho que Güerrín haya incorporado opciones veganas. Lo ideal sería que dejen de vender pizzas con muzzarella, pero entiendo que es casi imposible que eso suceda. Es un triunfo del veganismo", asegura.
Ser vegano en el país del asado
Aunque no existen datos oficiales sobre la cantidad de veganos en el país, se sabe que la cifra va en aumento: la Sociedad Argentina de Nutrición estima que entre el 1% y el 2% de los argentinos son veganos o vegetarianos. Esto equivale a unas 600.000 personas.
Otro indicador podría ser Google Trends, la herramienta que muestra los términos de búsqueda más populares en Internet. Según los datos que arroja, el interés por lo vegano en el país ha aumentado un 40% en los últimos 5 años. Entre las consultas más buscadas por los argentinos interesados en el veganismo aparecen: "apto vegano", "sushi vegano", "shampoo vegano" y hasta "asado vegano".
Sin embargo, llevar adelante un estilo de vida vegano en un país tan "carnívoro" como la Argentina no es tarea sencilla. Los productos veggies no suelen verse en las grandes cadenas de supermercados y los restaurantes especializados tampoco abundan. Actualmente, en Buenos Aires existen entre 10 y 17 restaurantes exclusivamente veganos: los más famosos son Estilo Veggie, La Reverde, Green Factory, Loving Hut, Pizza Vegana. Si se suman locales que incluyen en su menú opciones veganas, el número asciende a 70, según el sitio Happy Cow.
"Los argentinos veganos tenemos un desafío mayor -afirma Jackeline-. Es difícil que la gente te entienda y muchas veces somos ridiculizados. Nos enfrentamos a una gran resistencia. La cultura de la carne está muy arraigada y además, muy relacionada a la figura masculina. El machismo tienen mucho que ver en esto".
"Lo que no termino de comprender es por qué, en una sociedad que ama tanto a los animales, donde la mayoría de las personas tiene en su casa un perro o un gato como mascota, no siente ningún tipo de culpa a la hora de comer una vaca o un cerdo -se plantea-. Es una contradicción que me vuelve loca y no termino de comprender".
Más notas de Gastronomía
- 1
Ya tiene fecha el comienzo del juicio a la enfermera acusada de asesinar a seis bebés
- 2
Un vuelo de Aerolíneas Argentinas tuvo problemas cuando pasaba por Río de Janeiro y debió regresar a Buenos Aires
- 3
La advertencia de un psicólogo sobre los festejos en Navidad: “No hay que forzar a nadie”
- 4
En la ciudad. Lanzan un programa para que los mayores de 25 terminen el secundario en un año: cómo inscribirse