¿El té de jengibre, limón y miel ayuda a subir las defensas y combate la gripe?
Aunque no hay suficiente evidencia científica de que este té sea 100% efectivo, las propiedades de cada uno de estos ingredientes pueden ayudar a disminuir los síntomas de esta enfermedad
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Con la llegada de las lluvias al país, las enfermedades respiratorias se hacen más comunes. La gripe es el virus que más se trasmite de persona a persona durante la temporada invernal y, por esto, muchas personas buscan ingredientes naturales para combatirla.
Uno de los remedios naturales más populares es el té de jengibre, limón y miel que, según la cultura popular, es efectivo para subir las defensas y combatir el resfriado común.
Por lo anterior, EL TIEMPO decidió consultar qué tan efectivo es tomar esta infusión para subir las defensas y eliminar los síntomas de la gripe. Inicialmente, hay que resaltar que el jengibre contiene compuestos bioactivos como el gingerol, ayudando a reducir la inflamación en la garganta y las vías respiratorias.
Por su parte, el limón es una fruta cítrica rica en vitamina C y propiedades antibacterianas y antivirales que pueden ayudar a combatir la infección; mientras que la miel puede ayudar a recubrir y calmar una garganta irritada o inflamada.
Paula Hernández, médica estética y funcional, especialista de la Universidad El Bosque y la Fundación Universitaria de Ciencias de la Salud aseguró para EL TIEMPO que la gripe es “es una entidad que es autoresolutiva, es decir que no requiere ningún medicamento o conducta especial para su tratamiento, el único manejo que está indicado es el manejo sintomático que puede ser farmacológico”.
Lo anterior, quiere decir que la gripe puede variar dependiendo de varios factores, incluyendo la cepa específica del virus, la salud general de la persona afectada, y la rapidez con la que se inicia el tratamiento. La gripe suele durar aproximadamente de una a dos semanas, pero algunos síntomas, como la fatiga y la tos, pueden persistir por más tiempo.
Según la experta, las bebidas calientes como el té de jengibre, limón, miel, entre otros, “tienen propiedades antioxidantes pueden ayudar a reducir el malestar propio de la enfermedad; sin embargo, no hay suficiente evidencia que demuestre que el uso de estas bebidas esté directamente relacionada con el tiempo de duración del cuadro o su severidad”.
Para finalizar, Hernández comentó que el enfoque principal para prevenir la gripe debe ser realizado mediante el lavado de manos, uso de tapabocas si hay contacto con alguna persona enferma y la vacunación anual contra la influenza en toda la población. Adicional a esto, las personas mayores de 60 años, menores de edad e inmunocomprometidos, deben tener la vacuna contra el neumococo.
*Por Pamela Avendaño
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