Animate a hacer estas recetas dulces y picantes, perfectas para darle calor a la garganta en invierno y aprovechar las propiedades culinarias de esta raíz milenaria.
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El jengibre es una especia encantadora, con un sabor y un aroma distintivo que se consigue en distintas presentaciones. Todas pueden usarse para cocinar: jengibre fresco picado, rallado, en rodajas o molido y jengibre seco, jengibre en polvo, jengibre en conserva o jengibre confitado. Estas formas en que se comercializa la raíz de jengibre, se pueden incorporar en platos tan variados como curry, adobos, salteados, guisos, bebidas y postres.
Además de su aroma característico y su ligero picor, tiene propiedades fitoterapéuticas. La raíz del jengibre se usa como remedio natural durante el invierno (y durante todo el año) para prevenir y tratar los síntomas de problemas respiratorios. Un té de jengibre es ideal para aliviar resfrios, catarros y gripes, aunque también se emplea para tratar trastornos digestivos, circulatorios o dolores en general.
Aprendé estas tres recetas dulces que tienen jengibre como protagonista:
Receta de jengibre confitado
Hay quienes acostumbran masticar rodajas de jengibre crudo para contrarrestar el dolor de garganta. Para los fanáticos de los superpoderes del jengibre, nada mejor que el jengibre confitado, una deliciosa manera de aprovecharlo.El jengibre confitado es mucho más rico y dulce que el jengibre crudo. Hacé esta receta de jengibre confitado y tené tu remedio natural y aromatizante para todo tipo de recetas siempre a mano.
Receta de mermelada de jengibre
La mermelada de jengibre se consume desde hace muchos años en toda Europa desde que se descubrieron las propiedades magníficas de esta raíz aromática tan preciada en la cocina asiática. En la cocina occidental más clásica, europea y norteamericana, el jengibre seco o en polvo se usa típicamente en alimentos dulces: para elaborar confituras, caramelos, panes de jengibre, saborizar galletas o agregar un toque especiado en mermeladas. Pero la raíz fresca de jengibre es otro mundo de posibilidades, picor y frescura que se aprecia muchísimo en esta receta de mermelada de jengibre deliciosa para comer con tostadas, rellenar bizcochuelos o para aderezar carnes.
Receta de pastel de peras y jengibre
Un postre frutal suave realzado por el perfume y el leve picor del jengibre fresco rallado. El pastel de peras y jengibre puede consumirse tibio o frío, y acompañarse con gajos de pomelo en almíbar o crema batida. Lleva una base arenosa y una cobertur streusel de manteca, harina y azúcar típica de la gastronomía alemana. La receta de pastel de peras y jengibre es perfecta para servir después de una comida o la hora del té.
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