Cómo es y quiénes están detrás del polo gastronómico que inauguraron frente a la Facultad de Derecho
Cuenta con tres marcas que ofrecen desde pastelería hasta coctelería; funcionará hasta la madrugada los fines de semana
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Para LA NACIONDelfina Casali
Luego de dos años, el Museo Nacional de Bellas Artes vuelve a tener un espacio gastronómico en donde hasta mediados de 2019 funcionó Mercedes Haus. Allí, en asociación con el restaurante Novecento, la automotriz Mercedes-Benz ofrecía un lugar para que sus clientes entraran en contacto con la marca. La semana pasada, Bellas Artes Bar abrió sus puertas con tres propuestas distintas para captar la atención de la mayor cantidad de personas que se acercan a esa zona clave de la Ciudad de Buenos Aires.
Ubicado en Recoleta, el emblemático local de 1000 m² incluye a La Ferneteria Bar & Eatery -que suma una carta sofisticada y coctelería de autor a cargo de Martín Suaya-, Trapizzino Shop, con su clásica fusión de sandwiches italianos y pizza y Colette Caffetteria, a cargo de la pastelería. Así, Bellas Artes Bar funcionará de lunes a viernes de 9:00 a 2:00 y los fines de semana hasta las 4:00. En total, el polo emplea a 60 personas.
“La principal diferencia con los locales anteriores es que elegimos no darle la espalda al museo. Tratamos de ser la cafetería y restaurante del Bellas Artes, honrar el predio donde está el espacio y también a César Gianello, el arquitecto que diseñó el lugar en 1960, para el aniversario número 150 del país”, cuenta a LA NACION Diego Díaz Varela, dueño del Bellas Artes Bar. El local está a cargo de La Fernetería Alcorta, firma que ganó el 1 de junio de este año la tercera licitación por cinco años, renovables por cinco más, lanzada por la Asociación de Amigos del Museo Nacional de Bellas Artes, a cargo del predio.
En octubre del año pasado, Varela se contactó con la Asociación, que entre diciembre y enero sacó la licitación. La propuesta de La Fernetería fue crear un espacio que englobara a tres marcas que permitieran brindar una oferta variada y que atrajera a distintos clientes: desde los turistas hasta los runners que se mueven por la zona, como a los estudiantes de la facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires (UBA) y el público joven en general. A principios de junio, recibieron la adjudicación del local. La obra se extendió desde entonces y hasta hace un mes.
“Tenemos Trapizzino con café para llevar por un ticket promedio, para cualquier persona que pase por ahí, pero también hay bottle service con etiquetas costosas. Cubrimos el barrio con la cafetería, la parte juvenil y todo lo que implica un bar de alta coctelería”, explica Varela. El joven de 34 años tiene un vínculo cercano con el arte: su papá fue el presidente de la Fundación Pettoruti, donde actualmente él es tesorero. Antes de abrir el primer local de La Ferneteria, en Palermo Soho, tuvo un Centro Cultural junto a un grupo de amigos y abrió La Calle Bar, también ubicado en Palermo.
¿Qué lo impulsó a hacer una fuerte apuesta aún en plena pandemia de coronavirus? Según cuenta, en primer lugar, lo que captó su atención fue que se trata de “un local muy emblemático de la ciudad”. Por otro lado, asegura que la inauguración de Bellas Artes Bar es una forma de homenajear a su papá, que falleció hace 10 años y siempre estuvo relacionado con el arte. A su vez, otro factor que lo ayudó a confirmar la decisión fue que el espacio cuenta con 400 m² al aire libre, “algo clave en épocas de Covid”, dice.
En la reestructuración y diseño del espacio trabajó la arquitecta Pamela Goldszer de Estudio Pagoda, quien según Varela “resignificó la estética de La Fernetería”. “El alma del lugar es la barra central, eso es nuestra marca registrada”, señala. Bellas Artes Bar rescata la estética y la cultura italiana del siglo XXI. “Tomamos las raíces y las aggiornamos”, define el dueño. También explica que buscaron conservar algunos rasgos planteados por Gianello, el creador del espacio y cuenta que en el local hay algunos muebles confeccionados por él, como unas sillas.
La inauguración se llevó a cabo la semana pasada y contó con la presencia de referentes del arte y el espectáculo, gastronomía e influencers. Entre los invitados se encontraban Mike Amigorena, Lizardo Ponce, Pía Slapka, Joaquín Levinton, Mariana Genesio, Angie Landaburu, India Ortega, Fabián Cubero y Micaela Viciconte. El evento tuvo un show en vivo de Coti y Cande y concluyó con un set de Fran Tinelli. “Esperamos que nos vaya bien en el verano y que esta ola de coronavirus que ataca a Europa no nos pegue con fuerza y nos permita seguir adelante”, dice Varela.
Por Delfina Casali
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