Suplementos nutricionales ¿por qué la vida moderna los exige?
Una de las tendencias regionales quizá más interesantes, y que en los últimos tiempos todas las investigaciones de mercado coinciden en señalar, es que los más de 600 millones de consumidores latinoamericanos estamos cada vez mejor informados y más interesados –además de comprometidos– en todo lo que tenga que ver con la vida sana, el bienestar y la prevención de enfermedades a través de la adopción de hábitos saludables. Y en este escenario, las vitaminas y suplementos alimenticios (o VDS, del inglés Vitamins and Dietary Supplements) empezaron a jugar un rol protagónico, con el desarrollo de productos innovadores con mejores fórmulas y formatos. Según la investigadora de tendencias globales Euromonitor International, este año las ventas de suplementos alcanzaran los 5,5 mil millones de dólares en Latinoamérica, convirtiéndola en la segunda región mundial de mayor crecimiento en el sector.
El futuro ya llegó
Según el informe de Euromonitor, específicamente entre los argentinos las vitaminas y suplementos alimenticios se han convertido en una tendencia significativa dentro de un importante mercado de productos de consumo para la salud. Pero, ¿por qué los deportistas, embarazadas, niños y adultos con gasto energético alto los integraron a su rutina tanto como quienes llevan adelante una actividad normal? Esencialmente porque ahora sabemos que, incluso con una dieta en teoría óptima, la alimentación en los entornos estresantes modernos en realidad carece de muchos nutrientes, como resultado de la alteración genética de los cultivos, los cambios en las prácticas agrícolas, la exposición a agentes contaminantes y un largo etcétera; en definitiva, nuestros organismos requieren complementar lo que la comida nos aporta para vivir plenamente en el complejo día a día actual. Por eso es que los suplementos ya no solo están destinados a personas que atraviesan crisis de salud o momentos puntuales de la vida, sino que son una herramienta para tener más energía frente a las necesidades cotidianas. Un ejemplo claro es Simple Vitalidad – parte de la innovadora línea de suplementos creados en sinergia por Laboratorios Bagó y Grupo Arcor –: se trata de una combinación de vitaminas y minerales (vitaminas B, E, A y C, biotina, zinc, ácido fólico, selenio, yodo y más nutrientes) que optimizan el rendimiento físico y mental, favoreciendo la producción de glóbulos blancos elevando el sistema inmunológico, mejorando la salud de la piel y que para que sean fáciles de incorporar todos los días, vienen en pastillas de goma sabor frutilla.
Con tantos beneficios contenidos en un práctico bocado, no es sorprendente que la industria de las VDS esté mostrando un incremento explosivo: significa que los consumidores estamos decididamente orientados hacia los estilos de vida holísticos, naturales y basados en el bienestar a partir de una buena nutrición. Y que eso, afortunadamente, parece que ya no tiene vuelta atrás.
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