Gastó 20.000 dólares en un resort de longevidad, pero regresó más ansioso y confundido
Lo que comenzó como una exploración sobre salud preventiva, se convirtió en una revelación inesperada y frustrada; la experiencia de un periodista que puso a prueba
- 4 minutos de lectura'
Un periodista se sometió a pruebas médicas en Canyon Ranch, un centro de bienestar en Arizona, como parte de su cobertura del programa “Longevity8″, que promete transformar las vidas de las personas en solo cuatro días. Este lugar fue seleccionado por su enfoque único en optimizar la longevidad. Sin embargo, lo que prometía ser una experiencia para mejorar su salud y alargar su vida, terminó revelando diagnósticos inesperados.
Las dos caras del mercado de la longevidad
La prueba la hizo David Oliver, de USA Today. El retiro transcurrió entre pruebas y el paisaje soleado del desierto de Arizona, con temperaturas que Oliver sentía intensamente en su piel. El cronograma incluía evaluaciones exhaustivas, desde un estudio del sueño y pruebas de función pulmonar, hasta un monitoreo continuo de glucosa.
Hay distintas opciones, pero en general el costo es de 20 mil dólares por personas y 36 mil dólares para parejas. Un presupuesto considerable, pero esperable en este segmento del mercado de la longevidad. Oliver apunta que, a nivel mundial, este mercado tuvo una valoración de 25.100 millones de dólares en 2020. “Se espera que esa cifra alcance los 44.200 millones de dólares para 2030, según Allied Market Research”, señala.
Sorpresa: las malas noticias llegan rápido
La primera sorpresa llegó durante el desayuno. Tras realizar estudios de densidad ósea y composición corporal, la doctora Diane Downing compartió con él los resultados iniciales.
“Estás en el rango de osteopenia”, le informó Downing, lo que indica una densidad ósea más baja de lo esperado. Este diagnóstico suele aparecer en mujeres posmenopáusicas, no en hombres saludables de 32 años, lo que llevó a la profesional a cuestionar posibles factores: ¿genética? ¿Deficiencia de calcio? ¿Testosterona baja?
Oliver comentó en su artículo que practicaba ejercicios de alta intensidad y levantaba pesas, y que solo se había roto un dedo meñique en toda su vida. A pesar de su estilo de vida activo, la noticia lo dejó sorprendido.
Y no sería la única. La médica le informó que su composición corporal reflejaba un 27,7 % de grasa, lo que lo ubicaba en la categoría de sobrepeso. Mientras comía yogur griego con granola y frutas, sintió que su desayuno dejaba un sabor amargo.
Del bienestar a la ansiedad y confusión
Durante el programa, Oliver se sometió a una larga lista de pruebas adicionales: un escáner corporal DEXA, un control del sueño, pruebas de función respiratoria y más. El periodista relata que estaba convencido de que su estilo de vida saludable lo mantenía fuera de peligro y por ello esperaba que el programa solo le ayudara a desarrollar más músculo o a lidiar con su síndrome de intestino irritable. Sin embargo, la experiencia le enseñó una lección importante: no se deben sacar conclusiones precipitadas sobre la salud sin tener en cuenta todas las piezas del rompecabezas.
Semanas después, de regreso en casa, el equipo médico le dio seguimiento mediante una consulta virtual para revisar sus resultados finales. Los hallazgos fueron variados y, en algunos casos, inquietantes: Oliver padecía apnea del sueño moderada y presentaba un leve engrosamiento arterial, lo que podría aumentar su riesgo de enfermedad cardiovascular a largo plazo.
Además, detectaron signos de intolerancia a la lactosa y un riesgo elevado de celiaquía. Entre las recomendaciones, le sugirieron eliminar los lácteos por una semana para evaluar su reacción, aunque él se mostró escéptico. “Supongo que no lo sabré hasta que lo pruebe”, comentó.
Cuando saber más no es sinónimo de tranquilidad
En términos generales, el director de nutrición del centro, Eric Williamson, le aseguró que su salud estaba “por encima de la media”. A pesar del alivio que sintió al escuchar esta evaluación, Oliver no pudo evitar cuestionar la manera en que recibió los resultados. La información había llegado en partes, lo que generó frustración e incertidumbre, además de que lo hizo sentir ansioso y algo confundido ante tanta información. “Me pregunto si quienes participan en el programa ‘Longevity8′ están realmente preparados para procesar toda esta información sobre su salud”, reflexionó en su reseña en el medio.
A pesar de las conclusiones positivas, la experiencia dejó a Oliver con una valiosa advertencia: a veces, conocer más sobre la salud puede ser tanto una bendición como una carga.
Temas
Otras noticias de Agenda EEUU
Pronóstico del tiempo. Clima en EE.UU. hoy 23 de diciembre: así avanza la tormenta invernal en Nueva York
Reporte oficial de USGS. Último temblor en EE.UU. hoy: hora, lugar y epicentro del nuevo sismo, este lunes 23 de diciembre de 2024
Alto valor. ¿Podría Elon Musk comprar todos los equipos de las Grandes Ligas y la NFL?
- 1
Por qué el Gobierno no salió aún del cepo y la “prueba de fuego” que deberá afrontar en 2025, según Martín Redrado
- 2
Alberto Cormillot fue internado y su esposa compartió un video sobre su estado de salud
- 3
El restaurante que estuvo a punto de cerrar, pero se transformó en un símbolo de la “alta cocina” marplatense
- 4
Milei y Sturzenegger se aprestan a darle un fuerte golpe al “club de la obra pública”