Monotributo: el Presupuesto 2023 prevé un fuerte aumento del aporte a la obra social

El proyecto de ley de Presupuesto 2023 incluye la intención de aplicar un fuerte incremento en el valor del aporte que pagan mensualmente los monotributistas con destino a la obra social. La suba no sería para los anotados en todas las categorías del régimen impositivo simplificado, sino que se excluiría a quienes se ubican en las tres de ingresos más bajos (A, B y C).

Para quienes estén en los otros escalones de la tabla, es decir, en las categorías de la D a la K, el importe para la obra social dejaría de ser el actual, de $1775,18 (hasta ahora es para todos el mismo importe) para elevarse a cifras de entre $3638,26 (categoría D) y $10.505,29 (categoría K). En el caso de los categorizados como D, este aporte en particular se duplicaría, en tanto que para los demás los porcentajes que implicaría la suba llegarían hasta el 492% para quienes se dedican a una actividad comercial y registran ingresos mayores a $ 5.425.770,00 y de hasta $6.019.594,89 en 12 meses.

En la categoría D se ubican quienes tienen una facturación anual superior a los $1.557.443,75, por lo que el reajuste alcanzaría a quienes tienen ingresos mayores a esa cifra. Y siempre, claro, que estén incluidos en el sistema previsional y de salud del régimen simplificado. La aclaración vale porque hay monotributistas que, al tener también la condición de asalariados registrados, no pagan los aportes sociales como el que ahora se busca incrementar.

La inclusión de los monotributistas en el sistema de obras sociales sindicales fue históricamente un tema resistido por dirigentes gremiales, porque se advierte que, en función de los costos de dar servicios de salud y de las obligaciones de cobertura establecidas por la normativa, los aportes resultan muy insuficientes. El año pasado, desde la AFIP se elaboró un proyecto de ley para una reforma amplia del monotributo (una iniciativa que llegó al Congreso pero que, finalmente, no se aprobó), que incluía directamente la eliminación del componente de la obra social para quienes se fueran incorporando al régimen simplificado.

A diferencia del aporte con destino al sistema jubilatorio, que en cada una de las categorías es un 10% más alto que el del escalón inferior, el pago para la obra social es de igual cuantía para todos los anotados en el monotributo. En el caso de contribuyentes que contratan los servicios de una prepaga, el importe abonado en el régimen del monotributo puede asignarse al pago parcial de la cuota, con lo cual un incremento podría tener, para esas personas, un efecto neutro.

El artículo 118 del proyecto de presupuesto, que obtuvo dictamen en Diputados y que será llevado al recinto el martes próximo, indica que la suba de aportes sería a partir “del mes siguiente al de la publicación de la presente ley”. Y los montos consignados son los siguientes. Categoría D: $3638,26; categoría E: $4452,02; categoría F: $5145,02; categoría G: $5512,52; categoría H: $6615,02; categoría I: $8190, categoría J: $9166,53; categoría K: $10.505,29.

Para el inicio de 2023, en rigor, está previsto por ley que se actualicen los montos de los ingresos máximos para estar tanto en el monotributo como en cada una de las categorías de la escala. Y también se reajustan en cada enero los importes a pagar por el componente impositivo y por los aportes a la jubilación y a la obra social. El porcentaje de referencia para esa actualización es el incremento acumulado que, según la fórmula de movilidad, hayan tenido los haberes jubilatorios en todo 2022. Hasta ahora, concretados tres de las cuatro recomposiciones (aún falta la de diciembre, del cual no se conoce el porcentaje), el porcentaje de suba de los ingresos previsionales llega a 49,17%.

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