¿Poco o mucho? Así inciden en los precios los productos del campo

El impacto de los mayores precios del trigo o del maíz en el costo final de alimentos tales como pan, pastas secas, carne, leche o huevos es ínfimo dado que pierden relevancia a medida que van atravesando las distintas etapas de los procesos productivos. Según el rubro, una suba del 10% en los precios de los cereales puede impactar entre un 0,91% y un 7,5% en los valores finales, de acuerdo a los productos.

En cambio, la carga impositiva sí resulta relevante, sobre todo Ingresos Brutos e IVA que, en este último caso, “es un impuesto que pagan directamente los hogares y que representa entre el 10% y el 20% del precio final”.

Estas fueron las conclusiones a las que llegaron Adrián Gutiérrez Cabello y Agustina Ciancio, investigadores de la Escuela de Economía y Negocios de la Universidad Nacional de San Martin (UnSam), que analizaron la incidencia real de esas materias primas en el incremento del producto final.

En un informe, intentaron demostrar que el efecto tributario en la canasta familiar era marcadamente superior al de las materias primas.

La carne porcina, por ejemplo, con un coeficiente de conversión de 2,45 kilos de maíz por cada kilo de engorde, “requiere finalmente 3,02 kilos de maíz para generar un kilogramo de carne de cerdo como producto final, donde el kilo de producto final incorpora $53,4 en maíz (sin IVA)”.

“Una suba del 10% en el precio del maíz determinaría un incremento del 1,53% en el precio final sin IVA de la carne de cerdo”, destaca el documento.

Allí, el total de impuestos alcanza los $49,10 por cada kilo de carne porcina. Se destaca que casi “el 43% son Ingresos Brutos, un tributo que se paga en cascada”, un 23% de Ganancias, IVA (21%) y el 14% de impuesto a los Débitos y Créditos Bancarios”.

El pollo, en tanto, con un coeficiente de conversión de 1,67 kilos de maíz por cada kilo que aumenta de peso, el consumo del cereal que se requiere tiene un valor de $36,95, sin IVA. “Una suba del 10% en el precio del maíz determinaría un incremento del 2,92% en el precio final sin IVA del pollo”, indica el estudio. En cuanto a los tributos, son $22,17 por cada kilo de pollo. Un 39% es Ingresos Brutos, un 26% Ganancias y un 20% IVA.

En la carne vacuna, el informe detalla que se requiere 3,19 kilos de maíz para generar un kilogramo de carne bovina como producto final, donde el 12,5% del precio promedio sin IVA de los cortes de carne bovina corresponde a maíz.

“La suba del 10% en el precio de este cereal determinaría un incremento del 1,25% en el precio final sin IVA de la carne de vacuna”, indican. En cuanto al efecto impositivo, llega a un valor de $67,54 por cada kilo de carne al consumidor. Casi un 43% es Ingresos Brutos, 23% Ganancias y el 21% IVA.

Con una conversión de 0,29 kilos de maíz por cada litro de leche fluida, el documento destaca que se requerirá “0,31 kilogramos de maíz para generar un litro de leche como producto final”. El gasto en maíz para producir un litro de leche fluida es de $5,46, alrededor del 25% del precio por litro en los tambos.

Señala que, si “se compara con el importe que pagan los hogares, es el 9,1% de dicho precio, por lo que la suba del 10% en el precio del maíz determina un incremento del 0,91% en el precio final de la leche fluida”. El total de impuestos es de $9,11 por cada litro (15%), donde cerca del 43% corresponde a Ingresos Brutos”.

En relación al huevo, el gasto equivalente en maíz por cada huevo producido es de $1,59 ($19,17 por docena, sin IVA), un 18% del precio promedio.

“La suba del 10% en el precio de este cereal da un incremento del 1,8% en el precio final sin IVA de la docena de huevos. En tanto, el total de impuestos es de $12,92, con un 44% de Ingresos Brutos”, precisa el trabajo.

Incidencia del trigo

Por último, el rendimiento del trigo para elaborar harina es de 0,75 kilo de trigo. El precio en góndola de la harina es de $42,8 con IVA (Precios Cuidados). Por lo tanto, el documento señala que un incremento del 10% en el precio de este cereal “determina un incremento del 7,5% en el precio final sin IVA de la harina”.

En el caso del pan, por cada 10% que sube el precio del trigo, si se mantienen fijos los demás componentes de los costos de la panadería (energía, alquileres, entre otros), el pan aumentaría en un 1,59%.

Según la Cámara de Panaderos de General San Martín, la harina representa alrededor del 22% del costo de la elaboración del pan, “en consecuencia una suba en el precio de la harina del 10%, impactaría en el 2,2% en el costo”.

El total de impuestos alcanza un valor de $14,78 por kilogramo de pan, aproximadamente un 11% del precio sin IVA del producto final. En la carga tributaria un 52% es Ingresos Brutos, un 17% Ganancias, IVA (21%) y el 13% Débitos y Créditos Bancarios.

Finalmente, para las pastas secas, un aumento del 10% en el precio del trigo incrementaría el 2,6% los precios. En cuanto a los tributos, el valor alcanza los $18,38 por kilo de pasta seca, con el 37% de Ingresos Brutos, el 24% Ganancias, el IVA (26%) y el 13% Débitos y Créditos Bancarios.

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