Además, según un relevamiento del Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina (Ipcva), entre marzo de 2021 y marzo de 2022 la suba fue de 60%
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Los precios de la carne vacuna en Capital Federal y el Gran Buenos Aires tuvieron en marzo pasado la mayor suba del año con un 8,5% respecto de febrero.
Así lo relevó un trabajo del Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina (Ipcva) que agrupa a entidades de la industria, la producción y el comercio de carnes y en el que participa el Gobierno.
El guarismo de marzo, 8,5%, supera así a las subas de enero, 2,5%, y de febrero, 3,1%, que el Ipcva había relevado en sus informes anteriores en 80 carnicerías y 40 supermercados del área metropolitana.
En la comparación con los valores del mismo mes del año pasado, el incremento promedio de los cortes vacunos fue de 60%, según el mismo informe.
Sobre las carnes competidoras, el pollo tuvo un alza mayor que la carne vacuna en marzo pasado respecto de febrero, 15,1%. En cambio, la suba del pechito de cerdo fue menor: 4,7 por ciento. En la comparación anual, los aumentos fueron mayores para los cortes vacunos ya que el valor promedio de la carne aviar tuvo un aumento de 52,6%, en tanto que la carne porcina aumentó 51,1 por ciento.
Nivel socioeconómico
Al analizar por nivel socioeconómico el impacto del aumento de la carne vacuna en marzo respecto de febrero, el trabajo del Ipcva señala que las subas fueron mayores en las zonas de niveles bajos que en las de ingresos altos y medios. “En los puntos de venta que atienden en barrios de nivel socioeconómico alto –explica- los precios de la carne vacuna tuvieron alzas significativas, del +8,2%”. A su vez, en las zonas de nivel socioeconómico medio tuvieron un aumento de 7,8% y en las consideradas de ingresos bajos, la suba promedio fue de 9,7%.
“El comportamiento de los precios de la carne vacuna mostró pequeñas diferencias entre en las distintas zonas geográficas: se registraron alzas significativas de los precios en la Capital Federal y en todas las zonas del GBA. Las alzas de menor magnitud se dieron en la zona norte del Gran Buenos Aires; observándose las subas de mayor magnitud en la zona sur del GBA”, añade.
Por otra parte, al comparar el comportamiento de los incrementos entre carnicerías y supermercados, el informe destaca que en los pequeños comercios las subas fueron mayores que en las grandes superficies. Mientras que en las carnicerías relevadas por el Ipcva las subas promedio fueron de 8,9%, en los supermercados fueron de 7,8 por ciento. No obstante, en la comparación anual, los supermercados tuvieron mayores subas que las carnicerías: 63,3% contra 58,7% entre marzo de 2021 y marzo de 2022.
Cortes y canales de venta
Al analizar el comportamiento de los cortes según el canal de venta, el trabajo explica que “cortes como el peceto tienen un precio que resulta en cerca de $84 por kilogramo más alto en los supermercados con respecto a las carnicerías, mientras que la colita de cuadril tiene un precio aproximadamente $163 superior en los supermercados comparado con el precio observado en las carnicerías. En el caso del lomo, la diferencia se acerca a un nivel de $15, en este caso exhibiendo un precio superior en las carnicerías con relación a los supermercados. En los casos de los cortes de mayor consumo, como los cortes de la rueda utilizados en la preparación de milanesas, la diferencia de precios se acerca a los $98, en el caso de la nalga, siendo los precios más económicos en los supermercados; en carne picada los supermercados venden el producto a un precio $32 más alto que el de las carnicerías, mientras que, para el asado, los supermercados ofrecen el producto a un precio inferior en cerca de $96 por kilogramo al de las carnicerías. Las otras carnes tienen comportamientos opuestos: el pechito de cerdo resulta $9 más económico en las carnicerías; mientras que el precio del pollo fresco entero resulta inferior en $36 por kilogramo en las grandes superficies”.
En el detalle por tipo de corte con aumentos por encima del promedio, se destacan el osobuco, con una suba de 11,7% en marzo pasado respecto de febrero, y la cuadrada y la tortuguita, con 10,2 por ciento. A su vez, las subas inferiores respecto del promedio fueron para la picada común, 6,2%; el peceto, 6,4% y la tapa de asado, 6,6 por ciento.
El informe del Ipcva también destaca las diferencias regionales en los aumentos de la carne vacuna. Así como en Capital Federal y el Gran Buenos Aires la suba promedio fue de 8,5%, en Rosario y Córdoba los incrementos fueron mayores. Mientras que en la ciudad santafecina las subas llegaron a 10,5%, en la capital de la provincia mediterránea los aumentos promedio fueron de 11,2 por ciento.
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