Un jugador perdió en el Call of Duty y mandó al SWAT a la casa de su rival
Abatido en reiteradas ocasiones, un frustrado participante del juego on line se hizo pasar por Raphael Castillo, el joven de 17 años que padeció la broma pesada, y dijo haber asesinado a su madre y a su hermano
Frustrado por haber perdido varias partidas, un participante on line del juego Call of Duty se hizo pasar por su rival, un adolescente de 17 años llamado Raphael Castillo, y llamó al 911 con un mensaje escalofriante: "Asesiné a mi madre y tal vez mate a más personas". Ante esta amenaza, la policía de Long Island, Nueva York, movilizó a todo su equipo de emergencias, con ambulancias, patrulleros y hasta la unidad especial SWAT hasta el domicilio de Castillo, el supuesto atacante.
Cuando las autoridades llegaron a la casa de Castillo, en una operación que duró unas dos horas e involucró a más de 60 oficiales, no encontró respuesta del joven gamer. El despliegue llamó la atención de José Castillo, hermano de Raphael, que regresaba de un almuerzo y observó el movimiento inusual fuera de su casa.
"Un policía me dijo que alguien llamó a emergencias y dijo que alguien mató a su madre y a su hermano. Pero me preguntaba cómo era posible eso, si yo estaba con el oficial", agregó José Castillo, citado por The New York Post .
A su vez, dijo que su hermano no había dado respuesta porque no escuchó los llamados de la policía: con los auriculares puestos, aún estaba en una partida on line del Call of Duty.
Todo se había tratado de una broma pesada de un participante que quiso vengarse de su rival. Mediante el rastreo del número IP, el autor del falso llamado logró dar con el domicilio del joven Castillo.
Las autoridades policiales secuestraron la consola de Raphael para intentar encontrar alguna evidencia o registro electrónico que permita identificar al autor de la broma pesada.
"En este extraño mundo del swatting (como se conocen a los llamados de pedido de ayuda o amenazas falsas), alguien puede movilizar helicópteros, vehículos de la policía y hasta a la unidad SWAT para este tipo de entradas. Lamentablemente, es una práctica sofisticada y muy peligrosa", dijo Michael Tangney, el responsable de la policía de Long Island.