Teléfonos modulares, 5G y realidad virtual, en alza
La gran reunión anual, que convoca a 100.000 visitantes, mostró a qué le apostará la industria en este nuevo ciclo de competencia e innovación
BARCELONA.- Anteayer terminó en esta ciudad otra edición del Congreso Mundial de Móviles (MWC, por sus siglas en inglés), el encuentro anual de la industria de la telefonía móvil. Reúne a fabricantes de celulares, proveedores de equipamiento de infraestructura (las antenas de telefonía móvil y todos los componentes de los que dependen), compañías de software y servicios, operadoras, analistas y la prensa. Y vienen de, literalmente, todos los rincones del planeta; pocas industrias tienen un impacto tan grande en la población mundial.
En total, 100.000 personas se adueñan de esta ciudad durante cuatro días que son un caos para los lugareños. Un caos que, sin embargo, les deja una fortuna. La edición de 2015 aportó 450 millones de euros, y se nota. Todo está a disposición de "los que vienen al Mobile". Barcelona es la sede histórica del Congreso y lo será hasta al menos 2023 (la sede se licita cada cinco años), salvo que se rompa el contrato, cortesía de la huelga de operarios de subte el lunes (día de apertura) y el miércoles, que impactó en el resto del transporte, sobre todo en los taxis. La presidenta de la comunidad de Madrid ya ofreció su ciudad para el año próximo.
LG y Samsung fueron las compañías que eligieron este evento para hacer su presentación más fuerte. Xiaomi, la ascendente firma china, también presentó su teléfono estrella, pero lo hizo el miércoles, cuando el interés por el Congreso ya estaba en baja, y con eso se aseguró de no competir por los titulares de la prensa. Huawei, Alcatel, Sony y otras compañías también develaron modelos de teléfonos, pero sin el impacto de las surcoreanas.
LG, por ejemplo, sorprendió con el G5, un teléfono modular cuya base se abre para quitar la batería y reemplazarla por otro accesorio. Por ejemplo, parlantes, un grip para una cámara, una cámara avanzada... la lista es potencialmente infinita, aunque para que tenga algún interés LG deberá convencer a las compañías de que su tecnología propietaria es más atractiva que una funda. Dudas aparte (y apelando, quizás, al corazón nerd de muchos de los que estaban aquí), fue el gran tema de conversación durante la feria.
El otro tema importante fue la realidad virtual (VR, por sus siglas en inglés), un concepto muy popular en esta edición del congreso. Casi todos los fabricantes tienen hoy anteojos para ese fin (Alcatel, Lenovo, LG, Samsung, Sony), y los pasillos de la feria estuvieron repletos de demostraciones de algún producto que contribuye a la VR, sea un procesador para celular que ofrece mejor calidad con menos consumo de batería, proveedores de servicios o de contenidos, etcétera. Hace dos años pasó lo mismo, pero con el 3D. Veremos si esta vez el furor cuaja.
Pero la realidad virtual fue motivo de charla, además, por una foto. Durante la presentación del Galaxy S7, de Samsung, subió al escenario Mark Zuckerberg (Samsung y Facebook, dueña de Oculus Rift, son socios en el desarrollo de los anteojos Gear VR). Una foto oficial lo muestra caminando, sonriente, por un pasillo entre cientos de periodistas que no lo ven, porque tienen puestos unos anteojos de realidad virtual (una parte pequeña de la presentación del teléfono se hizo así). Los agoreros aprovecharon para marcar la ironía: uno de los hombres más importantes de la tecnología se pasea entre personas que están en un limbo virtual, ajenas a lo que los rodea, y es él quien les llevó -en parte- la tecnología para esos anteojos. Los tiene en un puño. La Matrix, un poroto.
La realidad, por supuesto, es más compleja. Facebook es un jugador importante en este rubro, pero no el único. En realidad virtual están Google (el que más hizo para popularizar el tema con sus anteojos de cartón, llamados Cardboard), Microsoft, HTC, Apple, Sony y varios más. Pocos dudan de la potencia de esta herramienta, pero no todos están de acuerdo en para qué se usará. ¿Videos, cine, periodismo, juegos, educación? ¿Todo eso y más? El mercado necesita maduración.
Google, por su parte, fue noticia por el anuncio de que, junto con varios de los operadores de telefonía móvil más grandes, buscará ofrecer un reemplazo para el SMS que lo traiga al siglo XXI, con una plataforma llamada RCS que vendrá preinstalada en los teléfonos Android. Para las operadoras es historia conocida: en 2012 crearon Joyn, un estándar abierto para frenar el avance arrollador de WhatsApp. Sería el mensajero que mataría a todos los mensajeros, y no llegó a dar dos pasos. RCS combinará mensajes, llamadas, compartir multimedia, etcétera. ¿Funcionará? Poco probable, sobre todo si tiene costo.
Como el año pasado, el Mobile World Congress tuvo otros dos temas preponderantes. Uno, el 5G, sucesor del 4G. ¿Qué ofrece? Todavía más velocidad de conexión y más eficiencia en el uso de recursos (lo que no se notará en el chat, pero sí al ver video online o descargar contenido), y menor latencia, el retardo que tiene un dato que viaja por la red celular hasta llegar a destino. Reducir la latencia a unos pocos milisegundos permitiría, por ejemplo, uno de los ejemplos clásicos al hablar de 5G: en una cirugía a distancia, la precisión requiere que la información (el corte que toma una cámara, por ejemplo) llegue al instante.
Otras noticias de Congreso Mundial de Móviles
Más leídas de Tecnología
Similares a los Ray-ban de Meta. Samsung tendrá su línea de anteojos inteligentes en 2025
Cuidado. Qué significa quitar la foto de perfil en WhatsApp, según un psicólogo
Auto clásico. Cómo se vería el histórico Dodge GTX modelo 2025, según la IA
Google. Así es juego interactivo que Google le dedica a la Luna de noviembre