En 2023 Starlink ofrecerá telefonía 5G satelital en Estados Unidos, y luego permitirá una conexión en cualquier parte del mundo
La compañía se suma a anuncios similares que ya hicieron Ericsson y Nokia; la ventaja con la que cuenta es su red de satélites de órbita baja, que ya están desplegados por todo el mundo
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SpaceX, la compañía de Elon Musk que desarrolla tecnología aeroespacial y que, entre otras cosas, tiene una red de internet satelital mundial, anunció ayer por la tarde un acuerdo con la telefónica estadounidense T-Mobile para proveer 5G satelital, es decir, sin que requiera una antena cercana para tener servicio. En rigor, los satélites funcionarán como antenas orbitales, en vez de estar ubicadas en tierra. Esto permitirá tener señal en zonas rurales o montañosas.
El sistema usará Starlink, la red de satélites de órbita baja de SpaceX (la que genera los “trencitos de satélites” que se ven en el cielo nocturno cuando son liberados en órbita), y servirá para ofrecer conectividad en zonas rurales en la mayor parte de Estados Unidos, incluyendo zonas muy remotas: alcanzará con tener una vista al cielo para recibir señal. También le brindará conectividad a los autos Tesla.
El servicio entrará en funcionamiento el año próximo en Estados Unidos una vez que se resuelvan algunos temas reglamentarios y tecnológicos, y esté en órbita la nueva generación de satélites (v2) que está desarrollando Starlink. Y no requerirá, del lado del usuario, un equipamiento espacial: transmitirá en las frecuencias de 5G convencionales que usan los teléfonos modernos. En esto se diferencia del servicio de Internet satelital que ofrece SpaceX, que sí requiere una antena; esto le permite un servicio de mayor velocidad.
Vía Twitter, Elon Musk adelantó que la nueva versión de SpaceX, capaz de vincularse en forma directa con los teléfonos, estará disponible más adelante para el resto del mundo, pero que no tendrá por ahora un gran ancho de banda, sino que estará limitada a 2 a 4 Megabits por celda: servirá para enviar mensajes de texto o hacer llamadas, pero no más. Una vez que funcione, la cobertura sería global: en el medio de la montaña, del desierto o del mar.
Note, connectivity will be 2 to 4 Mbits per cell zone, so will work great for texting & voice calls, but not high bandwidth
— Elon Musk (@elonmusk) August 26, 2022
Según detalla el comunicado de Starlink, el 90 por ciento de la superficie terrestre no tiene cobertura de telefonía de ningún tipo. Esto incluye, por supuesto, los mares, los desiertos y la Antártida: las redes actuales se circunscriben a las zonas habitadas o donde un número suficiente de personas transita el lugar como para justificar la instalación de una antena de telefonía. El 5G satelital aspira a cambiar esto. Modestamente; no sirve para ver Netflix por ahora, pero sí para estar conectados en cualquier lado.
No es la única compañía, pero corre con ventaja
El anuncio llega después de que en marzo último se aprobó el estándar 5G NTN, que justamente contempla la provisión de conectividad 5G desde el cielo. Starlink no es la única compañía de telecomunicaciones que planea algo así: hace ya varios años que la idea de usar satélites de órbita baja (como los que usa Starlink, aunque está lejos de ser la única; usan una franja que va de 200 a 2000 km de altura, aproximadamente) como antenas 4G o 5G está en la industria.
Un primer concepto de prueba fueron los globos Loon de Google, que llevaban una antena 4G para ofrecer cobertura desde la estratósfera (a 25 km de altura) en áreas rurales (donde poner una antena no es rentable por la baja cantidad de usuarios que tiene) o en zonas donde lo escarpado del terreno dificulta dar este servicio de telefonía móvil. El hecho de no tener nada que se interponga entre el celular y la antena facilita la conectividad y amplía el área de cobertura.
En julio de este año, Ericsson, Qualcomm y Thales confirmaron que el año próximo harán las primeras pruebas para ofrecer 5G desde el espacio. Las pruebas iniciales se harán en un entorno espacial emulado en Francia, donde se encuentra la mayor parte de la industria espacial europea.
En 2021 arreciaron los rumores de que el iPhone 13 tendría conectividad satelital provista por Globalstar: esa compañía anunció que ofrecerá 5G satelital desde una banda (la N53) que está presente en el módem que usa el iPhone 13 (entre otros teléfonos), algo que entonces no sucedió, pero que el año próximo se dará con los satélites de Starlink.
Quizá el diseño más ambicioso sea el de AST SpaceMobile, una compañía que busca ofrecer conectividad móvil satelital, usando unos satélites de órbita baja (a 700 km de altura) con múltiples antenas, en una suerte de panel desplegable de 65 metros cuadrados. Esto le permitirá dar servicio 4G y 5G (asociada con Nokia) a múltiples usuarios en simultáneo en un terreno enorme (aproximadamente 2 veces la superficie entera de la Argentina por cada satélite): el primer prototipo, Bluewalker 3, llegó a Cabo Cañaveral este mes, y está a la espera de su lanzamiento al espacio; la compañía cree que con 200 de estos satélites podría dar conectividad en todo el planeta, y usando las frecuencias estándar (es decir, sin requerir equipamiento adicional).
La ventaja clara con la que corre Starlink, claro, es que ya tiene una red de miles de satélites funcionando en todo el mundo, dedicada a la provisión de internet satelital, por lo que activar su servicio de telefonía móvil global solo dependerá de los acuerdos que logre con las diferentes compañías en cada país. En breve tendrá competencia: Amazon ya tiene programados más de 80 lanzamientos para poner en órbita su red Kuiper, con más de 3200 satélites planeados; y OneWeb, un pionero del sector, ya tiene 428 de sus 628 satélites en órbita, y en julio anunció que se fusionará con otra red, Eutelsat. Mientras, Starlink ya tiene 2800 satélites operativos en órbita. Apunta a tener 4000 en funcionamiento.