“Roban nuestros libros”: el desesperado pedido de miles de escritores contra ChatGPT
Alrededor de 8500 autores ya firmaron una petición, coordinada por el Author’s Guild, que denuncia el accionar de sistemas de inteligencia artificial
- 3 minutos de lectura'
Alrededor de 8500 escritores, entre novelistas de ficción, no-ficción y poesía, emitieron hoy un comunicado con duras críticas contra los sistemas que usan inteligencia artificial, como ChatGPT, por “robar” sus libros. Según denuncian, las empresas detrás de estos sistemas utilizan sus textos para entrenar a su IA.
Entre los firmantes se encuentra la consagrada escritora Margaret Atwood -El cuento de la criada-, y también otros como Jennifer Egan, Nora Roberts, Jodi Picoult, Louise Erdrich, Michael Chabon y Suzanne Collins.
No es la primera vez que escritores critican abiertamente a sistemas como ChatGPT. El jueves de la semana pasada, los escritores Paul Tremblay y Mona Awad, y la actriz Sarah Silverman, demandaron a la empresa de inteligencia artificial OpenAI, responsable del desarrollo de ChatGPT. El argumento es el mismo: haber usado sus obras sin permiso para entrenar el modelo de lenguaje, en un planteo judicial que interroga sobre las fuentes de contenido utilizadas para entrenar al sistema para generar texto a gran velocidad.
En este caso, el comunicado aclara que no hubo todavía una denuncia radicada. “Eso significaría un gasto enorme de dinero, que no tenemos”, dijo la directora del Author’s Guild, la organización que coordinó el comunicado, Mary Rasenberger, a NPR.
“Las tecnologías de IA generativa basadas en grandes modelos de lenguaje deben su existencia a nuestros escritos. Estas tecnologías imitan y regurgitan nuestro lenguaje, historias, estilo e ideas. Millones de libros, artículos, ensayos y poesía con derechos de autor proporcionan el ‘alimento’ para los sistemas de IA, comidas interminables por las que no ha habido factura. Estás gastando miles de millones de dólares para desarrollar tecnología de IA. Es justo que se nos compense por usar nuestros escritos, sin los cuales la IA sería banal y extremadamente limitada”, indicaron los firmantes.
Además de servir a la IA como entrenamiento, estos sistemas también pueden escribir en el estilo de cualquera de estos autores. Y varios libros publicados en Amazon, por ejemplo, fueron escritos por una IA y generaron ventas significativas. 2La introducción de la IA amenaza con inclinar la balanza para que sea aún más difícil, si no imposible, que los escritores, especialmente los escritores jóvenes y las voces de comunidades subrepresentadas, se ganen la vida con su profesión”, indicaron.
“Les pedimos a ustedes, los líderes de AI, que mitiguen el daño a nuestra profesión tomando los siguientes pasos”, dijeron los autores, y enumeraron:
- Obtengan permiso para usar nuestro material protegido por derechos de autor en sus programas generativos de IA.
- Compenser a los escritores de manera justa por el uso pasado y continuo de nuestros trabajos en sus programas de IA generativa.
- Compensen a los escritores de manera justa por el uso de nuestras obras en la producción de IA, ya sea que las salidas infrinjan o no la ley actual.
“Esperamos que aprecien la gravedad de nuestras preocupaciones y que trabajen con nosotros para garantizar, en los próximos años, un ecosistema saludable para autores”, cerraron.