Resumen semanal móvil: Apple renueva el iPad Pro, nuevo OnePlus 6T, Honor y Lenovo tienen sus sliders
LA NACIONRicardo Sametband
Qué es esto: la continuación del blog Movilandia que actualicé en forma semanal desde 2010 acá en LA NACION, pero que ahora se publica por esta vía, y en la que hago un resumen de las noticias sobre la industria de los celulares y afines que merecen destacarse. Algunas las publicamos como nota, otras no.
Esta semana hubo varias noticias interesante en lo que respecta a dispositivos móviles.
Primero, sin duda, está el iPad Pro, con más hardware, nuevo diseño (menos marcos, sin botón de inicio, bordes rectos) y la insistencia por parte de Apple -correcta- de que una tableta puede servir de reemplazo a una notebook en cada vez más situaciones; y que las limitaciones hoy están más en iOS que en el hardware que le da vida. La propia compañía lo afirmó al comparar sus ventas de tabletas respecto de las de notebooks de varios competidores (incluyendo la Surface de Microsoft, que fue la primera en explorar ese concepto).
Los nuevos iPad Pro son caros (más que los anteriores modelos), y por ese dinero es posible comprar una notebook delgada y liviana; pero en lo que refiere a tabletas de alta gama no tiene quién le haga sombra, del mismo modo que Amazon se adueñó del segmento más económico, y el resto (Samsung y Lenovo, sobre todo) van y vienen en el medio. La llegada de tabletas con chips ARM y Windows 10 complica aun más la comparación.
Otra noticia importante respecto de Apple es que la compañía publicó sus reportes trimestrales: 46,9 millones de iPhones en el tercer trimestre del año (lo mismo que hace un año); 9,7 millones de iPads (6 por ciento menos que hace un año) y 5,3 millones de Macs (2 por ciento menos que hace un año). El precio promedio de venta del iPhone, no obstante, subió a 793 dólares, contra los 619 dólares de hace un año. Vende la misma cantidad, pero a mayor precio, así que factura mucho más. A futuro, no obstante, Apple dejará de informar estos datos: sólo dará números de facturación. Ya no tendremos el dato preciso de cuántos teléfonos vendió (como hoy no sabemos cuántos Apple Watch lleva vendidos) y habrá que depender de las estimaciones. Es una señal de que en términos de volumen (unidades) la compañía no espera seguir creciendo. También es una tardía decisión estratégica: Samsung no informa cantidad de teléfonos vendidos hace años (y fue muy criticada cuando lo anunció); Huawei y Xiaomi sólo publican números anuales (y en ambos casos, porque les conviene, ya que vienen con fuertes tasas de crecimiento); Microsoft hace tiempo que dejó de decir, por ejemplo, cuántas Xbox vende.
Un día antes de lo de Apple, OnePlus presentó el OnePlus 6T, la renovación de su smartphone. La compañía tiene una cadencia semestral de actualización, y es un concepto interesante. Las diferencias entre el OP6 y el OP6T son mínimas: el nuevo tiene pantalla casi sin notch y sensor de huellas digitales integrado a la pantalla, un poquito más de batería, algo más de almacenamiento base; el resto (procesador, cámara, tamaño, rendimiento) es idéntico. Le falta conector de audio analógico. Así, la compañía logra ofrecer dos alternativas de venta y, en la iteración, integrar las novedades -como el sensor de huellas invisible- con mayor velocidad. Parece estar teniendo éxito: el anuncio de que en Estados Unidos estará disponible con la operadora T-Mobile generó colas para comprarlo, algo notable para un teléfono que vende de a pocos millones al año.
La tercera noticia que reflejamos en LN Tecnología tiene que ver con el Motorola One, el segundo teléfono de la compañía con Android One (la versión de Android "pura" que Google promueve como alternativa a sus Pixel). El Motorola One es un experimento: con un precio y un hardware similar al Moto G6 Plus, busca ir al público más fiel de la marca -el que compra equipos de gama media, valora la relación costo/beneficio del segmento- y ofrece algo para los que son un poco más sofisticados y entenderán que los dos años de actualizaciones del sistema operativo, y los tres años de parches de seguridad provistos por Google, son un valor en sí mismo. Las empresas, por ejemplo: Android One funciona bien como vehículo corporativo por esto mismo. La llegada del Motorola One a la Argentina es, también, un premio para la marca, que tiene un tercio de las ventas en el país (InfoTechnology) algo notable para una marca que, a nivel mundial, cada año vende un poquito menos.
Hablando de ventas: ya están los reportes de ventas mundiales de smartphones para el tercer trimestre del año. Samsung sigue primera, aunque pierde algo de terreno (y está casi desaparecida del mercado chino), Huawei se queda por segundo trimestre consecutivo con el segundo puesto, Apple queda tercera (aunque el pico de ventas del iPhone nuevo entra en el último trimestre calendario del año). Xiaomi se acomoda en el cuarto puesto. Un punto importante, aquí, es que las ventas a nivel mundial se contrajeron entre un 6 y un 8 por ciento, en parte por menores ventas en China y en India, los dos mercados más grandes. (IDC, Strategy Analytics, Canalys, Counterpoint)
Una razón posible para el freno en ventas es un concepto que no es nuevo, pero que vale recordar: la gente cambia los teléfonos con cada vez menos frecuencia. En Estados Unidos, el ciclo de recambio del smartphone ya ronda los tres años (2,9 años, el caso del iPhone). Esto no sucede sólo en Estados Unidos; hace unos meses en Corea del Sur comentaban lo mismo: 31 meses de ciclo de renovación, y 33 meses en un futuro próximo. Como con las PC, el hardware hoy hace mucho más de lo que necesitamos; salvo para algunas tareas, el software ya no lo agota como antes, y por eso su longevidad es mayor. (WSJ, Korea Times)
Hablando de iPhone: los modelos 8, 8 plus y X también sufren de la degradación de la batería con el uso, y acá también Apple ralentiza el equipo para asegurar su estabilidad (si necesita más energía que la que le puede proveer la batería, puede colgarse; la solución es reducir los picos de demanda). Con iOS 12.1 apareció la opción de activar o desactivar esta función en los modelos del año pasado; Apple dice que aún así el impacto debería ser mucho menos notable que con un iPhone 6. (The Verge)
Más teléfonos: como Xiaomi con el Mi Mix 3, y como la propia compañía había adelantado hace unas semanas, Honor (la marca secundaria de Huawei) presentó el Honor Magic 2, que también es un slider mecánico: la pantalla se desliza hacia abajo para develar la cámara frontal, lo que le permite evitar el notch (la muesca donde hoy van los componentes frontales del equipo). El resto del teléfono está basado en el Mate 20, con triple cámara trasera (lente normal, gran angular y monocromática), pantalla AMOLED de 6,4 pulgadas (FHD+) con sensor de huellas integrado, chip Kirin 980, 6 u 8 GB de RAM, 3400 mAh de batería.
Pero pará, ¿no había otro slider que habían mencionado al mismo tiempo? Sí, el Lenovo Z5 Pro. Quizá la mayor diferencia respecto de los otros es el chip, un Snapdragon 710, es decir, no es tope de gama, lo que le permite ofrecer algo novedoso por menos de 300 dólares (en China). Lo acompaña con 6 GB de RAM, doble cámara trasera, pantalla Super AMOLED de 6,4 pulgadas (y sensor de huella integrado), batería de 3350 mAh. Finalmente cumple con una promesa que hizo la compañía para el Z5 (que el 95 por ciento del frente quede cubierto por la pantalla) y que recién con este equipo lo logra. Que no sea un tope de gama es, quizá, lo más significativo: la industria está explorando el uso de un teléfono con mecanismo deslizante como alternativa al notch y para recuperar algo de "sorpresa" en los nuevos teléfonos, incluso de gama media ("mirá, es todo pantalla, y se mueve"). Veremos si en los próximos meses llega la marea slider o queda como una anécdota.
¿Más teléfonos? Claro que sí: el Nubia X tiene dos pantallas (Nubia es la marca secundaria de ZTE). Pero la trasera no es de tinta electrónica, como ofrecía el YotaPhone: es una pantalla completa, normal, salvo porque a) está en el dorso del teléfono, y es más chica que la frontal y b) desaparece cuando está apagada. La idea es anular el uso de la cámara frontal, para poder tener una pantalla sin la muesca negra en el frente del equipo, y usar esa pantalla trasera -idéntica en funciones a la frontal, aunque más pequeña y de menor resolución- para sacarte una selfie. Sí, una locura. (The Verge)
La semana próxima, dicen, Samsung presentará su smartphone con pantalla flexible (se dobla como un librito). Una compañía en China (Rouyu) decidió adelantarse. Esperemos que el diseño de Samsung sea un poco más sofisticado.
¿Vuelven los teléfonos diminutos? Puede ser; son, seguro, algo de nicho. En Xataka tienen un buen repaso por varios modelos -algunos demasiado pequeños- que han aparecido a lo largo de los años. Muchos de ellos están pensados para una función que sería fácilmente reemplazable con un reloj con 4G. (Xataka)
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