Qué queda con la desaparición de Nokia como fabricante independiente de celulares
Se concretó la venta de su división de teléfonos a Microsoft; marca el fin de una época y deja un panorama en el que parece haber poco lugar para las compañías que sólo hacen teléfonos
Adiós, División de Dispositivos y Servicios de Nokia. Hola, Microsoft Mobile . Menudo camino te espera ahora que la compra por 7100 millones de dólares propuesta en septiembre último finalmente se concretó hoy, tal como habíamos adelantado el lunes .
Los más de 30.000 empleados en todo el mundo que Nokia (que sigue existiendo) tenía abocados a esa división ahora se suman a los más de 100.000 empleados de Microsoft. Esto incluye a los equipos que diseñaron (y siguen creando) celulares, smartphones y tabletas, y que por ahora seguirán en Finlandia. La marca seguirá también, lo mismo que la creación de nuevos equipos y el soporte para los que ya están en el mercado.
Atrás deberán quedar las discusiones de por qué Nokia terminó donde está; las razones son múltiples, aunque hay motivos externos (el cambio de paradigma sobre qué es un teléfono celular, en la segunda mitad de la década pasada) e internos (la compañía predijo ese cambio de paradigma, e intentó comandarlo, pero buscó hacerlo a su ritmo y no pudo capitalizar sus ideas cuando el resto de la industria cambió).
Pero antes que hacer un repaso melancólico por sus múltiples logros -que incluyen 15 años de dominio del mercado- vuelvo sobre algo que me llamó la atención en febrero de 2011 , cuando Stephen Elop comunicó que apostaba el futuro de la compañía sobre Windows Phone.
Cambia la geografía y los jugadores
Con la venta de Nokia, se termina la presencia europea en el mercado de móviles . Sí, en el continente quedan algunos fabricantes ( Jolla en Finlandia, Geeksphone y bq en España) pero no tienen -por ahora al menos- ni un atisbo de la presencia que alguna vez tuvieron Nokia, Ericsson, Alcatel, Sagem, Siemens y otros.
Pero hay algo más: primero, una polarización geográfica. El diseño de hardware y de sistemas operativos es multicultural hace ya tiempo, pero las decisiones grandes se toman en dos zonas bien definidas.
En América del Norte se crean los sistemas operativos (Android, iOS, Windows Phone, BlackBerry 10), mientras que el grueso de los dispositivos móviles -con la excepción de los de Apple y, ahora, Microsoft Mobile- son diseñados en Asia (y todos se producen allí). De los diez fabricantes más grandes de celulares, la mayoría es asiática: coreana (Samsung, LG), japonesa (Sony) o china (Lenovo, Huawei, Alcatel, ZTE, etcétera).
Segundo, ya no parece haber lugar para los fabricantes que sólo hacen celulares. Alguna vez el mercado estaba comandado por los especialistas (Nokia, BlackBerry, Motorola, Palm). Hoy ninguno de los diez más grandes hace sólo teléfonos móviles. De los históricos, sólo dos (BlackBerry y HTC) siguen en ese camino, y no está demasiado claro por cuánto tiempo, más allá de que estén implementando estrategias para volver al crecimiento; BlackBerry está oficialmente en venta, y HTC está, en el mejor de los casos, en un proceso de transición.
Los nuevos fabricantes chinos (como Xiaomi o Meizu) todavía muy localizados y con ventas interesantes pero relativamente menores, están empezando a abrir su juego con servicios, productos asociados al teléfono y periféricos (routers, etcétera).
Todo el resto o hace como mínimo computadoras (Apple, Samsung, Lenovo, Sony) o está diversificada (Huawei y ZTE en infraestructura; Alcatel-TCL con pantallas y otros dispositivos, Microsoft con el software, consolas y tabletas; Sony, Samsung y LG con pantallas, electrodomésticos, etcétera). Si se cumplen los vaticinios, a mitad de año habrá que incluir aquí también a Amazon, con tabletas, lectores de libros electrónicos y uno de los mayores supermercados digitales del mundo.
Nokia, es cierto, tenía también su pata de infraestructura (y es la que mantendrá ahora), pero hasta que estuvo claro que su camino en el mundo móvil tenía fecha de cierre estuvo intentando venderla.
Otros gigantes que intentaron comandar sin éxito este mercado, hoy central a la informática personal, son los fabricantes históricos de PC; Dell (precursor de las pantallas de 5 pulgadas con una tableta, y una serie de smartphones de ventas decentes) y HP, que desperdició WebOS y ahora intenta volver con Android; Acer y Asus han tenido una evolución un poco más exitosa, pero extremadamente lejos de lo que su tamaño en el mercado de las PC debería asegurarles.
Este día, así, marca el fin de una época, pero también deja en claro que estamos -por suerte- en un momento de grandes cambios y en donde todavía no está nada dicho. Y eso es, como mínimo, interesante, y permite una competencia que beneficia a todos los usuarios.