Qué hacer ante un dispositivo electrónico pasado por agua
Una serie de consejos y recomendaciones para saber cómo actuar ante un teléfono, tableta o computadora que se mojó
Junto a los golpes, caídas y el polvo, uno de los principales enemigos de los dispositivos electrónicos, dada su naturaleza que combina circuitos con un suministro de energía, son los líquidos. No es ninguna novedad dentro del mundo tecnológico, con la taza de café, el mate o el vaso de gaseosa en el teclado como principales culpables.
En los últimos años, dada la popularidad de los dispositivos móviles, estos equipos enfrentan situaciones de riesgo al ir más allá de las cuatro paredes de una habitación. Una lluvia fuerte o un descuido en una pileta son algunos de los casos que los usuarios sufrieron en sus teléfonos inteligentes, tabletas y notebooks.
No siempre se puede recuperar un equipo que sufrió el avance del agua, pero una serie de consejos ayudarán a evitar mayores daños y pérdidas de datos personales.
Hacer una copia de seguridad
Nunca está de más volver sore una de las medidas preventivas clave en el uso de los equipos electrónicos, en particular en teléfonos móviles, tabletas y computadoras. No nos ayudarán a recuperar el dispositivo siniestrado, pero esta acción evitará lamentar la pérdida de datos personales ante cualquier incidente, sin importar si fue por el paso del agua, una caída o un extravío.
En anteriores ediciones hicimos una serie de recursos para realizar una copia de seguridad tanto para las computadoras personales como para los teléfonos móviles.
No encender el equipo
Si se mojó, los ansiosos deberán contener sus ganas de volver a comprobar la integridad del equipo. Hay que apagar el dispositivo electrónico lo antes posible; no se deberá encender el teléfono móvil o computadora portátil bajo ningún motivo.
Es más, los especialistas recomiendan no volver a conectar el equipo a la corriente eléctrica y desconectar la batería, si lo permite, para evitar cualquier cortocircuito provocado por la presencia de líquidos.
En esta etapa, remover la tarjeta de memoria y SIM en los teléfonos móviles es una muy buena opción. Son partes pequeñas que se secan mucho más rápido que un dispositivo electrónico cerrado, y se pueden volver a verificar y utilizar en otro equipo.
No exponer el equipo al calor
Tampoco es recomendable caer en la tentación de usar un secador de pelo con aire caliente para scaer el equipo. Tampoco hay que dejar el teléfono o computadora bajo el sol. Lejos de acelerar el proceso de recuperación del equipo que sufrió el paso del agua, este método puede dañar aún más sus componentes internos.
De nuevo, la paciencia es una virtud en estas situaciones: una vez desconectada la batería, el paso siguiente será secar el exterior del equipo con paños, toallas o papeles absorbentes, para luego dejarlo a la sombra.
Un método casero para absorber la humedad
Una modalidad que suele deparar buenos resultados es cubrir el equipo mojado con arroz crudo en un recipiente cerrado herméticamente. De esta forma, los granos absorberán la humedad presente en el equipo accidentado. Aunque es mucho más fácil conseguir una caja de arroz para probar este método, también se pueden utilizar bolitas de gel de sílice, presente en sobrecitos que acompañan las cajas cerradas de varios dispositivos electrónicos o alimentos sellados al vacío (y que son venenosos, atención).
Los equipos se vuelven impermeables
Para extender la vida útil del equipo y para evitar la irremediable visita al servicio técnico ante estos accidentes, los principales fabricantes del mundo tecnológico presentan computadoras, tabletas, teléfonos y accesorios resistentes al agua. Lenovo y Toshiba, entre otros fabricantes de computadoras, presentaron diversos sistemas para evitar el ingreso de líquidos a través del teclado, con un mecanismo que permite drenar su presencia fuera del equipo, sin acceder a las partes más sensibles.
Con experiencia en este tipo de accidentes por las recurrentes caídas de líquidos, Logitech desarrolló un teclado que, además de ser resistente al agua, también permite su lavado, para remover aquellos restos de café, té, jugo o cualquier otra bebida del distraído usuario.
Por su parte, los teléfonos móviles y tabletas han sido los principales beneficiarios de esta tendencia a fabricar dispositivos a prueba de agua. Sin rendijas de ventilación, este proceso es mucho más fácil de implementar, como lo demuestran la línea Defy de Motorola, el Sony Xperia Z y una versión del Samsung Galaxy S4 a prueba de líquidos.
También existen tratamientos para impermeabilizar un dispositivo electrónico que no cuente con una protección ante líquidos. Empresas como HzO y Liquipel ofrecen en Estados Unidos un servicio que convierten a cualquier tableta o teléfono móvil en un equipo a prueba de chapuzones. Por su parte, existen diversas carcasas y fundas que permiten proteger a los equipos en este tipo de situaciones, como los accesorios que ofrece LifeProof.
Demostración del sistema HzO en la feria CES 2013
A menos que uno sea un aficionado a los deportes extremos (y aún así existen accesorios protectores para este tipo de situaciones) siempre es recomendable extremar los cuidados en el uso de los dispositivos electrónicos.
Y, aunque suene obvio, un último consejo: no usar el teléfono en situaciones de riesgo para el celular. Según un estudio realizado por Google, el 39 por ciento de los encuestados admitieron usar el teléfono en el baño, mientras que un reporte de Plaxo de 2011 señala que el 19 por ciento de los consultados reconocieron que su celular terminó en el fondo del inodoro.
Al final, nada es tan urgente ni importante que no permita tomarse unos minutos de desconexión, y menos en este tipo de situaciones.