Qué es Glorify, la app que busca fortalecer la conexión con Dios y que apoyan Kris Jenner, Michael Bublé, Jason Derulo y los fundadores de Candy Crush
La app, que acaba de llegar a América Latina, recibió una inversión millonaria para consolidar globalmente su objetivo: mejorar el tiempo de devoción diaria de los cristianos, adaptándose a su estilo de vida y necesidades personales
- 7 minutos de lectura'
Si nos conectamos digitalmente a diario para realizar tantas actividades de la vida cotidiana, ¿por qué no utilizar la tecnología para mejorar el acceso de los fieles a Dios?
Esto es lo que pensó la app Glorify, diseñada para ayudar a las personas a fortalecer su conexión diaria con Dios, que acaba de anunciar recientemente el cierre de US$40 millones en fondos de la Serie A liderada por a16z, con la participación de SoftBank Latin America Fund, K5 Global e inversión de destacadas personalidades del entretenimiento, entre los que se encuentran Kris Jenner, Michael Bublé, Jason Derulo y los fundadores de Candy Crush.
Los nuevos fondos de la compañía se utilizarán para ayudar a la app -con sede en Londres y más de 2 millones de descargas globales- a escalar sus operaciones, expandir su equipo a nivel internacional y crear contenido nuevo y exclusivo.
La compañía fue fundada por Ed Beccle y Henry Costa en 2020. Henry es hijo de Ken Costa –un banquero de inversiones veterano y líder religioso quien también es presidente de Glorify– y comprendió rápidamente el atractivo masivo del uso de la tecnología para abordar el creciente problema de la ansiedad y el sueño, sin embargo, creía que había espacio “para algo aún más satisfactorio desde una perspectiva cristiana”.
De hecho, un gran foco de atención de la firma es América Latina, donde ya opera en México, Ecuador, Brasil y más recientemente, Argentina. En una región donde más del 80% de la población adulta afirma profesar el cristianismo, Latinoamérica tiene un potencial enorme para el uso de la plataforma.
Ed Beccle, por su parte, lleva 22 años como emprendedor apasionado por el diseño y el producto. Recaudó más de 100 millones de dólares para las empresas que fundó con millones de usuarios en EE. UU., Reino Unido y Brasil. Beccle explica que siempre supo que muchos cristianos tenían el deseo de orar y crear una estructura en torno a su tiempo devocional, pero a menudo se veían “presionados por el tiempo o sin los mejores recursos a mano”.
La idea de la app surge entonces como una manera fácil de crear un hábito diario de conexión con su fe. La app fue construida a partir de la premisa de que tener pequeños y regulares momentos de fe ayudan a las personas a combatir la ansiedad, dormir mejor y apoyar su bienestar general, al tiempo que permite reflexionar y disfrutar de su tiempo de devoción diariamente y en sus propios tiempos y maneras.
La app es intuitiva y fácil de usar. Al abrirla, los usuarios son recibidos con una cita inspiradora, seguida de una rutina que consiste en pasajes bíblicos breves, un devocional y una reflexión. Desde ahí pueden continuar su camino espiritual explorando contenido adicional, como música exclusiva, oraciones y meditaciones.
Soluciones basadas en la fe
El mercado de soluciones basadas en la fe ha estado creciendo en el último tiempo y la Serie A de Glorify muestra el impacto masivo que se puede lograr cuando se une a la tecnología.
“Cuando se nos ocurrió por primera vez el concepto, sabíamos que estábamos metiéndonos en algo grande, pero cuando nos reunimos con los inversionistas, quedó claro que habíamos logrado capturar un rayo en una botella y atender la necesidad de tantas personas en estos tiempos difíciles que estamos viviendo”, cuenta Beccle. Según explica, gran parte de lo que existe como oferta en términos de aplicaciones, no resuena con lo que la gente siente. “Creamos una experiencia que no solo ayuda a los cristianos a maximizar su tiempo de devoción diario de una manera que se adapta a su estilo de vida y necesidades personales, sino que también capacita a los jóvenes y mayores, a abrirse a una vida más espiritual”.
Connie Chan, socia general de Andreessen Horowitz –inversionistas de la app– explica que la comunidad cristiana es increíblemente social y global, pero históricamente ha estado desatendida por las nuevas tecnologías. “Esto cambia con una aplicación móvil de primera clase que ofrece experiencias individuales y comunitarias, diseñada específicamente, con contenido exclusivo y conectando a cristianos en nuevos mercados alrededor del mundo”.
El impulso de la pandemia
En un momento de la historia donde el peso específico de las religiones está en caída y otras creencias están en alza (como las “energías”, la astrología o el mindfullness), el apoyo de usuarios y de capital a una app basada en la fe cristiana parece, al menos, llamativa.
“Todos los días recibimos comentarios de los usuarios que nos dicen cómo la aplicación ha cambiado sus vidas e inculcado hábitos positivos. Este sentimiento se repite en todos nuestros canales. Los comentarios en las redes sociales son muy positivos. Definitivamente hay un aumento de personas que buscan una conexión espiritual”, explican desde Glorify y agregan que saben que en Argentina el 80% de la población se identifica como cristiana pero a pesar de ello, a muchos les resulta difícil conectarse con su fe con regularidad. “Les damos a los cristianos de hoy, que han estado luchando por hacer tiempo para conectarse con Dios, una forma sencilla de ayudar a conectarse y explorar su fe a diario”.
La app comenzó a gestarse después de que Henry Costa reconociera el aumento de las aplicaciones de meditación como Headspace o Calm. Para el momento del lanzamiento, la pandemia golpeó, por lo que su éxito también se vincula con los coletazos emocionales y psicológicos derivados de ella.
“La gente definitivamente tenía una mayor ansiedad, pero es difícil decir si esto será un impacto temporal. Sin embargo, en mi opinión, la búsqueda de una fuerte conexión espiritual es en muchos casos una constante a lo largo de la vida. Simplemente se vuelve más fuerte durante algunos momentos”, señala Beccle.
Fe digital o fe presencial: esa es la cuestión
Si bien la pandemia afianzó los canales digitales como manera de conectar fieles con su fe, es interesante analizar qué rol puedan jugar las instituciones cristianas –fuertemente apoyadas en lo físico y lo presencial– frente a una propuesta que refuerza la fe, pero de manera virtual.
“Realmente creemos en la iglesia local, el poder de la comunidad y el impacto que puede tener en las personas vidas. Estamos aquí para ayudar a los cristianos de todas las denominaciones a practicar su fe en sus propios términos, pero entendemos que la gente está en movimiento y que llegar a la iglesia a veces puede ser difícil”, afirman y aclaran que no buscan reemplazar a la iglesia, pero esperan poder crear una herramienta que asistentes a la iglesia de todo el mundo puedan usar todos los días, y “que se sumen también aquellos que no pueden ir de manera presencial”.
Los fundadores tienen grandes planes para revolucionar el espacio de fe, entre ellas nuevas funciones sociales y de personalización junto con el aumento de la biblioteca de contenido exclusivo y ofertas de música y artistas.
Michael Bublé, inversor de la aplicación, afirmó que donde sea, necesita y busca la conexión con Dios. “Ya sea que esté en el estudio, en la calle o incluso con la familia, es increíblemente desafiante crear espacio para un tiempo devocional –afirmó–; es una herramienta para encontrar momentos a lo largo del día para conectarnos con Dios en nuestros propios términos”.
Temas
Otras noticias de Tecnología
Más leídas de Tecnología
Clave. Los trucos de WhatsApp más simples y prácticos que son fáciles de aplicar
Infancias. Cómo activar el "modo Peter Pan" en WhatsApp
Similares a los Ray-ban de Meta. Samsung tendrá su línea de anteojos inteligentes en 2025
Cuidado. Qué significa quitar la foto de perfil en WhatsApp, según un psicólogo