Profesionales trans: Trans-Ti, una empresa de servicios digitales emplea únicamente a personas del colectivo LGBT+
Daniel Coletti y Vanesa Perelló fundaron Trans-TI, una compañía que brinda servicios digitales a empresas y que, de las 20 personas que integran el staff, 19 son del colectivo travesti/trans
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PARA LA NACIONDébora Slotnisky
El 55% de las personas trans y no binarias latinoamericanas sondeadas por Bumeran este año reconoce haber sufrido una situación de violencia y acoso en su trabajo. Por otra parte, un 56% de este grupo dice haber recibido violencia psicológica, y un 25% comentarios inadecuados sobre su identidad de género en el ámbito laboral.
“Esos datos me parecen más bajos comparados con los que se observa en la sociedad. Nuestra experiencia nos marca, incluso, que hasta los individuos más voluntariosos, al relacionarse con personas de este colectivo comete errores involuntarios, y eso genera exclusión”, cuenta a LA NACION Daniel Coletti, un hombre cis, que es cofundador y director ejecutivo de Trans-TI, una compañía que brinda servicios digitales a empresas y que, de las 20 personas que integran el staff, 19 son del colectivo travesti/trans.
Este emprendimiento surge en 2018 con la idea de crear una firma que, además de ser rentable, genere un impacto social concreto. “Elegimos ayudar a este colectivo porque nos movilizan las cuestiones de género, y porque las estadística y la vulnerabilidad de este sector en particular es más elevado comparado con lo que se ve en otros”, comenta Coletti, y se refiere en plural porque cofundó Trans-TI con su esposa, Vanesa Perelló, que es una mujer cis.
Trabajo digital
La organización brinda servicios digitales como monitoreo de red mediante un NOC 24x7 que usa tecnología para mantener un ojo en los servicios, bases de datos, software, firewall y red atendido por personas bilingües. Entre otras propuestas, también brindan servicios de back-office para resolver volúmenes de trabajo bajo demanda, ya sea auditoría de llamados telefónicos grabados, generación de demanda, subtitulado de video, organización de información, y entrenamiento de algoritmos de machine learning.
Adicionalmente, la firma hace reclutamiento para empresas que desean sumar gente del colectivo travesti/trans. “Esto es un desafío porque la cantidad de postulantes es limitada por varios motivos, entre ellos porque se trata de personas que por lo general no tienen estudios avanzados producto de la discriminación y exclusión que han vivido”. Por otra parte, las compañías que quieren ser más diversas e inclusivas deberían previamente sensibilizar a sus colaboradores para que todos se sientan cómodos”, comenta
Dicho esto, Trans-TI recibe postulaciones de personas del colectivo travesti/trans que busquen insertarse laboralmente. De la misma manera, uno de los propósitos de la firma es servir de puente entre el desempleo hacia una empresa grande. “Cada vez que hay un pedido de reclutamiento lo ofrecemos primero internamente para que nuestro staff pueda crecer”, acota el entrevistado.
En esta línea, también ofrecen capacitaciones sin costo. Así es como unas 350 personas al año aprenden sobre testing de software y automatización de procesos, entre otras habilidades digitales.
Tendencia
Coletti menciona que hasta 2019, desde el colectivo el 90% no tenía acceso a un trabajo formal, el 79% vive de la prostitución, 24% cuenta con el nivel secundario completo, 60% abandonó los estudios por razones de violencia y discriminación y más del 80% no tiene obra social o medicina prepaga, entre otros datos. Al respecto, observa que Argentina está evolucionando en todo lo que respecta a inclusión. “Si bien nos falta mucho, somos un disruptivo por una serie de medidas que se vienen tomando desde hace un tiempo, comenzando por el cambio de DNI, que ha marcado un hito para el colectivo LGBT+”, señala Coletti.
Dado estos beneficios es que Coletti puede ofrecer un salario acorde al mercado para su plantilla pero, al verse beneficios de ciertas cargas sociales como incentivo desde el Estado para lograr la inclusión del colectivo, puede ofrecer tarifas competitivas. “Esto y sumado al interés de muchas compañías por hacer un aporte concreto en la sociedad, hace que nos seleccionen como proveedores, porque hay empresas a las que les resulta más fácil generar un impacto de esta manera, que contratando directamente a personas del colectivo trans”, detalla.
A modo de conclusión, el cofundador de Trans-TI señala que es importante entender la vulnerabilidad que impacta en ciertos colectivos y, la sociedad debería tener más empatía respecto a la situación general de las personas travesti/trans. Lo que vemos en nuestra empresa es que se trata de miembros que trabajan con esmero, son detallistas y valoran mucho el puesto de trabajo que han conseguido. Además, tienen una voluntad superior a la media para enfrentar sus desafíos”, concluye.
Por Débora Slotnisky
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