NASA y SpaceX: los dos inusuales objetos que deberá traer a tierra la Crew Dragon
Si todo sale bien, hoy a las 11.30 los astronautas Bob Behnken y Doug Hurley habrán acoplado a la Estación Espacial Internacional su naveEndeavour, el nombre con el que bautizaron a la cápsula Crew Dragon en la que despegaron ayer, propulsados por un cohete Falcon 9 de SpaceX. Se llama Endeavour, como el transbordador espacial en el que ambos volaron (en diferentes misiones) hace algo más de diez años, también con rumbo a la Estación Espacial Internacional.
Hurley y Behnken pasarán una buena temporada en el espacio: entre uno y tres meses, dependiendo de qué tareas terminen haciendo y qué pruebas adicionales se hagan a la cápsula Crew Dragon. Como máximo, 110 días.
A su vuelta, en la misma cápsula que los llevó hasta allí, deberán llevar a casa dos objetos muy particulares: uno es el peluche Ziggy, que llegó a la Estación Espacial Internacional en marzo de 2019 a bordo del primer vuelo de la Crew Dragon (en ese entonces, sin tripulantes). Además de ser un regalo simpático para los astronautas que estaban entonces en la Estación, sirvió para medir, de forma visual, la microgravedad en la cabina de la cápsula Crew Dragon.
Super high tech zero-g indicator added just before launch! pic.twitter.com/CRO26plaXq&— Elon Musk (@elonmusk) March 2, 2019
Yes buddy, that’s your Mother Earth. Isn’t she beautiful? pic.twitter.com/qY6KDbAIwb&— Anne McClain (@AstroAnnimal) March 4, 2019
En este segundo vuelo, ayer, el protagonista fue un dinosaurio de peluche; no está claro si regresará a la Tierra lo antes posible o si pasará un tiempo más prolongado en la EEI. Tanto Doug Hurley como Bob Behnken están casados con astronautas, y ambos tienen hijos amantes de los dinosaurios; en elegido por ambas familias para acompañar a sus padres fue Tremor.
* two children.I got tripped up by the "we both have two boys" as two each, not two total.&— Mika McKinnon (@mikamckinnon) May 30, 2020
En lo que refiere a peluches, no obstante, el premio se lo lleva Karen Nyberg, la astronauta casada con Doug Hurley, que también pasó por la Estación Espacial en 2008 y 2013, y usó partes de una remera y de estuches de comida para hacerle, en órbita, un peluche a su hijo.
NASA astronaut Karen Nyberg, (DM-2 Astronaut Doug Hurley's wife), Expedition 37 flight engineer, made this stuffed dinosaur toy aboard the International Space Station, using scraps of food-packaging liners and a T-shirt. She sent images of it to her young son on Sept. 22, 2013. pic.twitter.com/YqI8XsqmWi&— Meghan Woodcock (@NASAWonderWoman) May 29, 2020
La esposa de Bob Behnken es Katherine Megan McArthur, y como astronauta fue la encargada de los ajustes finales del telescopio Hubble y es considerada la persona que lo tocó por última vez.
Capturar la bandera
El otro objeto es una bandera estadounidense, que tiene un significado muy particular: estuvo a bordo del primer transbordador espacial y del último (el STS-135, que también viajó a la Estación Espacial Internacional)
La idea, explicó en una entrevista Doug Hurley (que fue quien la dejó allí en la STS-135, y será ahora quien la recupere) era que estuviera allí hasta que fuera recuperada por una misión de nuevo formato que despegara del Kennedy Space Center; cuando voló esa misión ya sabía que era la última del trasbordador espacial.
"Será una suerte de "capturar-la-bandera" para los vuelos espaciales comerciales", explicó en 2011 el entonces presidente Barack Obama, "así que mucha suerte a quien capture la bandera". Por ese entonces los cálculos eran que vuelos espaciales de compañías privadas llegarían en poco tiempo, y que la NASA no sufriría un interregno de casi diez años, volando sus astronautas en naves Soyuz rusas hasta el despegue de ayer, el primero en 9 años hecho en suelo estadounidense con una nave fabricada en ese país.
Así que la bandera tiene, para la NASA, un signficado muy particular. Aumentado, además, porque conforme pasaron los años alguien, entre 2014 y 2015, guardó la bandera en la Estación Espacial Internacional (que, como su nombre lo indica, es un espacio compartido por múltiples naciones) y la perdió de vista.
Casi un lustro después notaron su ausencia, y debieron apelar a la excelente memoria del astronauta Butch Wilmore, que desde la Tierra pudo indicarle a la tripulación en la Estación dónde la había guardado unos años antes en su paso por el espacio.