¿Mario no es italiano? El creador de la consola NES revela la historia detrás del emblemático personaje de Nintendo
A mediados de la década del 80 Nintendo se convirtió en el referente de la industria de los videojuegos de la mano de la consola hogareña NES. Masayui Uemura fue el ingeniero encargado de desarrollar el hardware del exitoso equipo Nintendo Entertainment System.
También conocido como Family Computer, Famicom o simplemente Family Game en muchas otras regiones con versiones clonadas, fue el equipo que definió el sistema de cartuchos de videojuegos. Y en este punto, el videojuego que convirtió a Nintendo en una compañía global fue Super Mario, un título que estaba protagonizado por el emblemático plomero con un bigote y nariz prominente.
"Super Mario Bros fue el primer videojuego que ofreció una mirada kawaii en los videojuegos. Donkey Kong fue el primero que lo hizo en las máquinas arcade en las salas recreativas, pero Super Mario es citado a menudo como el primer juego que conecta un estilo de diseño tierno y adorable junto a una música atractiva", dijo Uemura en una entrevista de Matt Alt, autor del libro Pure Invention: How Japan’s Pop Culture Conquered the World, que explora la historia detrás de los dispositivos y creaciones que trascendieron las fronteras niponas y llegaron a todo el mundo.
Lo más llamativo en esta historia es que, contrario a lo que se cree de forma extendida, Mario no es italiano, según Uemura, sino que fue el resultado de un diseño marcado por las limitaciones técnicas propias de la incipiente plataforma e inspirado en la cultura animé y manga.
Japonés naturalizado italiano
"Super Mario Bros no está ambientado en Japón, sino que el personaje es japonés. Mario suena italiano, pero no lo es. Shigeru Miyamoto (el creador de Super Mario) y su equipo fueron capaces de capturar esta ambigüedad con recursos limitados para dibujar al protagonista. Todo este trabajo sirvió de base para que los futuros diseñadores tuvieran los recursos necesarios para expresarse en un videojuego. Era todo un mundo nuevo", agregó Uemura.
El nombre original de Mario era Jumpman (hombre saltarín) y nació en 1981 con Donkey Kong; recién en 1983 cambió su nombre a Mario por Mario Segale, el italiano que le alquilaba unos galpones a Nintendo en Estados Unidos, y que se peleó con varios ejecutivos de Nintendo exigiendo el pago de la renta. Segale murió en 2018.
Para el juego Mario Bros, Miyamoto decidió que por el escenario en el que se desarrollaba la acción, era lógico que Mario fuera un plomero italiano viviendo en Nueva York.
La evolución de Super Mario
"Ellos definieron las reglas que debía seguir un diseñador en el nuevo mundo de los videojuegos. Hasta entonces no había un desarrollo de personajes. De forma inconsciente, desarrollaron ideas inspirados en el animé y el manga. Eso fue una gran virtud, porque el resto del mundo no contaba con esa influencia, que fue determinante para desarrollar nuestras ideas", agregó el ingeniero detrás de la exitosa consola NES.
En base a las limitaciones técnicas de la época, el protagonista del videojuego logró tener vuelo propio hasta transformarse en el emblema de Nintendo. Uemura se retiró de la compañía japonesa en 2004 y desde entonces se desempeña como el director del Centro de Estudios de Videojuegos de la Universidad Ritsumeikan en Kyoto. Una gran parte de sus estudiantes aún no habían nacido cuando fue lanzado Super Mario en 1985, y aún se sorprende por las reacciones que tienen con esta primera versión del juego protagonizado por el plomero bigotón.
"Cuando veo lo felices que están, tengo la impresión de que este juego encierra algún secreto. Estoy seguro de que la gente que lo juegue dentro de 50 o 100 años seguirán viéndolo entretenido", opinó Uemura cuando fue entrevistado por Satoru Iwata, por entonces CEO de Nintendo, en la celebración de los 25 años del videojuego en 2017.