La ONG argentina Ecoinclusión recibe US$ 600 mil por sus ladrillos ecológicos hechos de botellas de plástico
Ganó un certamen regional de Google.org, el brazo filantrópico del gigante de las búsquedas; es una idea que nació en Córdoba para reciclar botellas de plástico
Rigoberta Menchú Tum, premio Nobel de la Paz (1992) y jurado de la final de Desafío Google.org, fue la encargada de anunciar ayer en la Ciudad de México, el ganador de este certamen regional para ONGs con proyectos de innovación social. Destacó la participación de la juventud y dijo: "Que sea un ejemplo para los jóvenes de América Latina para aspirar a un planeta limpio". Segundos después dio la gran noticia: el ganador es la ONG argentina EcoInclusión, una de las tres finalistas argentinas del certamen (junto con el proyecto Nilus para evitar el desperdicio de comida y la ONG Señas en Acción).
Los argentinos de @EcoinclusionONG y los ladrillos de plástico reciclado (hecho granitos mezclado con cemento). Y esa tonada cordobesa! pic.twitter.com/5xvyaQgvgs&— ?uli Schulkin (@chulkinet) 16 de noviembre de 2017
La organización social liderada por 3 jóvenes cordobeses (entre 27 y 28 años) propone la fabricación de ladrillos ecológicos a través del reciclaje de botellas de plástico. "Venimos a México con ganas de ganar, somos los más chicos y los más nuevos. No lo esperábamos. Ahora vamos a poder hacer realidad lo que queríamos. Necesitamos de todas las conexiones y todas las redes para poder expandirnos y tener contacto con otras ONGs", dice entusiasmado Fabián Saieg (licenciado en Ciencia Política), uno de los fundadores de la ONG, junto a Leandro Lima (músico) y Leandro Miguez (licenciado en Recursos Humanos).
EcoInclusión resultó finalista con otras 15 ONGs en la primera instancia del certamen. En total se presentaron 2300 proyectos para esta primera edición regional del Desafío Google.org. Fue el voto del público el que decidió que sea esta organización quien representara a la Argentina en la final que tuvo lugar en el Papalote Museo del Niño, en Ciudad de México.
El premio
Como finalista, EcoInclusión recibió US$ 350.000 y por ser ganadora, se sumarán US$ 250.000 (en total, 600.000 dólares). Asimismo, el equipo de Google trabajará en conjunto con la organización durante un año y medio.
"Desde el día que nos eligieron finalistas, nos llamaron de un montón de lugares. Estamos trabajando en armar una gran planta de reciclaje en Córdoba, ya contamos con un terreno. Todavía no seleccionamos las ONGs con las que trabajaremos. Pero lo primero que tenemos que hacer es estandarizar nuestro proceso y luego evaluar qué organización se adapta a los criterios para poder replicarlos y en qué localización hacerlo", explica Saieg.
En la planta modelo de Córdoba, según explican desde EcoInclusión, serán tratadas 15 mil toneladas de plástico por mes. "Para eso vamos a colocar primero 50, luego 100 y después 150 puntos verdes en la ciudad. Luego expandiremos a ciudades de alrededores. Esto ya está casi aprobado por la municipalidad (Córdoba)", señala el joven.
Los puntos verdes son contenedores "campana", en donde las personas podrán depositar sus botellas de plástico PET. "El gobierno de Córdoba ya nos ha dicho que nos van a apoyar con campañas de concientización, entre otras cosas", afirma Saieg.
El segundo ganador de Desafío Google.org es la ONG Movimiento Peruanos Sin Agua, que creó un sistema de captación de agua en regiones secas, y el tercero, Patrulla Aérea Civil Colombiana, que propone medicina ambulatoria para zonas vulnerables sin acceso a hospitales. Estas organizaciones, sumando el dinero de la primera etapa, recibirán 500.000 y 450.000 dólares, respectivamente. A las finalistas Corporación Red de Alimentos (Chile) y Sin Fronteras (México), se les entregará 400.000 dólares en total.
El jurado de la final de Desafío Google.org fue integrado por Rigoberta Menchú, Gabriel Baracatt, director ejecutivo de Fundación Avina, Anamaría Schindler, de Ashoka América Latina (red que fomenta el emprendimiento social), el actor Diego Luna; Jacqueline Fuller, presidenta de Google.org, Adriana Noreña, vicepresidenta de Google para Hispanoamérica y Shakira (quien no pudo asistir a la final por problemas de salud, con su voz).
Este certamen ya tuvo lugar en Alemania, Australia, Brasil, Canadá, Corea del Sur, Estados Unidos, Francia, Japón y el Reino Unido, y es la primera vez que se realiza de forma regional. Los proyectos presentados reflejaron problemáticas sociales que pueden resolverse a través del uso de la tecnología.
Noreña, quien trabaja en Google hace 12 años, confesó: "En esta edición, nos impactó el ingenio de los proyectos". Asimismo, destacó el uso de la inteligencia artificial para brindar la mejor información posible con chequeo de datos reales, para cada proyecto.
¿Qué es Google.org?
En 2005, los fundadores de Google, Sergey Brin y Larry Page, crearon Google.org antes de que la empresa saliera a la Bolsa. Separaron 1% de sus ganancias netas cada año para financiar a organizaciones sin fines de lucro a través de esta iniciativa. "Desde el comienzo fue una combinación de recursos y dinero, y también de googlers, nuestros empleados. En todos nuestros proyectos brindamos financiación y googlers para acompañar a organizaciones sin fines de lucro", señala en diálogo con LA NACIÓN Jacqueline Fuller, presidenta de Google.org y quien ha trabajado anteriormente en la fundación Bill & Melinda Gates.
Google.org ofrece aproximadamente 100 millones de dólares en donaciones filantrópicas cada año, US$ 1000 millones en publicidad gratuita y pone a disposición 100.000 horas de trabajo voluntario de los empleados de la empresa. "Hay varias maneras de que los googlers se involucren. Por ejemplo, una vez al año tenemos el Google Serve. Es un mes en el que alentamos a que cada uno de ellos se ofrezca como voluntario. Además, por cada una de nuestras organizaciones sin fines de lucro, tenemos un representante de Google.org, que es un googler que crea un lazo con la organización y se interioriza en su proyecto, en lo que necesitan y los ayuda a encontrar googlers que tengan las capacidades específicas que ese socio podría necesitar", explica Fuller.
Desde la compañía, creen fuertemente en que todo el mundo necesita tener alfabetización digital básica, en lo que refiere al pensamiento computacional. "Además, hoy todos quieren usar el aprendizaje automático (machine learning) para buscar soluciones. Hay instancias en las que tanto la inteligencia artificial como el aprendizaje automático son aplicables en el sector sin fines de lucro. En Francia trabajamos con una organización que usa inteligencia artificial para observar grandes sets de datos sobre el empleo y entender cuáles son los puestos de trabajo disponibles y cuáles son las capacidades que se necesitan. Así, la gente que busca trabajo, puede saber qué capacidades y atributos necesita para acceder al empleo", dice Fuller.
También destaca la idea de que las mejores soluciones a los problemas locales son creadas por los innovadores locales. "Estamos muy abiertos a los temas que traen todas las ONGs y buscamos innovadores que tengan un registro comprobable que demuestre que, si se trabaja para tener éxito, se pueda escalar. Creemos que podemos acompañarlos desde nuestro lugar de googlers y ayudarlos", señala.
A futuro, Fuller plantea trabajar fuertemente en dos áreas elementales: educación y puestos de trabajo. "Vamos a seguir investigando. También, la inclusión siempre fue muy importante para nosotros, ya sea con las mujeres y niñas, los derechos de los LGBT, refugiados e inmigrantes", finaliza.