La Justicia brasileña suspende a Telegram por incumplir una orden sobre grupos neonazis y le impone una multa de 200.000 dólares diarios
Un tribunal brasileño ordenó el miércoles la suspensión temporal en el país de la aplicación de mensajería encriptada Telegram hasta que cumpla la orden de compartir información sobre grupos extremistas y neonazis que utilizan la plataforma
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Un tribunal brasileño ordenó el miércoles la suspensión temporal en el país de la aplicación de mensajería encriptada Telegram hasta que cumpla la orden de compartir información sobre grupos extremistas y neonazis que utilizan la plataforma.
La decisión, dictada por el juez Wellington Lopes da Silva en un tribunal del estado de Espirito Santo, también aumentó a un millón de reales (197.780 dólares) diarios la multa por incumplimiento.
La policía federal solicitó la orden de suspensión después de que Telegram incumpliera una decisión judicial anterior de entregar datos sobre dos grupos neonazis de la aplicación acusados de incitar a la violencia en las escuelas.
Debido al incumplimiento por parte de Telegram de la orden, el juez dijo que las empresas de telecomunicaciones del país debían empezar a suspender el acceso al servicio de mensajería y la descarga de la app.
Los medios locales informaron que la policía federal solicitó los contactos de los administradores y miembros, así como los números de teléfono de los usuarios de esos grupos. Telegram sólo cumplió “parcialmente” enviando información limitada el pasado viernes, según el sitio web de noticias G1.
Telegram se presenta como una aplicación de mensajería centrada en la velocidad y la privacidad, y afirma que sus chats secretos especiales utilizan un cifrado de extremo a extremo que no se almacena en sus servidores.
La petición de la policía de “poner fin al secretismo” de los grupos se hizo en el marco de una investigación sobre los ataques de extremistas a escuelas en Brasil en las últimas semanas, en los que murieron cinco personas.
Telegram no respondió inmediatamente a la petición de comentarios.
El año pasado, el juez del Tribunal Supremo Alexandre de Moraes ordenó la suspensión de la aplicación, argumentando que Telegram se había negado repetidamente a acatar las órdenes judiciales de congelar las cuentas que difundían noticias falsas e incumplía la legislación brasileña.