Facebook cooperará con el Congreso de EE.UU. para investigar si Rusia influyó en las elecciones
El gobierno de ese país investiga si Rusia compró espacios publicitarios en Facebook para hacer propaganda por un candidato determinado
Facebook va a aportar información en el Congreso sobre los anuncios comprados desde Rusia para influir en las últimas elecciones. Durante una emisión en directo en su plataforma, Mark Zuckerberg ha explicado que en el futuro van a dar más datos sobre cómo ha sido la compra de propaganda en el servicio y cómo lo van a corregir en el futuro. Durante los siete minutos de su intervención ha explicado que pronto los usuarios de Facebook podrán saber quién ha pagado por los anuncios de política. "Me importa muchísimo el proceso democrático y proteger su integridad. Me preocupa que usen nuestras herramientas para minar nuestra democracia. No podemos apoyarlo", declaró.
"El público merece saber de manera concreta qué pasó en las elecciones de 2016. Hemos concluido que compartir los anuncios que hemos descubierto encaja con nuestra obligación de proteger la información de los consumidores", ha escrito Colin Strech, responsable legal de Facebook, en un blog corporativo.
Zuckerberg, que estaba de baja paternal tras el nacimiento de su segunda hija, ha emitido desde su despacho en Menlo Park: "Siempre va a haber gente mala en este mundo y no podemos impedir que interfieran en los gobiernos, pero sí podemos hacerlo más complicado. Vamos a hacerlo mucho más difícil".
Los anuncios online carecen del mismo control que en televisión o radios. Durante esta semana los demócratas han pedido a Facebook y varias empresas de Internet que asuman reglas más rigurosas. Se espera que en octubre sean llamados al Senado para explicar mejor la situación. El próximo miércoles Twitter declarará a puerta cerrada.
Facebook ya ha adelantado algunos datos: más de 3000 cuentas relacionadas con la trama rusa compraron publicidad para influir en los votantes. En julio aseguraron no tener pruebas de ello. Un mes después, anunciaron que 470 perfiles y páginas estaban relacionadas con la Agencia de Investigación de Internet de Rusia, una organización vinculada al Kremlin.
El fundador de la red social desgranó sus planes para detener esta anomalía. Durante este año van a contratar 250 personas para el equipo de seguridad y entablarán relaciones con comisiones electorales en todo el mundo, puso como ejemplo la colaboración actual con Alemania. Pero también reconoció sus límites: "No podemos comprobar lo que va a decir alguien antes de que lo ponga y no creo que es algo que pueda asumir nuestra sociedad. Libertad también significa no tener que pedir permiso y decir lo que pensamos. Si se rompen las normas de nuestra comunidad o la ley, entonces sí tienen que asumirse las consecuencias".