Europa pondrá fin al roaming en 2017, y defiende con reservas la neutralidad de la red
Al viajar dentro de la Unión Europea se pagará lo mismo que el servicio local; la nueva legislación considera que todos los servicios online y sus usuarios son iguales, pero contempla también darle prioridad a algunos productos especiales
A partir del 15 de junio de 2017, se podrá hablar por teléfono, acceder a Internet o enviar un SMS dentro de Europa con el mismo costo de una llamada local: se van a desmantelar las tarifas de roaming dentro de la Unión Europea, informaron hoy las autoridades, reporta la agencia DPA.
Representantes de los países de la Unión Europea (UE) y del Europarlamento en Bruselas negociaron durante 12 horas, hasta bien entrada la noche, según comunicó Letonia, que actualmente ejerce la presidencia semestral de la UE.
La eliminación del roaming se hará en dos pasos: en un primer paso se iniciará una reducción de las tarifas de roaming a partir del 30 de abril de 2016. El actual sistema de precios máximos se sustituirá por la tarifa local con suplementos.
Las empresas telefónicas tendrán que ofrecer una reducción a los usuarios que viajen a menudo al extranjero y llamen, se conecten a Internet y envíen SMS y no sólo en desplazamientos ocasionales.
A partir de junio de 2017, deberán ser eliminadas, y quienes viajen dentro de Europa deberán pagar lo mismo por una llamada, un mensaje o la conexión a Internet que en su país.
El comisario europeo de Economía y Sociedad Digital, Günther Oettinger, saludó el acuerdo como un "avance". "Las tasas de roaming en Europa ya no encajan en nuestra época", dijo Oettinger, también responsable de infraestructura digital. "Para el usuario no debería haber diferencia alguna si utiliza medios digitales más allá de su frontera", agregó.
Defensa de la neutralidad de la red, pero con dudas
Las críticas, sin embargo, llegaron con la regulación que se prevé imponer sobre la velocidad y la calidad de los servicios de Internet. La UE defiende específicamente el principio de la neutralidad de la red, que contempla que todo el tráfico de Internet sea tratado de la misma manera, y que no se beneficie un servicio -o un usuario- por sobre otro.
Sin embargo, la legislación prevé que los proveedores de conectividad puedan ofrecer servicios especiales (como televisión por Internet, telemedicina), siempre y cuando estos servicios no afecten el funcionamiento del resto. Esta medida no ha gustado a los activistas, que exigen que todos los datos en Internet sean enviados a los usuarios con la misma velocidad, siguiendo el principio de neutralidad de la red .
Por una parte, la UE quiere que los proveedores de Internet traten de la misma manera los diferentes tipos de tráfico, pero que esté permitido cerrar el paso de contenidos sólo en casos excepcionales, como en un ataque cibernético.
A su vez, determinados servicios especiales, que requieren un ancho de banda mínimo para funcionar correctamente, tendrán prioridad, lo que podría ser el caso del servicio automático de llamadas, según dijo una europarlamentaria que participó en las negociaciones. El requisito para ello es que haya suficiente capacidad en la red (es decir, que no afecte al resto). Los activistas ven este acuerdo de forma crítica, ya que falta definir qué se entiende por servicios especiales.
La nueva legislación contempla que una compañía ofrezca acceso a servicios digitales absorbiendo su costo dentro del pago mensual (usar Facebook sin que haya que pagar la conexión, etcétera), algo que muchos consideran una posición contraria a la neutralidad de la red.
A pesar del acuerdo, todavía quedan por concretar algunos detalles. Cuando esa negociación concluya, los países de la UE y el Parlamento tendrán que confirmar el acuerdo informal al que se llegó en la madrugada de hoy.