El filántropo dio una conferencia en San Diego, California, y puntualizó que el ChatGPT podrá desplazar a los docentes; “La IA será un buen tutor como cualquier ser humano”, señaló
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No caben dudas de que la inteligencia artificial llegó para quedarse y adentrarse en la vida de las personas. Con un método sencillo y práctico, esta herramienta tecnológica empezó a brindar soluciones a problemas cotidianos. Aunque desde lo discursivo parece ser un método que allana el camino, algunos expertos ponen el ojo en su excesivo uso y en las consecuencias que puede generar.
A la hora de buscar voces autorizadas en el tema, Bill Gates, fundador de Microsoft, es uno de los intelectuales que más se adentra en estos mecanismos y alerta a la población sobre posibles cambios drásticos que pueden afectar, en este caso puntual, a la educación.
En una conferencia que brindó en San Diego, California, el magnate se detuvo en la “revolución de la inteligencia artificial” y en su constante avance. Más allá de alabar sus bondades y utilidades, Gates puso un freno a su entusiasmo y aclaró que, en dos años, el ChatGPT estará tan capacitado como un maestro para brindar clases y enseñar a leer y escribir a las personas.
“Las herramientas de IA llegarán a esa capacidad, y serán buenos tutores, como cualquier humano”, señaló Gates sobre el ChatGPT para dimensionar el avance de esta herramienta que, con tan solo un click, puede contestar preguntas y ser de suma utilidad para el usuario.
A su vez, el desarrollador de software aseguró que “los chatbots basados en IA tienen un entrenamiento increíble a la hora de leer y escribir” y que, en un tiempo cercano, estarán a la altura de un maestro para dar clases en aulas y así generar una “revolución” aún más impactante en el terreno pedagógico que puede causar un problema en el terreno de la docencia.
“En poco tiempo, los chatbots de IA serán más asequibles y accesibles. Esto debería ser un nivelador de educación, ya que tener acceso a un tutor humano es demasiado caro para la mayoría de los estudiantes”, detalló Gates en una conferencia que tuvo un gran alcance por su presencia y también por sus declaraciones que vislumbran un cambio radical en una estructura afianzada como lo es la docencia en los colegios o institutos educativos.
Pese a esta aseveración, Gates aclaró que en el “corto plazo” no cree que la IA pueda tener tal preponderancia para sustituir a los docentes, aunque sí aclaró que los profesionales de la educación deberán formarse para complementar la sapiencia de la IA y “utilizarla en su favor y que no se les vuelva en contra”.
Por último, bajo la misma temática, el filántropo también indicó que, en cinco años, algunos oficios podrían prescindir de la mano del humano y ser tomados, íntegramente, por la IA. Dentro de ese listado, Gates agregó carreras como la administración, la contaduría, el periodismo, la literatura y las relaciones públicas como posibles víctimas de esta revolución tecnológica que cada vez está más instalada en las sociedades de todo el mundo y llegan con el objetivo de ayudar -¿y desplazar?- a los seres humanos que le dedican tiempo de su vida al estudio de cada una de estas ramas.
LA NACION