Desde Israel, dos jóvenes argentinos buscan reducir los embotellamientos de tránsito usando un algoritmo para mejorar el funcionamiento de los semáforos
Trabajan para Intelligent Traffic, un emprendimiento con base en Tel Aviv que utiliza la inteligencia artificial para predecir los patrones de comportamiento de los automóviles y prevenir casi la mitad de los embotellamientos manipulando los semáforos de forma inteligente.
Guido Trajterman y Ariel Bercovich tienen 19 años y hasta hace unos meses estudiaban en la Escuela ORT de Buenos Aires de donde egresaron. Inquietos, se embarcaron en un programa de 8 meses llamado Israel Start-Up Experience que está orientado a jóvenes de entre 17 y 20 años con ganas de involucrarse en el ecosistema emprendedor del país de Medio Oriente.
“A nuestra edad, lo habitual es estudiar alguna carrera o trabajar, pero nosotros queríamos salir del molde, de lo considerado “normal”. Guido fue community manager de distintas empresas, hace diseños, produce música y estudió 1 año la carrera de Publicidad. Yo vendí huevos, trabajé en una perfumería, en un centro de distribución y en una heladería. Pero aquí estamos, en un país tan lejos y diferente que puede sonar como una locura, pero nosotros estábamos completamente dispuestos a asumirla”, resalta con detalle Bercovich desde Israel.
Como parte del programa se incorporaron a ITC, Intelligent Traffic Control, una start-up fundada en 2019 en Tel Aviv por 2 ingenieros en electrónica y un profesor universitario, que cuenta con más de 100 patentes en Inteligencia Artificial. Allí idearon y crearon una serie de algoritmos que gracias a la inteligencia artificial aplicada, predicen los patrones del tránsito y previenen casi la mitad de los embotellamientos modificando el ritmo de cambio de luces de los semáforos de forma inteligente, automática y en tiempo real antes de que se genere el atasco de automóviles.
Cómo llegaron
“Leyendo un artículo en un diario israelí me encontré con ITC y su solución. Contacté a Dvir Kenig (Cofundador y CTO) vía LinkedIn, donde le manifesté mi interés sobre su creación y mis ganas de aplicar a una pasantía en su empresa. Intercambiamos mensajes y me pidió que arme un equipo de trabajo, así que no dudé y lo llamé a Guido para que se sume al proyecto sabiendo que con él iba a ser muy bueno trabajar teniendo en cuenta como nos podríamos complementar, le gustó la idea y a la semana siguiente nos presentamos en las oficinas de ITC para una entrevista con el equipo directivo”, apunta Bercovich.
Según estimaciones de la OMS el transporte continuará representando alrededor del 23% de los gases de efecto invernadero a nivel mundial, y será el responsable de emisiones vehiculares nocivas como óxidos de nitrógeno y partículas finas. En ese sentido, la contaminación del aire actualmente es responsable de casi 3,7 millones de muertes prematuras cada año. En este contexto la administración y monitoreo del tránsito vehicular es uno de los problemas más críticos que las grandes ciudades deben afrontar.
Actualmente desde ITC manejan el tránsito de más de 160.000 vehículos diarios en Israel y en Japón, además cuentan con la primera intersección controlada por tecnología 5G en Israel con una efectividad del sistema del 99%. Allí redujeron entre el 20 y 40% de los embotellamientos y en estos momentos están escalando a más porcentaje. “Desde el área de Business Development somos 2 argentinos que nos enfocamos en expandirnos hacia mercados europeos y americanos, donde ya estamos en contacto con ministerios de ciudades como Buenos Aires, Medellín y Madrid.”
“Cuando descubrí ITC, era una Start-Up que a mi parecer tenía mucho potencial de crecimiento, que venía escalando con un sistema en funcionamiento y un equipo de personas muy capaz creciendo rápidamente; fue ahí cuando vimos la posibilidad de involucrarnos en el departamento de Business Development de la empresa para expandir las ventas. Nuestra impronta personal fue avanzar sin que nos lo pidan, en el mundo de las start-up todo intento suma y vale. Así fue que dentro del primer mes del trabajo, sin que nos lo hayan pedido, ya habíamos agendado reuniones con 3 gobiernos distintos para vender el sistema”. agrega Bercovich.
Evitar los embotellamientos en forma automática
Desde la mirada de los dos jóvenes ITC es pura innovación. Según ellos, en el mercado de manejo adaptativo del tránsito casi ninguna otra empresa logró crear un sistema con la capacidad de reducir el tráfico. Se trata de un software que no requiere ninguna instalación física, sin ninguna persona interfiriendo y funcionando con 5G. “Muchos de nuestros potenciales clientes están acostumbrados a que gracias a la información que captan con sensores o cámaras en las avenidas y calles puedan cambiar la programación del semáforo. Pero pasar de eso a un sistema que capta más de 100 parámetros diferentes por segundo y tenga la capacidad de predecir cuándo se va a generar un embotellamiento y actuar cambiando las luces del semáforo en tiempo real para que no suceda esa congestión es impresionante”, se deslumbra mientras habla con LA NACION.
En sus fundamentos, el emprendimiento demostró matemáticamente que los embotellamientos vehiculares podrían evitarse por completo si el tránsito se gestiona antes de que los automóviles se atasquen. Usando modelos matemáticos, el algoritmo de aprendizaje automático de la compañía obtiene y usa datos de tráfico en vivo: detecta colectivos, vehículos, ciclistas y peatones, así como sus comportamientos. Después de identificar los patrones relevantes, la tecnología de inteligencia artificial proporciona respuestas que luego se envían a los semáforos para aliviar cualquier problema en tiempo real.
Hoy la empresa estableció lo que se llama el Proof of Concept (funcionamiento del sistema) con instituciones gubernamentales. La visión de los dos jóvenes es que al conectar todos los componentes viales y gestionarlos en tiempo real, hoy se pueden desarrollar plataformas de gestión del tránsito y ofrecer soluciones que hacen que el entorno de movilidad sea más inteligente y eficiente para todos.