Demuestran cómo se puede usar una conexión Wi-Fi para saber cuánta gente sentada hay en una habitación sin contarla a mano
El uso de dispositivos conectados al estándar de conectividad inalámbrica WiFi ha permitido encontrar una nueva forma de contar el número de personas que están sentadas en un espacio, a partir de los pequeños movimientos que efectúan.
A pesar de que ya existen tecnologías para averiguar el número de personas -también mediante el WiFi-, contar a personas sentadas es un problema que aún no se había solucionado debido a la ausencia de movimiento de la mayor parte del cuerpo.
Para solventar este obstáculo, un grupo de investigadores de la Universidad de California en Santa Barbara (Estados Unidos), dirigido por Yasamin Mostofi, ha desarrollado una tecnología que utiliza los pequeños gestos naturales de las personas, como ajustar su posición, cruzar las piernas, mirar el móvil, estirarse o rascarse, entre otros.
Según explican los investigadores en su página web, la agregación de los pequeños movimientos de los gestos puede ser suficiente para realizar estimaciones fiables sobre el número de personas sentadas presentes en un espacio.
El sistema emplea dos dispositivos receptores de WiFi para medir la potencia o la magnitud de la señal WiFi, y cómo sufre pequeñas interferencias cuando las personas se mueven en su silla. Está basado en las matemáticas, a través del uso de un modelo matemático que relaciona la cantidad total de gestos con el número de personas, de una forma similar a como funciona la teoría de gestión de filas.
Con ello logra una precisión del 96,3 por ciento, acertando el número exacto o fallando solo en uno, según las pruebas realizadas en el estudio, con grupos de hasta diez personas.
También es capaz de detectar a personas incluso detrás de las paredes, y en este caso ofrece una precisión casi igual, del 90 por ciento.
Los autores del estudio han destacado una serie de ventajas de la nueva tecnología frente a las soluciones ya existentes, no requiere del uso de sistemas de aprendizaje automático -para los que es necesario transmitir más datos según la distribución de las personas- ni de que las personas lleven ningún dispositivo conectado.