Crecen las propuestas para combatir la dependencia del teléfono
En la Argentina, casi 9 de cada 10 personas se conectan a internet todos los días; y 7 de cada 10 ya lo hace desde un teléfono móvil. El tiempo de conexión también crece año a año con un promedio de 8 horas diarias, de las cuales casi tres de ellas se usan en redes sociales, según estudios recientes de las consultoras We are Social y Kantar.
Esta conectividad exacerbada está prendiendo luces de alerta por todos lados. En los padres de niños y jóvenes, que buscan cómo poner límites, en los mismos adultos que se sienten "presos" de esa conectividad y expresan abstinencia o el miedo a perderse algo al no estar conectados (FOMO, por sus siglas en inglés) y en las ONGs que se dedican a la concientización de los peligros que abre el mundo digital para la calidad de vida y la seguridad de las personas. Como respuesta tardía, la mayoría de las empresas de tecnología, están abriendo un paraguas para "acompañar a los usuarios a un uso más balanceado" de la tecnología, ahora cuando los usuarios ya estamos empapados y con pocas herramientas para auto controlar y/o modificar el uso de los distintos dispositivos que nos conectan a la red.
Esto ocurre también, luego que un grupo de ingenieros, ex empleados de Google, Facebook y de grandes gigantes de internet, abandonen sus puestos en desarrollo de apps para evangelizar ahora sobre el modo "adictivo" en el que estas están diseñadas para captar nuestra atención y tiempo. Tristan Harris, un ingeniero en desarrollo ético de software, ex Google, es el abanderado del movimiento global llamado Time Well Spent (tiempo bien gastado, o bien invertido), que ahora intenta concientizar sobre cómo se construye la tecnología que usamos para que tomemos mejores decisiones sobre su uso. En el sitio Humane Tech ofrecen servicios para acompañar a las compañías y personas a entender cómo se construye la tecnología para poder tomar decisiones sobre cómo usarla de una manera balanceada, entre otras iniciativas.
También hace un par de semanas, en el evento anual de Google I/O para desarrolladores, se develaron las características de la nueva versión del sistema operativo Android P. Uno de los tres pilares que explicaron ofrecerá esta versión, es una batería de funcionalidades de Digital Wellbeing que podría explicarse como una Conexión Digital más sana y consciente. Para este lanzamiento, se trabajó durante meses con grupos de personas diversas y de todas las edades.
Aunque ya existen muchas aplicaciones para entender y gestionar el uso del teléfono, como Quality Time para Android o Moment para iOS, Sammer Samat, Vice Presidente de Producto de Android, le dijo a LA NACION que lo que buscan es complementar a todas esas opciones con cosas que sólo se pueden modificar desde el interior del sistema operativo. "Por ejemplo que los íconos de las apps se vuelvan grises luego de determinado uso, que desaparezcan de la pantalla principal o que desplieguen un aviso de límite de uso para que el usuario tenga más información y haga un uso más consciente". Entre las funcionalidades que llegarán en la próxima versión de Android se destacan:
- Panel de Aplicaciones (Dashboard) Esta funcionalidad es bastante similar a la que ofrecen aplicaciones como Quality Time, para Android, pero se hace de una manera integrada y desde el Sistema operativo. Dashboard permite conocer cuánto tiempo se usa el teléfono por día, cuánto en cada app, cuántas veces se desbloquea y hasta cuántas notificaciones se reciben en 24 horas.
- Tiempo Límite. Desde el panel de aplicaciones que se despliega en la pantalla se podrá elegir cada una de las apps y establecer un tiempo de uso límite por día. Algo que se utiliza para moderar el uso en niños pequeños, llega al mundo de los adultos para que puedan controlar cuánto tiempo invierten por día en Youtube, Facebook, Instagram, Whatasapp, etc. Puede limitarse desde 15 minutos de uso hasta varias horas por día. Una vez que se cumple el tiempo la app perderá su color y se volverá gris y al hacer click sobre ella no se abrirá y desplegará un aviso de "tiempo cumplido". Si el usuario tiene que usarla de todos modos, podrá ir a configuración y deshacer su orden previa, pero con un aviso a "la conciencia".
- No molestar. Hasta ahora los modos de "no molestar" (disponibles también en otras versiones de Android, en iOS y demás) evita que veamos o escuchemos las constantes notificaciones. Este nuevo modo quita todas las indicaciones visuales de la pantalla por lo que no se verá sin llegan nuevos emails, mensajes o likes. Este modo se puede habilitar y deshabilitar en cualquier momento o se puede pre setear para momentos de cenas o reuniones fijas.
- Wind down. Muchas teléfonos ya ofrecen opciones para bajar el brillo de las pantallas cuando se acerca la hora de ir a dormir, la opción "Wind Down" además permite pre establecer una hora para ir a la cama en la que las aplicaciones se tornan grises y pierden sus colores durante el tiempo que se desea descansar. Desde Google esperan que esto les ayuda a los usuarios a recordar que cuando las apps cambian es que ellos deseaban descansar y puedan actuar en consecuencia.
El tiempo creciente de uso de dispositivos y el consumo de determinados contenidos presenta peligro tanto físicos como psicológicos. Mientras crecen las consultas en oftalmólogos y kinesiólogos por el mal uso de pantallas y dispositivos, también crece la angustia, especialmente en la adolescencia, por lo que reflejan las redes sociales. De acuerdo a un estudio de la Royal Society of Public Health y la Universidad de Cambridge, los jóvenes que pasan más de dos horas en redes sociales como Instagram, Facebook o Snapchat, son más propensos a sufrir síntomas de ansiedad y de depresión.
Otras compañías tecnológicas están comenzando a hablar del tema con sus usuarios y a ofrecer herramientas de "tiempo fuera" de internet. Por ejemplo, Facebook ofrece en su intranet WorkPlace un modo que se llama "Modo Playa" o Beach Mode en el que el usuario no recibe ningún tipo de notificaciones laborales luego de su horario de trabajo. Recientemente Motorola lanzó el estudio global bajo el concepto de #PhoneLIfeBalance en el que buscan resumir la importancia del balance entre el uso del teléfono y la vida personal. Y empresas como Apple recibieron fuerte presión de sus accionistas para que ofrezca más herramientas para usuarios y padres en particular para ayudar con el control y uso de dispositivos.