Con Bluetooth, clave o huella digital: cómo elegir una cerradura inteligente
Las cerraduras hoy ofrecen alternativas a la llave tradicional, con claves numéricas, tarjetas de cercanía, registro de huellas digitales o aplicaciones para desbloquear la cerradura
- 5 minutos de lectura'
Uno de los primeros pasos en materia de seguridad en el hogar es contar con una buena protección en la entrada. Una puerta blindada, varias cerraduras, pasadores con cadena, todo eso pareciera garantizar la tranquilidad de que nadie podrá entrar a la casa. Pero los tiempos van cambiando y, como decía Luca Prodan: “el tiempo pasa, nos vamos poniendo tecnos”, las cerraduras y llaves tradicionales empiezan a ser reemplazadas en todo el mundo por sistemas electrónicos o biométricos: son las cerraduras inteligentes, también denominadas smart locks.
Esta opción, que hasta hace un tiempo estaba reservada para empresas, hoteles u organismos gubernamentales, ahora empieza a convertirse en una alternativa válida para los hogares. Este tipo de cerraduras, al contrario que las llaves físicas, no pueden ser clonadas. En cambio, las cerraduras electrónicas pueden tener varios niveles de permisos para determinar quién puede utilizarlas.
Por supuesto que los imprevistos pueden ocurrir: se acaba la batería del control, que el mismo se rompa o que se rompa la propia cerradura, que no funcione la conexión a Internet o, en el caso de las que se manejan a través de una app vía Bluetooth, que no tenga carga el celular o incluso que se lo pierda. ¿Es momento de entrar en pánico? No. La mayoría de estas cerraduras mantienen la opción para utilizar la llave física tradicional, con lo cual se podrá entrar y salir sin problemas hasta solucionar el inconveniente.
Entre las cerraduras más usadas, es posible encontrar las que usan huellas digitales, tarjetas de cercanía, códigos alfanuméricos, apps que permiten abrir puertas desde el smartphone vía Bluetooth o WiFi y algunas opciones más.
¿Estas cerraduras pueden ser hackeadas? Sí. Según un informe del sitio especializado TechCrunch algunas smart locks pueden ser vulneradas, especialmente las que no cuentan con actualizaciones de seguridad o que no son de un fabricante muy conocido. El riesgo no es solo que puedan entrar a la casa, sino que, como informa la empresa de seguridad Panda Security, los ciberdelincuentes pueden acceder a la identidad digital por medio de un smart lock y de allí a todas las contraseñas de una persona. Es por eso que lo recomendable es que cuenten con autenticación de doble o triple factor.
Qué modelos están disponibles en el país
Por ejemplo, la empresa Yale ofrece una cerradura tipo manija (bautizada como Dig Lev Bio) que trae un lector de huellas digitales (se pueden configurar hasta 20) y que usa pilas AA. Es para puertas de madera o metal y se consigue por unos 55.000 pesos.
El modelo CI-FPE-W de Starligh, por su parte, permite el acceso a través de huella digital, contraseña o tarjeta. Es compatible con la app Tuya Smart, que permite controlar distintos tipos de dispositivos inteligentes en forma remota. Su precio es de unos 63.800 pesos.
Quien quiera algo más sofisticado puede instalarse una cerradura que cuente con no solo con huella digital y pantalla táctil, sino además tarjeta. Por ejemplo, el modelo SDH-A40 de iHub incluye esas funciones y se puede administrar desde una app, permitiendo el acceso hasta 200 huellas digitales, 200 tarjetas y 150 claves temporales o permanentes a otros celulares, a la vez que se pueden tener estadísticas muy completas de todo el historial de uso. Su precio ronda los 75.000 pesos.
La empresa Ci vende su modelo H20B, que permite la apertura de la puerta por huella dactilar, código numérico (hasta 24 dígitos), tarjeta de proximidad, a través de la app TTLock vía Bluetooth o Wifi, vía Alexa, Google Home o llave física. Precio: 85.000 pesos.
Otra cerradura inteligente es la Face One de la empresa Full Lock System, que incluye una pantalla HD de 4,5 pulgadas donde es posible poner la huella dactilar (hasta 300), acercar una tarjeta o poner alguna clave (sin limitación). La puerta trae ranura para la apertura por llave física (que no está a la vista). También se puede utilizar con una app con WiFi para apertura remota. Incluye una cámara HD con gran angular desde el interior, para ver y registrar a quienes se acercan a la puerta. Su precio ronda los 92.000 pesos.
También el modelo SHS-P718 de Samsung utiliza huella digital y un teclado para poder acceder a través de un código numérico. Asimismo, cuenta con un sistema antirrobo por si alguien quiere ingresar una tarjeta, huella o código no autorizado. Incluye la opción Modo Ausente, para que se dispare una alarma por si alguien quiere entrar durante ese período. Precio: hasta 340.000 pesos, según la versión.
Por su parte, la empresa cordobesa Cittyo lanzó un sistema de cerradura electrónica que permitía la apertura de puertas a través de una llave virtual alojada en una app y que se conectaba con la cerradura vía Bluetooth. Actualmente, la empresa vende dos dispositivos (denominados Neo y Neo Lite) que se integran a los sistemas de control que ya tengan las cerraduras con electroimán o destraba pestillos. De esa manera, el acceso a esas puertas se puede llevar a cabo desde un smartphone.