Cómo resolver los problemas y fallas más habituales que tienen los celulares
Los celulares no duran para siempre. Si bien están diseñados con los componentes más avanzados hasta el momento de su lanzamiento, hay varios motivos por los que el parque se suele renovar, en promedio, cada 15 meses. No se trata solo de la aparición de modelos nuevos. También se renueva debido a otras causas como los robos y, sobre todo, a accidentes o fallas que, cada tanto, tienen los distintos equipos.
Si bien algunos problemas de hardware pueden tener una solución con un destornillador en mano y solo un poco de paciencia (y siguiendo las indicaciones de sitios especializados como es.ifixit.com), de acuerdo con los distintos servicios técnicos de las principales empresas con las que habló LA NACION, la mayoría de las consultas y pedidos de arreglos están relacionados con las roturas de las pantallas y el mal funcionamiento debido al uso de aplicaciones no oficiales.
Todos los servicios técnicos coinciden en algo: siempre convendrá llevar el celular a un service oficial, porque solo ellos garantizarán un arreglo profesional y la utilización de materiales y elementos originales. Además, aclara Martín Pott, Customer Satisfaction Director de Samsung Argentina, en los centros de soporte oficiales se efectúa "la realización de transferencia de datos, realización de back up y correcta configuración de cuentas".
Estas son los problemas o fallas más comunes que tienen los celulares:
Aplicaciones dañinas
Los problemas de software son los que más afectan a los dueños de celulares, pero porque cargan apps que terminan dañándolos. Se trata de muchas aplicaciones no oficiales, que en general prometen solucionar problemas pero en realidad suelen crear nuevos, como por ejemplo las que "ahorran" batería o memoria RAM, aquellas que limpian el teléfono o lo refrescan o juegos, entre otras.
Solución: descargar siempre apps oficiales o reconocidas, y siempre convendría hacerlo desde las tiendas oficiales de Android y de Apple. Maximiliano La Paglia, jefe de Servicio Mobile de LG, indica: "Más del 50% de los smartphones con Android que se traen para arreglar son por problemas con las aplicaciones. En ese caso, siempre es conveniente y recomendable en todos los casos dentro y fuera de garantía dirigirse a un service oficial de la marca para asegurarse el uso de materiales originales".
Pantallas rotas
Pero claro, también es muy común la rotura de las pantallas, algo que se suele producir generalmente por las caídas. ¿Por qué son tan frecuentes estos accidentes? Porque la mayoría de las personas suelen tener su celular en la mano casi todo el tiempo, incluso cuando se está haciendo otra cosa -como el subir o bajar una escalera, por ejemplo- o también lo apoyan en alguna superficie no muy estable, lo que lo expone a un casi seguro encuentro con el suelo del que muy probablemente no saldrá indemne.
Obviamente, se puede minimizar el daño a través de la protección que brindan las fundas de plástico duro o los vidrios templados para la pantalla. Pero estas protecciones no son 100% eficaces, como bien pueden dar fe aquellos que hayan sufrido duras caídas de sus equipos. Es que los vidrios templados ofrecen distintos tipos de protección, si son de plástico (menor) o de vidrio (mayor). A su vez, los de vidrio no son todos iguales: algunos brindan una mayor protección a rayaduras que otros, algo que se mide por la dureza del material o Mohs (H), que va del 1 al 10. Lo ideal es que sean de 8H en adelante.
Solución: es importante ver si se rompió solo el cristal o el módulo de pantalla o panel táctil, un arreglo bastante más caro. En el primer caso, el cristal se puede cambiar fácilmente, y conviene hacerlo en los services oficiales, muchos de los cuales incluso ofrecen el cambio gratuito si el equipo está en garantía.
En caso contrario, los precios del arreglo varían según las empresas y los modelos.
Las garantías no suelen cubrir, sin embargo, los daños producidos por las caídas.
Fallas de componentes internos
Por su parte, cuando se rompen los botones, ya sea por una caída, el uso excesivo o porque le cayó algún tipo de material o sustancia líquida, la cámara, los altavoces y los micrófonos del celular también pueden empezar a fallar. La verificación en todos estos casos estriba, en primer lugar, en apagar y volver a encender el equipo, hacer una prueba concreta (intentar sacar una foto, reproducir algún elemento multimedia o hacer una llamada) para ver si se solucionó el tema. Si todo sigue igual, entonces será momento de recurrir al reinicio en modo seguro.
Solución: Si la falla se produce ni bien se compra el equipo, en general las garantías de los fabricantes las suelen cubrir y en muchas ocasiones directamente se cambia el equipo. Si el celular ya tiene un tiempo de uso, conviene llevarlo al servicio técnico para su reparación.
Baterías
Las baterías se van degradando a medida que pasa el tiempo. Su duración va disminuyendo por varias causas, como por ejemplo su uso: no es lo mismo si se lo consulta una vez al día o se lo mira cada 10 segundos. También influirán las aplicaciones que se utilicen, porque algunas consumen más batería que otras. Asimismo, también se ven afectadas por las variaciones de temperatura, la cantidad de veces que se las carga y, por supuesto, el paso del tiempo. Pero además las baterías suelen arruinarse por los malos hábitos de uso, como usar cargadores que no sean de la marca, dejarlos cargando toda la noche o usarlo mientras se realiza la carga, entre otras. De esa manera, la vida útil se puede reducir de los 2 o 3 años a apenas unos 6 meses.
Solución: si la batería está integrada (es decir, que no se puede sacar del equipo) se considera parte del equipo y generalmente está cubierta por la garantía si empieza a fallar ni bien se compra el celular. Si el celular ya tiene un tiempo de uso, conviene llevarlo al servicio técnico.
Para conservarlas por más tiempo, conviene usar cargadores oficiales. Asimismo, conviene no cargarlos continuamente, sino hacerlo cuando llegue al 20% y llevarla hasta un 80%. También es importante no exponer a los equipos a temperaturas extremas y algunos trucos en el uso cotidiano: reducir el brillo, quitar el modo vibración, reducir el tiempo hasta la activación del bloqueo de pantalla y apagar las conexiones Bluetooth, WiFi y la localización por GPS cuando no sea necesario.
Android incluye una opción de "Ahorro de batería" que es muy útil, especialmente por la noche o cuando no se va usar el celular por un tiempo.
Exposición al agua u otro líquido
Si bien ya hay varios smartphones a prueba de agua (ojo, no al agua salada, y tampoco son para usar dentro de una pileta), todavía sigue siendo un gran problema cuando entra agua en un equipo. La avería por oxidación es bastante común si el móvil se cae en un recipiente con líquido o si el dueño estuvo caminando bajo una fuerte lluvia con el celular en el mano, en un bolsillo o incluso dentro de la mochila.
Solución: ante todo, no encenderlo. Si está prendido y funciona normalmente, está todo bien, aunque es mejor dejar que se seque. Pero si está apagado, los servicios técnicos recomiendan dejarlo así, sacar todos los componentes que se pueda (chip, tarjeta de memoria y batería, en los casos donde es posible) y secarlos por separado.
La técnica casera de poner el celular en arroz tiene sus defensores: el arroz crudo tiene componentes que absorben la humedad. Hay que dejarlo allí al menos por 24 horas. Y si puede ser al sol, mejor. Pero esto no garantiza que el celular reviva si el agua ya hizo estragos internamente.
Reinicio automático
Algunos equipos pueden, de la noche a la mañana, empezar a funcionar mal. Por ejemplo, encenderse y apagarse continuamente, a pesar de tener la batería cargada. Es lo que se conoce como boot-loop o bucle de reinicio. Las causas pueden ser variadas: alguna actualización de sistema que no se pudo completar; que el almacenamiento interno esté corrupto; algún virus o, el fin de la vida útil de un celular, que actualmente se estima en alrededor de los 24 meses. Sí, apenas 2 años, aunque se trata de un promedio.
Solución: esto puede parecer la sentencia a muerte del celular. Pero hay formas de tratar de que reviva. No, no es necesario tener conocimientos de RCP ni hacer respiración boca a boca. La Paglia sostiene: "Lo que puede hacer un usuario es realizar la restauración de fábrica o Factory Reset para descartar problemas de aplicaciones. En caso de que no lo solucione debe enviar a un servicio técnico autorizado para que lo revise". Y es que el proceso conlleva sus riesgos, especialmente para quienes no tienen mucho conocimiento en ese tema. Eso hace que Pott sostenga que "recomendamos llevar el equipo a un service oficial para que pueda ser evaluado por un profesional altamente capacitado en el tema".
Desde Huawei prefieren, en cambio, que nadie meta mano en sus equipos: "recomendamos asesorarse siempre con el servicio técnico, para evitar realizar operaciones que puedan poner en riesgo la información del usuario o empeorar el funcionamiento del equipo, hasta dejarlo inactivo totalmente. Siempre es importante que alguien con experiencia lo revise antes de tomar alguna decisión como resetearlo y que las consecuencias luego sean irreversibles".
El arreglo del equipo por cualquiera de estas causas, además, no suele ser algo económico. El cambio de cristal suele ser el que menos costo tiene. Tal vez convenga arreglarlo si se trata de un smartphone de gama alta. Pero el costo del arreglo para un equipo de gama media o baja, especialmente si ya tiene un tiempo considerable de uso, puede equiparar su mismo valor, por lo que muchos optan directamente por comprar uno nuevo.