Cómo aprender idiomas y traducir textos con ayudantes digitales
Un recorrido por sitios y aplicaciones que ofrecen cursos en línea de inglés, francés o italiano, además de varias páginas para realizar traducciones automáticas de frases
How do you say it? ¿Come se dice? ¿Comme ils disent? Estudiar un idioma es algo que, a pesar de las promesas de algunos afiches callejeros, lleva bastante tiempo. Diccionario en mano, muchos no políglotas siempre pudieron arreglárselas para saber las palabras más elementales de una lengua, sea para preguntar una dirección o saber que no pidieron cerebro de mono al vapor (bueno, hay gustos para todo) como almuerzo en el restaurante.
En el siglo XXI es posible tener aplicaciones en el celular para aprender las estructuras básicas de uno o más idiomas, pronunciar decentemente y poder entablar mínimamente una conversación.
También hay sitios en la Web que ofrecen cursos para aprender idiomas, traducción de palabras y de documentos. Cada vez más sofisticados, no sólo privilegian la rapidez, sino que se preocupan también por la calidad y precisión de la traducción.
Esta es una selección (palabra de moda de acá hasta junio) de las aplicaciones y sitios que ofrecen las más interesantes opciones de aprendizaje y traducción de idiomas:
Duolingo
Una de las opciones es Duolingo , aplicación gratuita que propone aprender inglés, francés o portugués, entre pocos más, a través de una herramienta para smartphones y tablets, así como una página web, en la que se combinan imágenes, sonidos y autocorrecciones con un formato parecido a un videojuego : hay niveles que ir superando y se tiene una determinada cantidad de "vidas", que se pueden ir perdiendo con cada error. Al perder todas, hay que empezar de nuevo con la lección.
Una de las cosas interesantes que incorpora este sistema es la del aporte colaborativo , es decir que son los propios usuarios los que van ayudando a enseñar los idiomas a la par que estudian otros.
Además, existe una interrelación entre lo que se va haciendo en los dispositivos móviles y el sitio de Internet. Los avances logrados en un lado se continúan en el otro, de manera que si se acaba la batería no hay necesidad de interrumpir el aprendizaje, sino que se puede continuar desde la PC hogareña.
Un estudio reciente que sus creadores encargaron a la Universidad de Nueva York sostiene que 34 horas estudiando inglés con Duolingo equivaldrían a un semestre de clases en la universidad, lgo tal vez polémico o discutible, pero que refuerza la confianza que se tiene el guatemalteco Luis Von Ahn, creador del sistema .
Con 12 millones de usuarios activos, seis idiomas y versiones disponibles para Android, iOS y Chrome, esta aplicación recibe diariamente peticiones para ampliar la base de lenguas, llegando el fanatismo de algunos a niveles tan sofisticados como para solicitar hasta cosas insólitas, como el idioma klingon de Star Trek.
Rosetta Course
Otra opción es hacer un curso de Rosetta Stone , que incluye muchos más idiomas, pero con la diferencia que sólo es posible aprender lo básico en forma gratuita, y será necesario pagar para pasar a algo más avanzado.
A diferencia de Doulingo, que sólo exige conexión a la web para descargar lecciones, en la versión móvil de Rosetta se requiere una conexión a Internet permanente.
Diseñado para tablets (iPad y Android) así como para smartphones, este curso multimedia se basa en aprender de los errores, incluyendo comentario y videos para reforzar enunciados y adquirir vocabulario. El uso de tecnología de reconocimiento de voz permite corregir la pronunciación a cada momento.
Babbel
El nombre podría sonar muy obvio, pero bueno, alguien tenía que bautizar así a un sitio de aprendizaje de idiomas. En Babbel se pueden aprender varios idiomas, con una parte del curso en forma gratuita y la otra, paga. Los cursos varían según la duración, así como los precios.
La versión gratuita, obviamente con sus limitaciones, proporciona igualmente una extensa cantidad de vocabulario para aprender según el idioma seleccionado, y también es posible descargar paquetes adicionales y un sistema "inteligente" de repaso, sin pagar ni un centavo.
También utiliza variadas herramientas multimedia: fotos, texto y voz para aprender el vocabulario básico y luego su utilización en situaciones cotidianas.
Memrise
Este servicio está basado mayormente en la parte visual. Utiliza "mems" o tarjetas que funcionan como ayuda memoria, para añadir un toque simpático a la enseñanza del idioma. Es posible cargar mems propios en el sitio, para ayudar a otros a aprender ese idioma. Claro, no todos son originales o brillantes. Algunos son impresiones de pantalla de Wikipedia, otros, fotos de Instagram. Todo vale.
Pero no se queda ahí. También cuenta con elementos como poesía, cuentos, historia o ciencia para enseñar con mayor nivel de detalle.
Bussu
Una de las aplicaciones que se focaliza en métodos más tradicionales es Bussu , a través de diálogos, ejercicios escritos y audios. Trae además la opción de hacer videoconferencias con otros usuarios, tanto con quienes están aprendiendo como con quienes enseñan, para ahondar la pronunciación y lograr más fluidez en el lenguaje.
La enseñanza es por web, y la aplicación móvil sirve más como una especie de libro de estudio para repasar las lecciones. Eso sí, si bien consiste en un buen método de enseñanza, la mayoría de las opciones (video, gramática) son pagas.
Livemocha
En el caso de Livemocha , su interfaz es como la de una red social (más que nada similar a Facebook), con opciones para agregar amigos e incluso un chat. Basa su fortaleza para la enseñanza en la posibilidad de hablar con gente nativa, aunque también ofrece el método de enseñanza tradicional, a través de lecturas, sonidos y escritos. Hay más de 35 idiomas para aprender, y si bien hay una versión gratuita, existe otra premium, a la que se puede acceder no sólo con dinero, sino también a través de créditos ganados al actuar como tutor de otros usuarios. Para eso deberían ponerse a editar los materiales que escriban o responder a las grabaciones de audio que suban al sitio.
Esta opción, sin embargo, habilita también a que lleguen cientos de pedidos de tutela, al estilo de las notificaciones de...sí, Facebook.
Tener a un tutor nativo privado, por otro lado, es una gran ventaja para aprender en forma más ideal elementos más concretos del lenguaje cotidiano.
Traductores web
Si la idea es simplemente tratar de entender una palabra, una frase o una página web, entonces nada mejor que un traductor online. Con distintos grados de eficiencia y precisión. Confiar en los "robots" que traducen en forma muy literal no siempre es recomendable, por lo que varios de estos sitios brindan la opción de enviar documentos a traductores "reales", es decir, a personas. Claro, tardará un poco más (y generalmente costará unos pesos), pero será más eficiente.
- Google Traductor
La herramienta que el todoterreno Google propone para traducir textos y páginas web , cumple sus primeros 8 años. Año a año fue agregando cada vez más lenguas, para llegar a más de 70 actualmente. Con el mismo estilo minimalista que caracteriza al buscador, el sitio y su aplicación para móviles proveen las respuestas de manera inmediata, incluso ofreciendo opciones al introducir las primeras sílabas. A eso se le suma la que agregan la pronunciación de la misma, la opción de traducir páginas enteras.
- Bing
El buscador de Microsoft ofrece su propio servicio de traducción , que se puede usar en la Web para obtener una respuesta inmediata, o bajar la aplicación para los smartphones con Windows Phone. Asimismo, se puede usar en la barra de tareas de Bing, o bajárselo, para utilizarlo sin conexión.
Bing reserva una sorpresa más, que pone una sonrisa en el rostro de Sheldon Cooper y sus amigos de The Big Bang Theory, entre muchos otros fanáticos: la opción de traducir palabras desde y hacia el idioma klingon.
- Lingua.ly
Un plug-in de Chrome , que se puede utilizar tanto para traducir una palabra como para aprender nuevas, o leer artículos con un mayor o menor grado de dificultad. Se instala en la barra de tareas y desde allí ofrece traducir palabras, textos y páginas web. Pero no se queda ahí: también brinda materiales de lectura y permite practicar mediante juegos, para aprender palabras nuevas.
- Bab.la
Una de las elecciones por excelencia a la hora de traducir palabras de un idioma a otro. Con un estilo minimalista, a la manera de Google, muestra un cuadro donde escribir la o las palabras a traducir, y seleccionar luego el idioma de origen y el de destino.
La traducción no se limita al significado de la palabra, sino que además brinda sinónimos, así como ejemplos de uso en frases o situaciones cotidianas.
- Babylon
Un histórico de la traducción online . Ofrece una ventana para la introducir palabras y elegir el origen y el destino de los idiomas.
Trae la opción para que la traducción de textos más largos la haga un traductor humano, con la promesa de hacer una página en una hora y con "tarifas competitivas", como se anuncia en el sitio.
Pero Babylon viene también en formato de barra de tareas propio, para poder hacer una traducción rápidamente, sin ni siquiera entrar al sitio web.
- Lexicool
Un metabuscador, como los que estaban de moda a fines de los años 90, pero de traductores y diccionarios bilingües que haya dando vueltas por la Web. Sólo hay que poner la palabra a traducir en la ventana de búsqueda y el sitio hará el resto . Incluye cientos de diccionarios de otros tantos idiomas y ofrece acceso a software para aprender idiomas. Además, agrega información sobre cursos de traducción, programas gratuitos para descargar y otros.
- World Lens
Una alternativa algo diferente, en este caso se trata de una aplicación para Android, iOS o Google Glass, que usa la cámara del teléfono para hacer traducciones en tiempo real.
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