Apple, Xiaomi y luego (quizás) Samsung: adiós al cargador en la caja del celular
En octubre último, Apple anunció su decisión de dejar de incluir cargadores en sus teléfonos. El primero fue el iPhone 12, que se vende sin cargador en todo el mundo (salvo, por un tema legal, Francia y quizá Brasil), pero la compañía extendió la decisión a todos los modelos que vende actualmente (es decir, alcanza también al iPhone SE, al XR y al iPhone 11). Lo mismo hizo con los auriculares, algo que muchas otras compañías ya dejaron de incluir en la caja junto con los teléfonos.
Su argumento es que así reduce la basura electrónica y, también, la huella de carbono asociada al transporte de los equipos de China al mundo. No menciona, claro, el ahorro en costos: el precio del teléfono sigue siendo el mismo, y al compañía mejora sus ganancias. Quien necesite un cargador deberá pagar 19 dólares por el de Apple o usar un tercero (con conector USB-C; el cable que Apple incluye es de Lightning a USB-C).
Xiaomi anunció hoy su smartphone Mi 11, y sigue la misma línea: el teléfono se vende sin cargador... pero solo en China: en el resto del mundo se venderá con un cargador de 55 watts, y al mismo precio, según confirma Android Authority; unos 610 dólares. El cargador (más poderoso de lo usual) ronda los 30 dólares para comprarlo en forma independiente. En octubre, Xiaomi se había reído de la decisión de Apple.
Don't worry, we didn't leave anything out of the box with the #Mi10TPro. pic.twitter.com/ToqIjfVEQX
— Xiaomi (@Xiaomi) October 14, 2020
Ahora le toca el turno a Samsung. ¿Presentará un Galaxy S21 sin cargador en la caja, como sugieren los últimos rumores? El teléfono llegará a las tiendas el 14 de enero, al parecer, y su presentación en sociedad llegará una semana antes. ¿Elegirá la compañía surcoreana el camino de Apple, eliminando los cargadores de sus modelos premium? ¿Lo hará en versiones más económicas? ¿Irá por el camino de Xiaomi, de venderlos en combo para quien los necesite? Desde principios de año que se especula con esta decisión de Samsung.
Si lo hace, serían 3 de los 4 mayores fabricantes de smartphones del mundo que inicien esa senda, y le den un impulso al mercado de cargadores, que hace un par de años se estimaba con un volumen de 25.000 millones de dólares en 2022 y casi 30.000 millones de dólares para 2024. La decisión, además, sigue el impulso que le está dando la Comisión Europea a la unificación de cargadores para reducir la basura electrónica, con un estudio que debería terminar a mediados de enero próximo.
Para los fabricantes, convencer a los usuarios que todo es un tema ecológico, y no de maximización de ganancias, será el desafío, sobre todo cuando los teléfonos nuevos suelen traer cargadores más rápidos que los antiguos; armar combos en los que el usuario tenga la opción de elegir (o, más difícil, donde quede claro que hubo una reducción de precio) parece el camino correcto. La duda es qué pasará con otros dispositivos (tabletas, notebooks) que deberían tener el mismo tratamiento para probar que la ecología es la preocupación principal.