Alternativas online para pedir préstamos sin recurrir a un banco
Dos firmas locales ofrecen servicios para facilitar cantidad pequeñas de dinero, apelando a los préstamos entre personas o a las redes sociales para comprobar la solvencia económica
Solicitar un préstamo bancario no es sencillo, a pesar de las publicidades que aseguran lo contrario: es necesario presentar diversos documentos, demostrar ingresos y acudir físicamente a las sucursales para poder obtener el dinero, entre otros requisitos. Internet y la informática personal, sin embargo, están cambiando esto, dando lugar a los préstamos online (que no deben confundirse con servicios como Wanda , Monedero o (en Estados Unidos) Google Wallet , Simple MoneyDrop o Square Cash , que son para realizar pagos electrónicos o transferir dinero entre particulares.
Dos plataformas online nacionales se acercan, más bien, al concepto del micropréstamo de Muhammad Yunus.
El préstamo lo hacen todos
Según detalla Alejandro Cosentino, fundador y CEO de Afluenta , plataforma online de préstamos entre personas, existe una demanda insatisfecha para productos de crédito e inversión en Latinoamérica. "Argentina posee uno de los más bajos indicadores de préstamos versus PBI con el 14%, mientras que Chile posee 70%, Brasil 60%, Colombia 45% y Estados Unidos y Europa más del 200%. Los bancos no satisfacen la demanda de crédito interno y cuando lo hacen es a altos costos. Por otro lado, las inversiones como el plazo fijo brindan rentabilidad negativa, comparadas con la inflación, de manera que la gente busca nuevas alternativas para hacer rendir su dinero. La intermediación bancaria solo beneficia a los bancos y el ‘compartir’ comienza a generar valor para las personas que utilizan estos nuevos sistemas", agrega.
Afluenta busca conectar personas que solicitan créditos con otras personas con posibilidad de financiarlos. "Es más barato, rápido y menos burocrático que los bancos. A los inversores les brinda un mejor rendimiento de sus fondos respecto a otras alternativas de inversión. Actualmente el rendimiento es del 34% sobre el capital invertido", explica Cosentino.
El funcionamiento de esta solución es simple: quienes buscan créditos completan un formulario online solicitando el monto y plazo que necesitan, y la tasa que están en condiciones de pagar, lo cual determinará el monto de la cuota. Luego Afluenta presenta esa solicitud de crédito a los inversores y éstos, a través de un sistema de subasta, compiten para otorgar el préstamo. Ganará el que ofrezca mejores condiciones finalmente.
Estos préstamos se denominan "colaborativos", también conocidos como préstamos entre pares, porque los inversores "colaboran" entre muchos financiando a un solicitante y reemplazando a los bancos. En Afluenta el mínimo requerido por préstamos es de 20 inversores por solicitud, aunque el promedio es de 50; a veces llegan a superar los 100 inversores por crédito.
"Nuestra empresa permite que solicitantes e inversores hagan transacciones entre ellos las 24 horas del día, todos los días de las semana, desde todas las provincias del país asistidos por un software", resume Cosentino.
Apuntan a personas con buen cumplimiento en el pago de crédito anteriores, mayores de edad, residentes en el país, con ingresos superiores a los $ 5000 y en condiciones de pagar la cuota del crédito que solicitan. "Los solicitantes respaldan sus pedidos con un pagaré a sola firma. La confiabilidad de pago está apoyada en un buen sistema de selección", detalla el CEO de Afluenta.
Esta empresa obtiene sus ingresos cobrando comisiones a las partes, 4% a solicitantes y 2% a inversores. "El resultado de los préstamos, incluso los intereses punitorios, los cobran los inversores. El retorno de capital invertido promedio de los inversores en el sistema fue, en el mes de septiembre de 2013, del 34% anual neto de comisiones y potenciales deudores incobrables", detalla Cosentino.
La mayoría de los préstamos solicitados en esta plataforma se destinan a refacciones hogareñas; para cancelación de deudas más costosas; para compra de vehículos; para viajes y para realizar fiestas.
Montos chicos en el acto
Luego de vender Dineromail, Juan Pablo Bruzzo y Alejandro Estrada comenzaron a pensar en nuevos modelos de negocio para la región. Así nació Moni , una plataforma de servicios que otorga préstamos de montos bajos, de manera inmediata y a corto plazo.
Los interesados pueden solicitar el dinero a través de la Web o de un dispositivo móvil y apunta a solucionar necesidades económicas de bajo monto, pero que necesitan una rápida resolución. Los préstamos aprobados se depositan ese mismo día en la cuenta bancaria del cliente y son debitados del mismo CBU en el plazo pactado con quien solicita el servicio.
"Nuestra empresa apunta al 85% de individuos bancarizados que no tienen acceso a una cuenta corriente y que necesitan solicitar un adelanto de dinero o préstamo. Las alternativas son solicitar un adelanto en el trabajo o pedir dinero a familiares o amigos, y en muchos casos no hay a quien pedirle", comenta Alejandro Estrada.
Moni.com.ar utiliza un algoritmo basado en múltiples variables del solicitante obtenidas de las redes sociales, información pública y bureaus de crédito que permiten aprobar la solicitud. "La novedad es que incorpora datos públicos de redes sociales como Facebook que ayudan a entender el perfil de cada persona y suma, a la evaluación de riesgo crediticio tradicional, componentes sociales y otras variables ‘blandas’. Moni, mediante previa autorización del usuario, extrae datos relevantes de su perfil público", revela Juan Pablo Bruzzo.
Moni cobra una tasa de 49% anual más un costo por servicio que depende del número de cuotas. Por ejemplo, para un préstamo de 30 días de $ 4000 el cliente tiene que devolver $ 4563, que incluye $ 135 de interés, $ 330 por servicio de otorgamiento y $ 98 de IVA. "Y ofrecemos una tasa menor a los mejores clientes a medida que los vamos conociendo", aclara Bruzzo.
Estas nuevas formas de solicitar préstamo y ofrecer capital ya están disponibles en nuestro país. Para algunos es una alternativa que puede sacarlos de un apuro, para otros puede transformarse en una nueva e interesante forma de inversión. Las telecomunicaciones, el entretenimiento y ahora los bancos se enfrentan a la desintermediación. Es un alternativa para buscar la independencia financiera.