Vuelta a clases: Familias y referentes piden por el retorno de la presencialidad a través de una carta
A pocas horas de que las autoridades educativas y sanitarias de la Nación vuelvan a verse las caras con sus pares en la Ciudad para analizar el nuevo protocolo presentado por el Gobierno porteño, padres, profesionales y referentes insisten en el retorno de la presencialidad. A través de distintas cartas que se viralizan por redes sociales, quienes se manifiestan cuestionan: "¿No es momento de pensar soluciones para que niños y adolescentes recuperen parte de lo perdido como se ha hecho en otros países del mundo?".
Desde hace algunas semanas, María José Navajas intercambiaba inquietudes con los padres de cinco compañeros de sus hijos. La escolarización virtual de los menores "está prácticamente agotada", se confiaban, preocupados. "Además, hay muchos chicos que perdieron el vínculo con el colegio", decían. Fue entonces que nació la idea de redactar una misiva dirigida al Gobierno nacional para pedir que se retomen las clases. "La escuela no puede depender de una vacuna que, en el pronóstico más optimista, se estima que estará disponible en abril o mayo del año próximo, pero que en realidad no representa más que una promesa futura sin ninguna fecha cierta de aplicación ni eficacia probada", reza parte del texto que sumó unas 1000 adhesiones entre otros, políticos, especialistas y docentes.
"Nos preocupa el lugar poco prioritario que tiene la educación. No vemos ningún plan de cómo van a volver los chicos a la escuela. No se puede esperar a que esté lista la vacuna", dice Navajas. Adolfo Rubinstein, médico epidemiólogo y exministro de Salud, fue una de las personas que adhirió a la carta. "Yo me pregunto: ¿Por qué no deberían abrir las escuelas? ¿Por qué la educación no está contemplada como una actividad esencial si ya quedó demostrado que los chicos son los que menos se contagian entre sí y menos contagian en general?", cuestiona el especialista en diálogo con LA NACION y alerta: "La deuda educativa va a ser impagable".
Hace seis meses que las hijas de Soledad García, vecina de Quilmes, siguen sus clases desde la computadora. En su caso, tienen la debida contención familiar y tecnológica para continuar con su educación, pero el paso del tiempo bajo esta modalidad "ya es insostenible", dice la madre. "No es lo mismo la manera como aprenden. Además, no podemos tener a los chicos tanto tiempo encerrados", afirma a LA NACION.
Natalia Alonso, otra madre, también opina que las clases presenciales deberían volver de algún modo: "Los profesores son los que pueden enseñarle mejor que nadie y a esta edad [14 años] le vendría bien sociabilizar".
Graciela Fernández Meijide, una de las referentes que no dudó en firmar la carta, resalta: "Tenemos que confiar en que los chicos pueden cuidarse y que aprendieron a vivir con esto". Para la referente en Derechos Humanos "es preocupante, además, que la pandemia evidenció que muchos chicos, tal como lo vimos en la Ciudad, no tienen acceso a los avances tecnológicos y se perdieron de su educación. Ahora hay un agujero en su proceso de aprendizaje".
"Podemos repartir computadoras o libros, pero sin los maestros nada es lo mismo", enfatiza.
La escuela como lugar de sociabilización
Fernández Meijide dice, además, que "la escuela no es solo un lugar de conocimientos, sino que colabora con la sociabilización, con la madurez afectiva" de niños y adolescentes.
Paola Flores, madre de una niña de siete años, está preocupada por ese aspecto de su hija. "Lo que más me preocupa es que veo cómo se derrumba desde lo psicológico. Las frustraciones por conexiones de Zoom que se caen y el no poder ver a sus amigos la angustian mucho", cuenta la mujer. Si tuviera la posibilidad de dar una idea, la ella propondría que las escuelas estuvieran abiertas para que, con los debidos protocolos, los alumnos pudieran asistir un par de horas algún día en la semana para despejar dudas educativas pero, sobre todo, "para darle aire a los niños para que vean a sus compañeros y docentes".
Para Eduardo Sacheri, escritor y docente de escuela media, "la comunidad educativa tiene la obligación de buscar alternativas, que no significa que no puedan ser imbatibles, pero la peor enseñanza es quedarse quieta sin proponer nada". Como maestro, Sacheri, que también firmó la misiva, considera que desde ciertos ámbitos hay una "actitud rotunda y conservadora" respecto de la vuelta a clases en las escuelas.
A través de las redes, también se viralizó una carta firmada por "padres de San Isidro" en la que se pide al Concejo Deliberante local que reabra las escuelas. "Nuestros hijos están perdiendo no solo un año de enseñanzas académicas sino también todo lo que significa la escuela en materia de contención, de guía, de disciplina, de formación y de estímulo. Vemos día a día en nuestras casas las secuelas de ello en la salud mental y emocional de nuestros hijos, estamos preocupados, no podemos esperar más", dice parte del texto.
Rosario Perrone fue la impulsora de la iniciativa en esa comuna al norte del conurbano. "Todos los padres decíamos lo mismo a través de las redes: se está hablando de cómo van a ser las vacaciones o de que habilitan tal o cual actividad, pero nadie habla de la educación. Es desesperante", explica la mujer, madre de tres hijos, a LA NACION.
Y aclara: "No pretendemos que los chicos vayan todos los días a clase, pero sí que busquen la manera de que puedan interactuar con sus compañeros. No pueden seguir así hasta que esté la vacuna, es una locura". Esta semana, la carta con las adhesiones firmadas será presentada ante los ediles de San Isidro para su tratamiento.
Nueva reunión
Este lunes, poco después del mediodía, el ministro de Educación Trotta y Acuña se encontrarán para intentar llegar a una puesta en común sobre alguna posibilidad de volver a clases en la Ciudad. De la reunión participarán además los titulares de las carteras sanitarias nacionales y porteñas, Ginés González García y Fernán Quirós.
Una similar mirada se comparte con las 23 provincias en cuanto a la complejidad del regreso presencial. Solo con el Gobierno de la Ciudad se difiere en cuanto a las condiciones para el retorno, por ello mañana tendremos una reunión con los Ministros de Salud y especialistas.&— Nicolás Trotta (@trottanico) September 20, 2020
El nuevo protocolo presentado por el Gobierno porteño, y que analizarán en conjunto con las autoridades nacionales, se centra en tres aspectos: apoyo escolar y en talleres de lectura en el espacio público, la escuela en la calle y espacios evaluativos para el nivel superior. Está destinado a brindar asistencia educativa a unos 6500 alumnos que quedaron fuera del sistema virtual por distintos motivos.
Si bien desde hace algunas semanas la Ciudad insiste en su posición de volver a las escuelas bajo ciertas medidas preventivas -y, de hecho, ya presentó otra propuesta que fue desestimada por las autoridades nacionales y que buscaba reabrir las aulas de informática dentro de los establecimientos-, al ser consultada sobre la difusión de la carta firmada por padres y referentes las fuentes porteñas no hicieron comentarios al respecto. Desde la cartera de Educación nacional, en tanto, dijeron: "Se respetan las posturas de los padres y vamos por seguir dando todos los pasos necesarios para volver".
"La voluntad para mañana [por hoy] es encontrar algún indicador objetivo que nos permita poder darle certidumbre a las familias y ponernos de acuerdo cuál sería el momento adecuado para volver a las actividades y teniendo en cuenta las inquietudes de las familias", dijeron, en tanto, desde la cartera Educativa que conduce Trotta.