Vacunación antigripal: arrancó la distribución de dosis sin una estrategia unificada durante la cuarentena
Sin una estrategia unificada para la vacunación antigripal durante la cuarentena ogligatoriapor el nuevo coronavirus, en el país arrancó la distribución a las provincias de las dosis para esta temporada de frío. Casa por casa, en postas móviles en los barrios o con una convocatoria por grupos en los centros de salud, cada provincia define cómo lo hará. Los dos primeros grupos serán el personal de la salud y de seguridad, seguido de los mayores de 65 años.
En algunas jurisdicciones, la ansiedad en la población para conseguir la vacuna y el envío de lotes parciales hicieron que las dosis se agotaran rápido y se suspendiera la aplicación hasta una nueva entrega.
Frente a la pandemia, la vacuna antigripal no protege contra la enfermedad por el nuevo coronavirus (Covid-19), pero estar a resguardo de la gripe reduce el riesgo de complicaciones por una coinfección y, a la vez, la demanda en las guardias y otros servicios necesarios para atender a los afectados por el nuevo virus.
Una vez aplicada la vacuna, se necesitan entre 10 y 14 días para generar anticuerpos contra el virus de la influenza.
Hace una semana, las autoridades sanitarias nacionales informaron que se adelantaba la inmunización contra la influenza a los grupos de riesgo: personal de la salud, mayores de 65 años, embarazadas y personas de entre 2 y 64 años con afecciones crónicas, congénitas e inmunosuprimidos. Gran parte de ellos son, también, la población más vulnerable al virus pandémico SARS-CoV-2.
El anuncio oficial se hizo una vez que el consorcio local Sinergium Biotech, que tiene un contrato de exclusividad con el Estado para producir la vacuna destinada al sistema público de atención, empezó a entregarle al Ministerio de Salud de la Nación 11 millones de dosis. Según pudo conocer LA NACIÓN, hubo un primer pedido de 8,8 millones (incluidos 2 millones para chicos) a principio de noviembre pasado, todavía durante la gestión de Adolfo Rubinstein, y el resto lo solicitó la actual gestión.
Como los mayores de 60 mostraron ser en otros países un grupo especialmente vulnerable al nuevo coronavirus, habrá que ver si se bajará la edad la vacunación antigripal de manera excepcional para reducir el riesgo de coinfección entre los 60 y 64 años.
"La diferencia con otros años [por la pandemia] es que se irá vacunando progresivamente", explicó Daniel Stecher, jefe de la División de Infectología del hospital de la Universidad de Buenos Aires. "Se promueve la vacunación, pero con la necesidad de que la gente se mueva lo menos posible. Pero cada provincia o cada ciudad, y hasta cada hospital, tienen una dinámica propia. Algunos pueden ser que opten por la vacunación a domicilio cuando eso sea posible, mientras que otros organizarán centros de vacunación en los barrios o puntos móviles para reducir las distancias para circular."
En etapas
Mientras que desde el Ministerio de Salud bonaerense indicaron ayer que habían recibido las vacunas y esperaban que su par nacional definiera la estrategia segura para empezar su aplicación a los grupos de riesgo, en la Ciudad de Buenos Aires están vacunando al personal de la salud y seguridad. En el Hospital de Clínicas prevén empezar la semana que viene con los profesionales y continuar con los mayores de 65.
En Chaco, se hará en dos etapas en 300 lugares, entre hospitales, vacunatorios y postas móviles. Desde el próximo lunes y hasta el 9 de abril, de 7 a 10, será el turno del personal de la salud y los mayores de 65 años. Recién a partir del 10 de abril, tendrán que acercarse las embarazadas, los chicos de entre 6 y 24 meses (por calendario de vacunación), la población de entre 2 y 64 años con enfermedades respiratorias, cardíacas, inmunodeficiencias congénitas o adquiridas, oncológicas, inmunosuprimidos y otras condiciones crónicas.
El Ministerio de Salud Pública de Corrientes combinó la vacunación en los centros de salud con la visita casa por casa para los grupos de riesgo. Catamarca anunció que agentes sanitarios vacunarán a los mayores de 65 "en todos los departamentos de la provincia".
En Salta, optaron por la estrategia "puerta por puerta" en toda la provincia y ya aplicaron las primeras 90.700 dosis recibidas. En dos días, cubrieron todas las residencias para adultos mayores de la capital provincial. Ahora, en el Programa Ampliado de Inmunizaciones (PAI) provincial esperan el resto de las dosis.
"Los centros de salud son los que salen a vacunar a los domicilios para que se cumpla la cuarentena. Tienen un cronograma y trazan un mapa diario. Y se habilitó la línea 148 para que los mayores de 65 que no suelen usar el sistema público de atención, llamen y se inscriban para poder ir a vacunarlos", comentó Adriana Jure, jefa del PAI de Salta.
Hacia el sur
Más al sur, en Neuquén, también suspendieron en algunas localidades la vacunación hasta recibir más dosis: las 26.000 que se recibieron en un primer envío se agotaron rápidamente. En la capital, anteayer, una fila aguardaba fuera del vacunatorio del hospital Castro Rendón, según publicó el diario Río Negro. La vacunación del personal de salud empezó el fin de semana largo, según informó el gobierno provincial, y hubo una jornada en las instituciones de mayores de 65. El Sistema Integrado de Emergencias de Neuquén (SIEN) habilitó la línea 0800-333-1002 para que los adultos mayores soliciten la vacunación en el domicilio. Y habrá puntos en espacios públicos.
En Río Negro, se inmunizará en los vacunatorios de los hospitales y solo a los grupos de riesgo que se vaya convocando para evitar que se crucen adultos mayores con chicos. Chubut, que recibió el 20% de las dosis programadas, empezará el lunes próximo a vacunar al personal de la salud y los mayores en los hospitales y centros de salud. Lo hará con horarios diferenciados.
El Ministerio de Salud nacional distribuyó recomendaciones para los vacunatorios. Incluyen respetar el distanciamiento social en la sala de espera, con una distancia mínima de un metro en una fila o de un asiento libre de por medio quienes estén sentados. Además, se deberán limpiar todas las superficies, los objetos y el equipamiento con una dilución de 10 milímetros de lavandina en un litro de agua.
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