Una enorme explosión solar golpea a la Tierra
La tormenta de gran magnitud que se originó ayer y viajó a 2250 kilómetros por segundo, llegó esta tarde a nuestro planeta; podría afectar a los satélites de comunicaciones o redes telefónicas y eléctricas
Una enorme tormenta solar, que golpea hoy a la Tierra, alcanzó su máxima actividad este mediodía y amenaza con generar problemas en los satélites de comunicaciones de órbita polar, dañar las redes de comunicaciones, telefónicas y transformadores eléctricos, como asi también afectar las frecuencias de onda corta como las radios FM.
Además, según informa la Administración Nacional de los Océanos y la Atmósfera (NOAA) de EE.UU., algunos vuelos que atravesaban el polo norte debieron ser desviados de su ruta y otros aviones que volaban en altas latitudes tuvieron que reducir su altitud para evitar los efectos radiactivos de la potente llamarada, la más fuerte que recibe el planeta desde el año 2005.
También algunos sensores del satélite ACE de la NOAA, que estudia los vientos solares, fueron cegados por la ráfaga y, al menos durante un tiempo, quedaron inútiles.
"A las 12.10 hs se registró la llegada a la Tierra de enorme eyección de masa coronaria que se originó en el Sol en el día de ayer. Más precisamente en la mancha 1402 con una potencia de 8,7 M. La nube de gas ionizado o plasma cargado de electricidad tuvo una intensidad muy grande y fue captada por los grandes telescopios de la NASA", afirmó a LA NACION, el licenciado Mariano Ribas, a cargo del área de Astronomía del Planetario de la ciudad de Buenos Aires, Galileo Galilei.
El experto explicó que el astro rey está entrando en su período de mayor actividad, que se da cada 11 años y tendrá su pico máximo en 2014. "La corona solar es una especie de atmósfera externa del Sol que mediante llamaradas se desprende continuamente. Una vez por semana ocurren estas explosiones, pero en algunas ocasiones el fenómeno se dirige directamente a la Tierra", amplió Ribas, encargado del área en el Planetario donde se fotografían las manchas solares que originan estas tormentas.
Y agregó: "Gracias a la protección natural que cuenta nuestro planeta con la magnetósfera y la atmósfera, los efectos de una explosión solar no afectan la salud de las personas, animales o plantas, pero esta gran afluencia de partículas cargadas que golpea el campo magnético terrestre podría afectar los circuitos de los satélites en órbita, las señales de GPS, las comunicaciones de radio, telefonía y transformadores o redes eléctricas". El fenómeno va a generar también grandes auroras boreales o eventualmente australes.
El "bombazo" enviado por el Sol, de clase M8,7 -muy cerca de la intensidad máxima- liberó una impresionante tormenta geomagnética equivalente a millones de bombas de hidrógeno y según los datos recogidos por el Centro de Clima Espacial Goddard, de la NASA, la eyección de masa coronal se movía a 2253 km por segundo en dirección a la Tierra.
Los expertos de Goddard explicaron que las tormentas solares tienen lugar en la corona y la cromosfera solar, calentando el gas a decenas de millones de grados y acelerando los electrones, protones e iones pesados a velocidades cercanas a la luz. Producen radiación electromagnética en todas las longitudes de onda del espectro, desde señales de radio hasta rayos gamma.
Si bien la tormenta es impresionante para los estándares recientes, todavía falta llegar al apogeo del ciclo solar, que se dará en 2014. "Veremos más tormentas como ésta o incluso mayores a medida que nos acerquemos al máximo solar", explicó Michael Hesse, jefe de heliofísica de la NASA en el Centro Goddard para Vuelos Espaciales.
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