Una brigada especial trabaja en Villa La Angostura para prevenir el hantavirus
Hace un año, empezaba en la localidad chubutense de Epuyénel brote epidémico de hantavirus que afectó a la comarca andina. Con 11 muertos, de acuerdo con la cifra oficial, fue el mayor brote registrado en la Patagonia por la única cepa del virus que se transmite de persona a persona conocida hasta ahora. Desde la semana pasada, una brigada especial trabaja de manera preventiva en Villa La Angostura y alrededores, donde este año se detectó un aumento de la población de roedores.
Los ratones colilargos son el principal reservorio del virus hanta. Y la floración de la caña de colihue activó una alerta en esa localidad neuquina y el sudoeste provincial. El Centro de Ecología Aplicada del Neuquén (CEAN) informó en mayo pasado que en el monitoreo de los roedores en distintos puntos se había detectado un aumento de peso de los animales en la zona del Parque Nacional Nahuel Huapi.
Cuando la caña colihue florece, lo que puede ocurrir cada cinco o más de 60 años, las semillas que caen al suelo son alimento para los ratones silvestres. Con más alimentación, se reproducen y sobreviven más, según explicó Daniel Russo, subsecretario de Operaciones y Protección Civil del Sistema Nacional de Gestión Integral del Riesgo (Sinagir).
Durante el invierno, con las autoridades de Villa La Angostura, la provincia y organismos nacionales, se implementaron medidas para controlar el aumento de la población de roedores (ratada) en las áreas con manchones de cañas florecidas.
"Cuando estos animales ven que está disminuyendo la alimentación en la primavera, salen del bosque y se van acercando a las viviendas", agregó Russo. Con esa previsión, en invierno se construyeron defensas y zanjas, además de trampas con baldes. "Aparecieron ratadas y en cantidades importantes. Las medidas demostraron ser efectivas", dijo el funcionario.
La semana pasada empezó a trabajar la Brigada de Riesgos Especiales de la Policía Federal Argentina para disponer de manera segura de los animales que van apareciendo muertos. Hay que, por ejemplo, enterrarlos a suficiente profundidad para evitar que otros animales de la zona, como pumas o zorros, los encuentren cuando buscan alimento. "En todo los casos, se los trata como si fueran portadores de hantavirus para evitar cualquier riesgo de exposición", explicó Russo.
Esas tareas continuarán la próxima semana. Ya se trabajó en los alrededores de los lagos Villarino, Lago Espejo, Bahía Brava, Bahía Mansa y Correntoso "para controlar la preservación del lugar" con las autoridades de Neuquén y Parques Nacionales, según informó ayer el Sinagir.
El verano pasado, la Argentina fue noticia en el mundo por el brote epidémico de hantavirus causado por la cepa Andes Sur, de transmisión interhumana. En Epuyén, epicentro del brote, y las localidades cercanas, murieron 11 personas, de acuerdo con la Secretaría de Salud de la Nación, entre noviembre del año pasado y el 28 de marzo de este año, cuando desde el Ministerio de Salud de Chubut anunció que había finalizado el brote, con el cese de la cuarentena de 12 personas en El Maitén.
Desde el Sinagir, donde participa la Secretaría de Salud de la Nación, se recomienda a la población general tomar las siguientes medidas preventivas en las casas. "Los roedores pueden ingresar por orificios del tamaño de una moneda", recuerdan.
Hay que:
- Limpiar pisos, mesas, cajones y alacenas con una parte de lavandina y nueve de agua. Dejar actuar durante 30 minutos
- Eliminar cajas de cartón, papales, leña o elementos en desuso, como cubiertas, maderas o escombros, que puedan servir como refugio
- Mantener la basura en recipientes de metal o plástico grueso con tapas ajustadas
- Colocar telas mosquiteras en puertas y ventanas
- Sellar orificios con mallas de acero, cemento o material resistente
- Limpiar y desinfectar el tanque de agua cada 6 meses
- Mantener el pasto corto y desmalezado hasta un radio de 30 metros alrededor de la vivienda
- Retirar las sobras de comida de las mascotas o guardar el alimento en recipientes herméticos
- Antes de entrar a limpiar galpones y sitios cerrados, ventilarlos 30 minutos (abrir las puertas y las ventanas desde afuera). Antes de limpiar, dejar actuar 30 minutos agua con lavandina y usar barbijo N95, protección ocular, guantes, calzado y ropa resistente, siempre con el piso húmedo para evitar levantar el polvo
- Lavarse las manos e higienizarse después de limpiar
Y en el caso de hallar un roedor, se aconseja:
- No manipular trampas con roedores vivos
- Usar guantes de goma, barbijo N95 y protección ocular para disponer del animal una vez muerto. Antes, rociar la trampa con una parte de lavandina diluida en nueve partes de agua y esperar por lo menos 30 minutos
- Colocar el roedor en una bolsa doble y cerrada; enterrarla en un pozo de más de 30 cm
- Antes de sacarse los guantes, hay que lavarlos con desinfectante. Después de quitarlos, lavarse las manos con agua y jabón