Un cuento de arena y música en el Malba
En otra edición de Experiencia adn, se presentó el espectáculo Bambolenat
"Bambolenat es una historia muy sencilla, pero a la vez muy universal –dijo a LA NACION Natalia Gregorio, una de las integrantes de la compañía Sombras de Arena, minutos antes del show–. Como es visual y sonora, no hay palabras, cada espectador pone ahí algo de sí mismo." Gregorio fue la encargada de dar vida a los títeres de sombra que forman parte del espectáculo.
Anoche, en una edición más de Experiencia adn, la arena y la música se adueñaron del auditorio del Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires (Malba). El ciclo organizado por LA NACION acerca a los lectores a diferentes disciplinas artísticas. Presentado por Citibank, tiene el auspicio de Carolina Herrera, Mercedes-Benz y Swiss Medical.
"Nos encontramos todos en la pantalla", contó Gregorio. Allí es donde se combina el arte de todos los participantes. La arena se mezclaba con los títeres, que, proyectados, acompañaban al actor que se movía detrás del lienzo, representando la historia del hombre.
La imagen se complementaba con la música en vivo, compuesta de instrumentos étnicos con percusión y música electrónica. En el Malba sonaron cuencos tibetanos, platillos, un laúd, un didgeridoo, entre muchos otros instrumentos.
En el show de anoche, el grupo contó con la presencia de la cantante cubana Naymi García, que acompañó en vivo la historia que transcurría en la pantalla.
Sombras de Arena nació en 2008. Se presentó en la Ciudad Cultural Konex, en Tecnópolis y en el Festival Internacional de Teatro de Londrina, en Brasil. Recién llegado de su gira en Hong Kong, el grupo hará tres presentaciones en la sala Siranush (Armenia 1353), los domingos 4, 11 y 18 de noviembre.
En su segundo año, Experiencia adn comenzó con la cantante Ligia Piro, en el Malba, recibió allí a Kevin Johansen + The Nada + Liniers, y a la obra Los talentos, y homenajeó a Astor Piazzolla, con la Camerata Bariloche en el Teatro Colón.