Tiene 10 años, gastó sus ahorros para comprarle una bandera a su escuela y tuvo una inesperada recompensa
Tras enterarse que se la habían robado, tuvo un gesto que llenó de emoción y orgullo a todos sus compañeros y profesores; el pequeño protagonista de esta gran historia habló con LA NACION
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La bandera celeste y blanca llevaba días sin flamear en lo alto del mástil de la escuela N°8 de Maipú. Durante un día de lluvia, alguien la robó. Si bien en un primer momento pensaron que podían recuperarla, con el correr de los días las esperanzas comenzaron a esfumarse. Conmovido con la situación, un alumno de quinto grado tuvo un gesto que le devolvió a la institución su símbolo patrio. Tras la viralización de la historia, no solo recibió felicitaciones y hasta un impensado regalo, sino que habló de las ganas de cumplir su mayor sueño.
Nicolás Olisco Aguayo llevaba varios días triste por no poder realizar el saludo a la bandera en la escuela y, lejos de quedarse quieto, decidió resolver él mismo el asunto. Llegó a su casa y le dijo a su mamá que quería comprar una con sus ahorros y reponer la que había desaparecido.
El niño juntaba desde hace mucho tiempo peso por peso para comprarse una pelota de fútbol. Pero, el deseo y la necesidad de ver flamear la bandera fueron más fuertes.
“Estaba por tocar el timbre del recreo, entonces les dije a mis alumnos que cerraran sus carpetas. En ese momento vi que Nico me levanta la mano. Me acerco y comenzamos a hablar sobre la bandera que robaron del patio. Yo me imaginaba que iba a contarme quién había sido el ladrón, sin embargo lo que pasó me dejó sin palabras”, relató a LA NACION Julián Caballero, uno de sus profesores.
El niño sacó de abajo de su banco una enorme bandera celeste y blanca y le dijo unas palabras que lo descolocaron: “La compré con los ahorros que había juntado para mi pelota de fútbol”. El docente, que no lograba salir de su asombro, lo primero que le preguntó fue si sus padres sabían lo que había hecho y la sorpresa fue mayor, ya que el pequeño le respondió que no solo estaban al tanto sino que lo habían decidido en familia.
El gran gesto de Nicolás con su escuela y el reconocimiento de las autoridades
Con la bandera guardada en su mochila, Nico se levantó y con mucho entusiasmo fue a la escuela. Se acercó a la dirección, pero no lo pudieron recibir porque estaban en una reunión. Caminó unos pasos hacia su aula y allí tuvo la charla con su profesor. Sin dudarlo, el docente salió a buscar a las autoridades para contarles el increíble gesto del pequeño alumno.
“Cuando nos contó lo que había hecho nos emocionamos hasta las lágrimas. Nos dijo que su padre le había dado algo de dinero y estaba ahorrando para comprarse una pelota porque es fanático de Boca. Sin embargo, decidió hablar con su familia, quienes lo autorizaron a comprar una bandera para la escuela. Es hermoso el gesto que tuvo y estamos muy orgullosos de él”, relató a LA NACIÓN María Belén Lamarque, secretaria de la institución educativa.
La mujer reconoció que estaban por hacer la denuncia y comprar una nueva cuando fueron sorprendidos por Nicolás. Junto con la directora, Andrea Odescalchi, y rodeado de todos sus compañeros, el niño izó con orgullo la nueva bandera.
A los docentes les generó mucha emoción el gesto desinteresado y destacaron que se trata de alguien “muy aplicado, comprometido y responsable”. Conmovido, el profesor a quien le mostró la bandera, remarcó: “Es la primera vez en mi carrera que veo algo como esto”.
A pesar de que todo era felicidad en la escuela maipuense, siempre hay lugar para una alegría más. Dos días después del regalo de Nicolás, desde la dirección les pidieron a todos los alumnos que salgan a formar al patio de forma inesperada. Allí, tras escuchar unas palabras de las autoridades, ingresó un grupo de personas con un obsequio para el pequeño.
“Se comunicó con nosotros la Sociedad de fomento del Barrio Belgrano y nos dijo que querían regalarle una pelota a Nico y desde la escuela decidimos comprarle un equipo de Boca, porque es fanático”, recordó con mucha emoción María Belén. Solo se escuchaban aplausos en el patio de la escuela N°8. Incluso los padres del niño de 10 años dijeron unas palabras y expresaron su deseo de que el gesto solidario de su hijo pudiera replicarse.
“Nos fuimos a casa todos contentos porque no esperábamos vivir un momento como ese. Nico viene de una familia muy trabajadora y aprendió esos valores en la casa. Es una excelente persona tanto dentro como fuera del aula; su gesto enseña y llena de orgullo a grandes y chicos”, contó su profesor con orgullo.
En diálogo con LA NACIÓN, Nicolás se sorprendió con la repercusión que tuvo su historia: “Estoy muy agradecido con todo el país y con todo Maipú. Estoy muy contento porque ya tengo mi pelota y unos botines”. Además, habló de uno de sus mayores sueños: conocer a Carlos Tevez.
El mensaje de Darío Benedetto para Nicolás
El gesto desinteresado del niño de Maipú no tardó en viralizarse y tuvo muchas repercusiones. A través de un video, Darío Benedetto, delantero de Boca Juniors, le hizo llegar unas cálidas palabras.
“Nico querido, quería saludarte, espero que ande todo bien. Me alegro mucho que te hayas podido comprar la bandera. Te mando un gran saludo”, le expresó el deportista. El niño no solo tuvo un noble gesto con su escuela sino que además comprobó en carne propia la frase que dice ‘todo lo que das...vuelve’.
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