Coronavirus. Con muestras de saliva, realizan un rastreo más agresivo de casos
"Sumamos una nueva forma de testeo, estamos testeando a todos los convivientes de los de los contagiados", dijo el jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, durante el anuncio de la extensión del aislamiento el viernes pasado. Se refería a los cambios en la estrategia de búsqueda del Dispositivo Estratégico de Testeo para Coronavirus en Terreno de Argentina (Detectar), un operativo que hoy llevan adelante más de 2000 personas. Son algo así como los bomberos sanitarios de la Ciudad. Apagan focos, pero de contagios.
El dispositivo, que se realiza junto con el gobierno nacional, se basa en la búsqueda activa de las personas que estuvieron en contacto estrecho con un paciente con Covid-19. El cambio que señala Rodríguez Larreta marca una estrategia aún más agresiva para rastrear a aquellos que se hayan infectado. Si bien antes le practicaban un hisopado a los convivientes que presentaban síntomas, ahora le tomarán una muestra de saliva a todos los convivientes, más allá de si presentan, o no, sintomatología.
"Ampliamos la estrategia de búsqueda. Hicimos un estudio junto al Malbrán y se determinó que hay una correlatividad entre el resultado de un hisopado y el que se obtiene con una muestra de saliva que es del 88 por ciento", dice Gabriel Battistella, subsecretario de Atención Primaria, Ambulatoria y Comunitaria de la Ciudad.
Es decir, que, si bien hay una diferencia en la sensibilidad del 12 por ciento entre una prueba y la otra, de este modo van a poder testear a todos los que no presentan síntomas, mientras que antes no se los testeaba y podían ser pacientes con coronavirus, pero asintomáticos. A los que sí presenten síntomas, se les hará el hisopado.
"La sensibilidad es la capacidad del test para descartar una enfermedad. Por ejemplo, en pacientes graves, los hisopados tienen una sensibilidad que ronda el 90 por ciento. Mientras que la prueba con saliva tiene una sensibilidad que va del 72 al 80 por ciento. Aunque sea un test menos sensible que el hisopado, la saliva ayudará a encontrar nuevos casos, particularmente donde hoy no los estamos buscando",detalla Martín Stryjewski, jefe de internación de Cemic y miembro de la comisión directiva de la Sociedad Argentina de Infectología (SADI).
El hisopado es más complejo
"El hisopado es más complejo, en general hay que trasladar al paciente a un lugar específico y es más invasivo. Mientras que el test de saliva se puede tomar en el mismo domicilio. Como a los asintomáticos cuesta mucho llevaros a testear, justamente porque se sienten bien, con esta nueva estrategia vamos a poder ampliar los testeos porque es una prueba muy sencilla de hacer. Gracias a esto vamos a detectar asintomáticos que estén cursando la enfermedad, como también vamos a hacer diagnósticos tempranos sobre los que aún no desarrollaron los síntomas", agrega Battistella.
El funcionario indica que esta nueva estrategia empezó a funcionar la semana pasada y este viernes se va a terminar de implementar en todos los operativos Detectar de la Ciudad. Hoy, este distrito tiene 62.698 infectados y 1310 fallecidos.
"Es una estrategia epidemiológica rápida y sencilla. Si bien las muestras de saliva son menos sensibles que las PCR, uno obtiene una respuesta mucho más rápido. Creo que es una estrategia sumamente efectiva", señala Ricardo Teijeiro, infectólogo y miembro de la SADI.
La estrategia de búsqueda activa, que las autoridades porteñas señalan como muy exitosa, empezó el 5 de mayo en la Villa 31, cuando en ese barrio popular había 133 contagios y una mujer de 84 años fallecida. Comenzaron con un equipo de 30 rastreadores y ahora tienen más de 2000 para todos los barrios. Este pequeño ejército se compone de promotores que trabajan en los centros de salud que la Ciudad tiene en los barrios, parte del equipo de las comunas, estudiantes de medicina de la UBA e integrantes de organizaciones sociales.
Barrios populares
En los barrios populares, en donde por las condiciones de hacinamiento el virus se propaga muy rápidamente, hoy la curva de contagios descendió de manera pronunciada. De 150 casos por día pasaron a tener entre cero y 10. En esos barrios se les realizó, desde el principio del operativo, una prueba de PCR a todos los convivientes del contagiado. Si el resultado es positivo, y no es un caso grave, los trasladan a hoteles o centros de aislamiento, en donde ya ingresaron 39.145 personas y egresaron, hasta el momento, 36.142.
El 6 de junio el dispositivo Detectar se empezó a desplegar en el resto de la Ciudad. Comenzaron por Balvanera, que era el barrio más afectado. En la semana previa al despliegue del operativo, Balvanera había acumulado 84 casos en cinco días, que para ese momento era un número significativo. Ahora, ya son 21 los dispositivos activos en 24 barrios. Se testearon, hasta el último reporte del lunes pasado, 9.583 vecinos y 4.132 (43%), dio positivo.
Para nutrir de información a los grupos que van casa por casa buscando contactos estrechos, está el equipo de Julio Delgado, que lleva adelante las entrevistas epidemiológicas.
El grupo de gente con el cual trabaja pasó de tener de 16 puestos de trabajo –atendidos por distintas personas en distintos turnos- a 134. Trabajan de lunes a lunes de 9 a 21 y son los encargados de llamar a todos los pacientes para intentar hacer un mapa con los contactos estrechos que tuvieron en los últimos días.
"Cuando la sociedad más sale a la calle, más tenemos que trabajar con todos estos mecanismos de supresión para poder controlar la cadena de contagios", detalla Delgado. El funcionario, además, agrega que, con el tiempo, fueron incluyendo más síntomas a la lista. Eran fiebre por encima de 37.5°, tos, dolor de garganta, dificultad para respirar, alteración en el gusto y olfato. Ahora se sumó la cefalea, y la presencia de vómitos y/o diarrea.
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