Subastan fragmentos inéditos de El Principito
Son dos manuscritos de Saint-Exupéry
La casa de subastas parisiense Artcurial rematará el 16 de este mes dos hojas inéditas del autor Antoine de Saint-Exupéry, que contienen elementos hasta ahora desconocidos de su obra El Principito, informó la agencia AP.
Las hojas están valuadas entre 40.000 y 50.000 euros, y los fragmentos de escritura se sitúan en el momento de la historia en el que, después de recorrer seis planetas, el Principito llega a la Tierra.
Las dos hojas fueron halladas en un paquete que un coleccionista entregó a Artcurial para tasar y que contenía manuscritos de Saint-Exupéry, según señaló el sitio BBC Mundo.
A pesar de que las hojas están amarillentas -se calcula que son de 1941- y llenas de tachaduras, se pudo comprobar que en la primera hay variantes de los capítulos 17 y 19 del libro y en la segunda un personaje que no está en la versión publicada: el primer hombre con el que habla el Principito al llegar a la Tierra.
El personaje desconocido, al que los historiadores decidieron llamar "el crucigramista", habla con el protagonista en una carretera. Cuando el Principito le ofrece su ayuda, el crucigramista contesta: "Estoy buscando una palabra de seis letras comenzando por una G que significa «gargarismo»". Los expertos en manuscritos arriesgan que se trata de la palabra "guerra", pero el texto no lo resuelve.
Además, entre los documentos hay dibujos, capítulos de Piloto de guerra y el manuscrito de "Escales de Patagonie", con un valor de entre 50.000 y 60.000 euros. Es un texto de 1932 acerca del viaje de Saint-Exupéry a la Argentina como piloto. Allí, el francés describe a la Patagonia como una especie de jardín del edén. Según la casa de subastas, los volcanes que el escritor describe en El Principito no son otros que los que vio en el sur argentino.
El manuscrito original de El Principito , que se conserva en la Pierpont Morgan Library de Nueva York, fue donado por el autor a la periodista neoyorquina Silvia Hamilton Reinhardt, amiga del traductor de Saint-Exupéry, Lewis Galantière, en 1943.