Se modificarían los límites de seis barrios de la Capital
Solemos creer que las villas 31 y 31 bis quedan íntegramente en Retiro; que la ex ciudad deportiva de Boca está en el barrio homónimo y que el Nuevo Gasómetro, la cancha de San Lorenzo, queda en el Bajo Flores. Hoy nada de esto es correcto. Pero lo será si una ley ya aprobada por la Legislatura porteña en primera lectura supera la instancia de audiencia pública y una posterior convalidación en el recinto.
La norma en cuestión cambia los límites de seis barrios de la Capital: Retiro, la Boca, Barracas y Flores, que ganan superficie, y Recoleta y Nueva Pompeya, que la pierden. Así, lo que hasta ahora sólo pertenece al ámbito del imaginario popular finalmente tendrá arraigo en la realidad.
Hoy, parte de las villas 31 y 31 bis sí integra Retiro, pero una porción se adentra en Recoleta. La ex ciudad deportiva de Boca forma parte de la zona portuaria y el estadio de San Lorenzo de Almagro está en Nueva Pompeya. Nada seguirá igual, sino que pasará a ser como lo afirma la gente, cuando concluya su paso por el circuito administrativo y legislativo una propuesta redactada por el diputado Rodrigo Herrera Bravo (Compromiso para el Cambio), que deroga la ordenanza 26.607 -que estableció los límites de los barrios porteños- y redefine el territorio de algunos vecindarios.
El texto, por ejemplo, otorga un nuevo contorno a Retiro, que por el norte incorpora todas las tierras ocupadas por las villas 31 y 31 bis, la traza ferroviaria y las dársenas E y F de la Costanera Norte. Son unas 80 hectáreas.
De ellas, unas 40 pertenecen hoy a Recoleta: las ocupadas por las villas y las vías en el sector delimitado aproximadamente por Montevideo, avenida del Libertador, Salguero y Costanera. Otras tantas componen la zona portuaria.
Otro de los barrios que sumarán superficie es La Boca, pues anexará unas 85 hectáreas tendidas al sur de la Reserva Ecológica y conocidas como Isla de Marchi, en la que está emplazada la ex ciudad deportiva de Boca, que ahora sí integrará el barrio homónimo.
"Cuando analizamos los límites de las comunas, vinieron vecinos de La Boca a plantear que ellos siempre consideraron la Isla de Marchi como propia. Por eso la sacamos de la zona portuaria y la agregamos al barrio", explicó Herrera Bravo.
También Flores ganará terreno hacia el Sur, para abarcar la villa 1-11-14 en toda su extensión. Hoy, el asentamiento está dividido entre este barrio y Nueva Pompeya. Para que todos los habitantes de la villa puedan seguir unidos por la pertenencia a un único barrio (ya integran una misma comuna), se propone agregar a la actual configuración de Flores unas 50 hectáreas de Nueva Pompeya.
Dentro de éstas, además de la 1-11-14, queda hoy la cancha de San Lorenzo: si prospera el cambio, finalmente el estadio estará en el Bajo Flores.
Pero hay más cambios para Pompeya. También para mantener agrupados a los vecinos de una villa (en este caso, la 21-24), el barrio perderá otras 20 hectáreas en su sector este, que serán anexadas a Barracas.
La audiencia pública en la que los vecinos deberán opinar sobre el mapa propuesto todavía no tiene fecha, aunque se presume que será este año.