Río Turbio: murieron 4 mineros y hay 10 atrapados

RIO TURBIO, Santa Cruz.- Horas de tragedia y profundo dolor se viven en la cuenca carbonífera. Cuatro mineros muertos y diez desaparecidos era, hasta el cierre de esta edición, el resultado del incendio provocado por razones aún no establecidas en el interior del Complejo Minero Río Turbio. Las personas que se intenta rescatar -tres serían de nacionalidad chilena- permanecen en el interior de la mina desde la medianoche de anteayer. Esta tragedia se convirtió en la peor en 60 años.

Los cuerpos de los mineros Miguel Cardozo, de 24 años, oriundo de 28 de Noviembre, y Julio Alvarez, de Río Turbio, fueron encontrados en el interior de la mina a unos 5500 metros del lugar conocido como Chifón 7, uno de los extremos. Más tarde fueron hallados el cadáver de José Alvarado Díaz y el de José Hernández Zambrano. A 7000 metros montaña adentro y a 400 metros de profundidad se encontraban diez trabajadores a los que se intenta rescatar, pero, a medida que pasan las horas, las esperanzas de hallarlos con vida son cada vez más escasas debido a los escapes de monóxido de carbono.

Anteayer, a las 22.30, mientras en el interior de las minas de carbón se encontraba trabajando casi un centenar de personas se produjo un incendio en la cinta transportadora de carbón, a 1000 metros de la boca principal. El fuego intenso provocó derrumbes en las galerías entre la Unión 9 y 12 de la entrada principal. El humo tóxico rápidamente empezó a correr por las numerosas galerías y fue una trampa mortal para los mineros.

Un camión que se encontraba en el interior rescató a 50 operarios, pero la dificultad para conducir en medio del humo provocó un accidente en el interior de la mina.

Ahogadas y extenuadas, cerca de 37 personas pudieron escapar a pie y aparecieron el chifón 7. Todas fueron trasladadas al hospital. La mayoría fue dada de alta. Según relataban los mineros, en el interior, aún permanecían personas que gritaban desesperadas.

"Brigadistas de la empresa están trabajando, al lugar donde se encontrarían atrapados los mineros están tratando de llegar cinco brigadistas con máscaras de oxígeno. La situación es trágica", aseguro anoche a LA NACION el intendente Matías Mazú, a cargo del Comité de Crisis que se creó para las tareas de rescate.

Dos cuerpos sin vida fueron hallados ayer, a las 17, por los brigadistas, a 1200 metros en el interior de la montaña. Uno de los hombres, según el parte médico, murió por asfixia, en tanto que el otro, por causa de múltiples traumatismos.

Ambos fueron traslados al hospital de Río Turbio, donde cerca de 300 personas se encuentran reunidas a la espera de conocer la suerte que han corrido los mineros Odilón Vedia, Héctor Rebollo, Víctor Hernández, Nicolás Arancibia, Ricardo Cabrera, Silverio Méndez, José Chávez, Oscar Marchant, José Armelia y Jorge Vallejo.

Al cierre de esta edición los rescatistas descubrieron los cuerpos de Alvarado Díaz y de Hernández Zambrano. El equipo de socorro los halló en una galería, distante unos 400 metros del socavón, aunque no podían ser retirados de allí por las dificultades del terreno.

El jefe comunal admitió anoche que las esperanzas de encontrar a los mineros con vida "son casi inexistentes", debido a la gran concentración de monóxido de carbono, cuyas últimas mediciones superan los límites tolerables para el ser humano.

También la presunción de los rescatistas es que las personas que aún están desaparecidas habrían muerto como producto del intenso humo tóxico que permanece en los túneles, ya que la mayoría de los productos que se quemaron son de caucho y plástico.

Según se explicó, la labor se dificultó por la acumulación de anhídrido carbónico bajo tierra, dado el humo que ingresó en las galerías tras el incendio, a lo que se sumó la polvareda levantada por el derrumbe y los efectos propios del mineral que la compone: el carbón.

A última hora de ayer, en la mina 5 se produjo el recambio de brigadistas que trabajan con equipos especiales de oxígeno y visión nocturna aportados por el Ejército.

El presidente Néstor Kirchner expresó ayer su "profunda preocupación" por el accidente que se registró en la mina de Río Turbio. Aunque durante todo el día se habló del inminente viaje del primer mandatario a la zona, a última hora de ayer, voceros presidenciales confirmaron que el Presidente no se trasladaría.

La galería en la que se registró el incendio es el núcleo central de la mina, donde se encuentra todo el sistema de comunicación, de energía y de agua, que fue interrumpido.

Los rescatistas deben hacer tres kilómetros en el interior del yacimiento para poder llegar al lugar donde están los mineros atrapados. Sin embargo no pueden tener comunicación con ellos pues se quemaron todas las instalaciones de energía.

El gobernador santacruceño, Sergio Acevedo, se acercó de inmediato a la zona del accidente, como también el ministro de Planificación Federal, Julio De Vido, que acompañaba al Presidente en un acto en Río Negro y que emprendió viaje hacia la zona para seguir de cerca las tareas de rescate.

Como parte del operativo de salvamento, los dos hospitales de la cuenca, dos aviones sanitarios, equipos especiales y profesionales llegados desde distintos puntos de la provincia y del país trabajaron ayer durante más de 20 horas.

Una dotación de entre 20 y 30 bomberos especializados de la Policía Federal partió anoche desde la Capital Federal hacia esta provincia para colaborar con las fuerzas locales.

Un rosario

Alrededor de la mina, parientes de los mineros atrapados seguían con desesperación las tareas de rescate, algunos rezando un rosario, elevando plegarias a Santa Bárbara -la patrona de las minas-; otros, lamentándose por los riesgos de este oficio. En ese sentido, el secretario general de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) de Río Turbio, Raúl Wanso, adjudicó lo ocurrido a "la falta de inversión y de controles" estatales.

Wanso, que colaboró en el rescate de los primeros sobrevivientes, también advirtió que, tras esta tragedia, los anuncios de inversiones millonarias que hace dos semanas había hecho el Presidente "evidentemente, llegaron tarde".

Mazú declaró ayer la emergencia en la comuna y decretó para hoy jornadas de duelo en Río Turbio y 28 de Noviembre.

Mazú indicó también que los brigadistas estaban trabajando anoche "entre 700 y 900 metros de donde se hallarían los mineros" desaparecidos.