Qué dicen los docentes porteños sobre el celular adentro del aula y cómo funciona en otros países
Una reciente encuesta del Ministerio de Educación de la Ciudad de Buenos Aires revela que el uso de teléfonos celulares en las aulas es percibido como un obstáculo significativo para el aprendizaje
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Una encuesta del Ministerio de Educación de la ciudad de Buenos Aires muestra que tanto familias como docentes consideran que el uso de celulares en las aulas impacta negativamente en el bienestar y la atención de los estudiantes. Siete de cada 10 familias y 8 de cada 10 docentes sostienen que el uso de celulares tiene consecuencias negativas para los estudiantes, algo que se acentúa más en el nivel secundario, donde un 80% de los docentes expresó preocupación por la situación.
El estudio, realizado durante la última semana de julio, incluyó la participación de 1911 familias y 2605 docentes de nivel primario y secundario. La encuesta revela que más del 96% de los docentes de secundaria señaló que la mayoría de los estudiantes llevan su celular al aula, lo que dificulta la dinámica de la clase. En tanto, el 82% de los docentes indicó que debe interrumpir algunas o todas sus clases debido al uso del celular por parte de los estudiantes.
La resolución del Ministerio de Educación porteño, que será publicada en los próximos días, establece que los celulares estarán prohibidos en jardines de infantes y escuelas primarias, y su uso será regulado en el nivel secundario. En este último caso, los dispositivos deberán estar guardados durante las horas de clase, salvo en las actividades pedagógicas planificadas que requieran su uso.
La resolución ministerial también especifica que cada institución educativa tendrá la responsabilidad de implementar las medidas correspondientes para regular el uso de celulares, en consonancia con las necesidades y particularidades de su comunidad. Las autoridades escolares deberán comunicar las pautas a la comunidad educativa y establecer las consecuencias en caso de incumplimiento, como la retención de los dispositivos hasta el final de la jornada escolar.
En Argentina, la Sociedad Argentina de Pediatría (SAP) considera que el uso excesivo de pantallas afecta negativamente el desarrollo cognitivo y emocional de los niños, y genera problemas de comportamiento, rendimiento escolar y salud en general. La SAP advierte que la exposición a medios electrónicos por períodos prolongados puede afectar la memoria y la atención de los niños, incrementando la ansiedad y otros trastornos emocionales.
La encuesta del Ministerio de Educación de la ciudad de Buenos Aires también reveló que las familias consideran que los juegos de apuestas en línea representan una problemática significativa que afecta a los chicos y jóvenes. Según el estudio, un 85,6% de las familias de nivel primario y un 87,1% de nivel secundario expresaron preocupación por esta situación, aunque no la reconocen en sus propios hijos.
Una guía
El gobierno porteño lanzará una campaña de concientización para promover el uso responsable de las tecnologías tanto en las escuelas como en el hogar. La campaña incluirá la publicación de una guía para las familias con recomendaciones para gestionar el uso de dispositivos digitales por parte de los niños y adolescentes.
En los próximos días, las 2291 escuelas de la ciudad de Buenos Aires, tanto públicas como privadas, deberán implementar las nuevas normas de uso de celulares. La medida afectará a aproximadamente 566.000 estudiantes, quienes deberán adaptarse a las nuevas reglas establecidas por cada institución.
En la Argentina, el 65% de los estudiantes reconoció haberse distraído por el uso de dispositivos electrónicos en clases de matemáticas, mientras que el 45% reportó sentirse ansioso si no tenía acceso a su teléfono celular.
“En la ciudad fuimos pioneros en la implementación del uso de los dispositivos digitales en las aulas y hoy nos toca asumir la responsabilidad de gestionar su uso para que sea seguro y responsable. Los directivos de cada escuela podrán fijar de qué manera se regulará el uso del celular poniéndolo en debate con su propia comunidad. Porque somos los adultos los que debemos definir el rol que le dejamos jugar al mundo digital en la vida de nuestros niños y niñas”, dijo Mercedes Miguel, ministra de Educación de la ciudad de Buenos Aires.
Restricciones globales al uso de celulares en escuelas
Varios países han implementado regulaciones para restringir el uso de teléfonos celulares en las escuelas, con el objetivo de mejorar la calidad del ambiente educativo y proteger el bienestar de los estudiantes. En Francia, el uso de teléfonos móviles en las escuelas está prohibido desde 2018 en todos los niveles educativos, con algunas excepciones para situaciones médicas o para usos educativos específicos. Esta normativa se aplica en la educación preescolar, primaria y secundaria, donde los estudiantes no pueden tener sus dispositivos en las instalaciones escolares ni en las aulas.
Estados Unidos
En Estados Unidos, la regulación del uso de teléfonos celulares en las escuelas varía según el estado y el distrito escolar, sin una normativa federal uniforme. A raíz de la pandemia, muchas escuelas informaron un aumento en los comportamientos problemáticos relacionados con el uso de teléfonos móviles, como la publicación de contenido en redes sociales durante las clases y el envío de mensajes de texto. En respuesta, estados como Ohio, Colorado, Maryland, Connecticut, Pensilvania, Virginia y California han adoptado políticas que restringen el uso de estos dispositivos durante el horario escolar. Las medidas incluyen la exigencia de que los estudiantes guarden sus teléfonos en casilleros personales o los depositen en bolsas especiales hasta el final de la jornada escolar.
Alemania
En Alemania, la regulación del uso de teléfonos móviles en las escuelas es responsabilidad de cada estado federal, ya que no existe una ley nacional que unifique el criterio. Bavaria es el único estado que implementó una prohibición legal en 2018, que inicialmente se aplicaba de manera absoluta tanto en las aulas como en el resto de las instalaciones escolares. Sin embargo, esta normativa se flexibilizó en 2022 para los establecimientos de educación secundaria, permitiendo a las escuelas definir sus propias reglas sobre el uso de teléfonos móviles.
Italia
Italia también ha tomado medidas para regular el uso de teléfonos celulares en las escuelas. En 2022, el Ministerio de Educación implementó una normativa que prohíbe el uso de estos dispositivos en los establecimientos de educación primaria y secundaria durante las horas de clase. No obstante, la normativa no prohíbe la presencia de teléfonos móviles en las escuelas, sino únicamente su uso durante las clases.
China
En China, el Ministerio de Educación decidió en 2021 prohibir el uso de teléfonos móviles en las aulas como parte de una política destinada a reducir la carga académica y mejorar la salud mental de los estudiantes. A pesar de la prohibición en las aulas, los estudiantes pueden llevar sus teléfonos a la escuela para usarlos en el transporte público o para comprar comida.
Por último, en Noruega, más de 400 escuelas secundarias han adoptado medidas para restringir el uso de smartphones, afectando a más de 200.000 estudiantes. Algunas escuelas han prohibido completamente los teléfonos móviles, mientras que otras requieren que los estudiantes entreguen sus dispositivos antes del inicio de las clases. Estas regulaciones buscan fomentar una desintoxicación digital y evaluar los beneficios de limitar el tiempo frente a la pantalla para el bienestar general de los estudiantes.
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