En el Malba: la noche en que los políticos se “enfrentaron” a un Sarmiento recreado por la inteligencia artificial
Con más de 300 asistentes, se realizó un foro organizado por Argentinos por la Educación; el debate sobre el futuro del sector, en la mira
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Con un Domingo Faustino Sarmiento recreado con inteligencia artificial, como invitado estrella, el martes se realizó la segunda edición de la “La Noche de la Educación”, un encuentro convocado por la organización Argentinos por la Educación para debatir los desafíos prioritarios de la agenda del sector.
En una sala colmada del Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires (Malba), ubicado en avenida Figueroa Alcorta 3415, con cerca de 300 asistentes, Sarmiento apareció gracias al uso de inteligencia artificial y dijo a los invitados: “Gracias a mi trabajo, la escuela pública maravilló al mundo. Me dicen que en 2023 uno de cada dos chicos no entiende lo que leen. Sin educación, la democracia es una superchería. Hay que luchar, trabajar. Con la espada, la pluma y la palabra. Las cosas hay que hacerlas. Mal o bien, pero hacerlas. El pueblo, el Estado, la Nación todo está escrito en los humildes bancos de escuela. Yo me comprometí. ¿Y ustedes?”.
Y a continuación, mostró un cartel que decía “Compromiso por la alfabetización”, lema que se propuso como columna vertebral del evento y que fue una de las conclusiones del debate central que protagonizaron los gobernadores electos de Córdoba, Martín Llaryora; de Tierra del Fuego, Gustavo Melella; de San Luis, Claudio Poggi, y de Río Negro, Alberto Weretilneck y que moderó la periodista Maite Pistiner.
“La escuela es ese lugar donde uno se forma como persona. Hay que volver a recuperar esa llama y esa vocación. Yo reivindico la tarea docente, pero si vos congelás los salarios durante cuatro años, pedir calidad es muy difícil. Sin embargo, los docentes van y ponen lo mejor de sí”, dijo Melella, para iniciar un debate en el que cada gobernador expuso lo que, según sus diferentes miradas, necesita la educación argentina para mejorar.
“En la era de lo digital, en la que todos los chicos tienen un teléfono, seguir educando con el mismo sistema de hace 40 años, nos dice que algo hay que cambiar. ¿Los docentes están siendo formados para esta realidad? La discusión de hoy tiene que ver con si vamos a seguir enseñando con la tiza y el pizarrón o de la manera en que las nuevas generaciones se vinculan hoy”, dijo Weretilneck.
De acuerdo a Llaryora, hoy nadie está ganando elecciones por propuestas educativas. Por eso, es importante poner el tema en agenda y animarse a hacer transformaciones reales. “Tenemos que generar un cambio en la pedagogía y en las trayectorias educativas. Y eso está en manos de las provincias. Los que estamos acá hoy tenemos la responsabilidad de hacerlo. No podemos más pensar particularmente, tiene que haber un cambio masivo. Hay un sistema que está cómodo sabiendo que está atrasado. Si no avanzamos en todas las provincias para cambiar y mejorar y recapacitar docentes y salir del espacio de confort, no vamos a poder generar estos cambios y los números van a empeorar”, dijo.
Por último, Poggi señaló que “un pueblo educado es un pueblo libre”, pero el gran problema que están encontrando en San Luis es la situación de pobreza, en la que más del 60% de la población vive con carencias. “Chicos que no comen, se duermen en clase. Por eso, nosotros pensamos hacer una fuerte inversión en la primera infancia. Es decir, en la mamá embarazada, en jardines maternales, en universalizar la sala de 3″, planteó.
El 4 de mayo pasado, bajo la consigna “No entienden lo que leen”, que reunió a más de 130 organizaciones de la sociedad civil, Argentinos por la Educación lanzó una campaña para visibilizar la situación crítica de la comprensión lectora en el país y promover la prioridad de la alfabetización en la agenda educativa. El dato central que motivó la campaña es que, de acuerdo a los resultados de la prueba ERCE 2019, el 46% de los alumnos argentinos de tercer grado no alcanzan el nivel mínimo de lectura.
Ricardo Torres, presidente de Argentinos por la Educación, señaló al comienzo del encuentro: “Todos sabemos que hay que hacer reformas y, por eso, todos los candidatos a presidente firmaron el compromiso por la alfabetización. Que uno de cada dos estudiantes no entienda lo que lea es un drama que nos tiene que conmover a todos”. Sin embargo, también remarcó que “no todo está mal en educación”. “Los chicos están en la escuela y las familias quieren a la escuela. La educación es el único camino que tenemos disponible”, indicó.
Sobre este punto se explayó Jaime Saavedra, director de Desarrollo Humano para América Latina y el Caribe del Banco Mundial. “Estamos en una crisis gravísima en todo el mundo, no solo en Latinoamérica. Una crisis de aprendizaje que se ha ido cultivando en la última década. Hay más niños en la escuela, casi todos están en la escuela. Pero ha habido un trade off. Hay más chicos sentados en el aula, pero menos están aprendiendo. Es algo que llamamos pobreza de aprendizaje y es el porcentaje de niños que a los 10 años no puede entender un texto simple”.
De acuerdo a Saavedra, la transformación educativa necesaria para revertir esta crisis requiere de cuatro puntos: un diseño técnico –un maestro capacitado que se asegure que todos los niños aprendan–, capacidad de implementación para capacitar a todos los docentes en todas las escuelas, recursos financieros y alineamiento y compromiso político.
Por último, Pablo Bartol, gerente de Desarrollo Social del Banco de Desarrollo de América Latina (CAF), afirmó que la transformación también requiere dejar de lado los rankings: “Nos hemos dedicado a eso muchos años. Es un mecanismo bueno para generar un mecanismo de esfuerzo adicional, pero eso lo hacen los de la mitad de tabla para arriba. De la mitad de tabla para bajo genera desinterés. Los chicos se desenganchan. Esto en educación es terrible y ha hecho daño. Tenemos que empezar a desandar ese camino. Medir sí, para identificar al último en la fila. Lo que importa de verdad son los que no llegan, los que tiraron la toalla, los que creen que no pueden progresar. Necesitamos engancharlos y el ranking no es el camino. En la Argentina los sistemas de información no son robustos, no tenemos a todos identificados. Tiene que haber una inversión diferencial volcada a los que se están retrasando. El plan no es el garrote, es la zanahoria. Aquello que me ilusiona, la educación necesita grandes motivadores que lleven a los niños a soñar en grande”, expuso.
Entre los invitados a La Noche de la Educación, que fue conducido por Laura Fernández, estuvieron representantes de diferentes espacios políticos: los legisladores nacionales Ricardo López Murphy, Daniel Arroyo, Sabrina Ajmchet, Martín Tetaz y Silvia Lospennato, el senador Martín Lousteau y el candidato a jefe de gobierno porteño Ramiro Marra, entre otros.
También estuvieron presentes los exministros de Educación porteño y bonaerense, Mariano Narodowski y Mario Oporto, respectivamente.
Ignacio Ibarzabal, director ejecutivo de Argentinos por la Educación, cerró la noche: “Estamos dando pasos, pero queda claro que hay que redoblar el esfuerzo para mejorar la calidad de la educación en la Argentina”.
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