Murió el fundador de “El Pato”, un ícono de Punta Mogotes
Guibert Englebienne falleció a sus 84 años; el empresario creó junto a su esposa este tradicional local costero que se ubica en uno de los puntos neurálgicos de Mar del Plata
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En las últimas horas, se conoció una noticia que conmocionó a la sociedad de Mar del Plata. Guibert Englebienne, fundador de El Pato, un ícono del complejo costero Punta Mogotes, falleció a los 84 años de edad. Hasta el momento, se desconocen las causas de su deceso.
Ubicado en una esquina emblemática de la ciudad marplatense, “El Pato”, es un local icónico donde se venden artículos de playa. Para conocer su origen, hay que remontarse a la década del 70′ cuando Englebienne, junto a su esposa Ana María Mateos, le dieron rienda suelta a su imaginación y crearon este comercio en las intersecciones de la avenida de los Trabajadores y Aráoz. Uno de los hijos de Englebienne, que lleva su mismo nombre, es el co-fundador de Globant.
A raíz de esta triste noticia, la página de Facebook de Rotary Club sacó un comunicado con unas sentidas palabras para despedir a esta personalidad destacada de Mar del Plata. “Queremos expresar el más profundo pesar y tristeza por el fallecimiento de nuestro socio y amigo Guibert Englebienne”, comenzó el texto.
“Guibert con una trayectoria de más de 20 años en nuestra entidad, fue Presidente en el periodo 2011-2012 y en el 2021 fue designado Socio Honorario por su apoyo permanente a las causas de Rotary en favor de la comunidad marplatense”, agregó la cuenta de Rotary.
Por último, cerró: “Hoy hasta al icónico Pato de Punta Mogotes se le cayó un lagrimón. Amigo rotario descansa en paz. Acompañamos de corazón a toda la familia Englebienne - Mateos en estos momentos de tanto pesar y congoja”.
Una tradición de la cultura marplatense
En el año 1972, Englebienne y Mateos decidieron dejar La Plata para mudarse a Mar del Plata, donde construyeron un imperio similar al de Disney. Su primera incursión fue en un negocio fotográfico llamado “Klick” el cual estaba ubicado en la avenida céntrica Luro. En un rubro muy buscado en esa época, donde las cámaras no eran accesibles para todo público, los empresarios empezaron a obtener cada vez más fama hasta que decidieron expandirse.
Así fue como les surgió la oportunidad de comprar un espacio llamado “el triángulo”, compuesto por tres locales donde, hoy en día, uno de ellos, es “El Pato”. A medida que pasó el tiempo, este lugar se convirtió en emblemático y uno de los puntos más visitados en Mar del Plata al tener los objetos necesarios para pasar un día de playa como una reposera, una manta, sombrilla, entre otros elementos.
“La razón social del negocio es ‘Todo para sus vacaciones’, y es lo que nos motiva a nosotros. Resolver la necesidad del turista, que va cambiando a lo largo de los años. En la Argentina, si no te adaptás, sos pato al horno”, explicó Cristian Englebienne, hijo de Guibert, a LA NACION en una antigua entrevista.
Y, cerró, con unas de las claves para que “El Pato” siga subsistiendo: “La gente sigue volviendo todos los veranos a saludar al Pato por la nostalgia que tienen de sus veranos como niños. Es común ver personas de 50 o 60 años que vienen a sacarse fotos solos o con sus hijos o nietos porque les trae buenos recuerdos”.
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