Murió el cantante Rodrigo en un vuelco
Viajaba en su camioneta con un hijo de Alberto Olmedo que también falleció; hubo más de 35.000 personas en el velatorio
LA PLATA.- El popular cantante cuartetero El Potro Rodrigo murió ayer en un accidente automovilístico cuando retornaba a Buenos Aires luego de brindar un show en City Bell.
Además de Rodrigo Alejandro Bueno, de 27 años, falleció en el choque Fernando Olmedo -hijo de Alberto Olmedo-, quien acompañaba al cantante en la camioneta Ford Explorer roja. En el mismo rodado iban la ex mujer del cantante Patricia Pacheco y su pequeño hijo Ramiro, de 4 años, que resultaron ilesos, además de Alberto Pereira y Jorge Moreno, que sufrieron heridas de poca consideración.
El hecho ocurrió a las 3.20 de ayer entre los kilómetros 24 y 25 de la Autopista La Plata-Buenos Aires, a la altura de Ezpeleta. Según los testimonios vertidos en la causa judicial, en la que interviene el fiscal de Quilmes Luis Armella, elaccidente se produjo cuando, tras pasar el puesto de peaje, en medio de una curva muy cerrada, el vehículo que manejaba Rodrigo fue sobrepasado por una 4X4 Blazer blanca con vidrios polarizados que, una vez delante, obstruyó el paso de la camioneta roja.
Al ingresar en una larga recta de la autopista, Rodrigo habría intentado una maniobra para adelantarse, pero perdió el control y su vehículo dio varias vueltas sobre el pavimento, confiaron fuentes policiales.
El cantante, que no llevaba puesto cinturón de seguridad, fue despedido y dio con su cabeza contra el pavimento, lo que le causó instantáneamente la muerte. En tanto Olmedo, que también cayó de la camioneta, sufrió gravísimos golpes en el tórax y el abdomen. Trasladado al hospital Evita Pueblo, falleció 40 minutos más tarde.
Los primeros peritajes sobre la camioneta determinaron que, al iniciarse los vuelcos, se habrían abierto las puertas de adelante y de atrás, lo que produjo la caída de las víctimas.
Desde otra camioneta, en la que viajaban amigos y músicos que acompañaron a Rodrigo en el recital ofrecido en City Bell, al norte de esta ciudad, pudieron ver la Chevrolet Blazer blanca y denunciaron que había "encerrado al coche de Rodrigo y provocado el accidente".
Sospechan de un atentado
A partir de estas declaraciones, los investigadores comenzaron a rastrear a la misteriosa camioneta blanca. El fiscal Armella ordenó el secuestro de la cintas de video de los peajes de la autopista, en los que habría quedado registrado el paso de los vehículos.
Ayer, a última hora, los hombres comandados por el jefe de la Delegación de Investigaciones de Quilmes, comisario Ricardo Vitali, habían localizado a los ocupantes de la camioneta, de quienes no reveló su identidad, y se esperaba que en las próximas horas declararan ante el fiscal Armella.
De los peritajes del accidente y mecánica, que se realizaron en el lugar para establecer las circunstancias en las que se produjo el hecho, se desprende que desde la primera frenada marcada en el asfalto hasta el sitio en que yacía Rodrigo había 264 metros. Mientras que, desde el cuerpo del cantante hasta donde quedó la camioneta había otros 150 metros.
La camioneta circulaba a unos 120 kilómetros por hora y los estudios de alcoholemia realizados en Rodrigo y en Olmedo dieron resultados normales, según el abogado de la familia del músico Miguel Angel Pierri.
La forma en que la camioneta fue encerrada hizo arriesgar a Pierri: "Esto no parecería ser un accidente. Los peritajes hacen pensar que podría tratarse de un atentado".
Incluso un allegado a la familia, citado por la agencia Télam, dijo que el jueves y viernes últimos el cantante recibió amenazas telefónicas en la oficina de su apoderado, José Gozalo.
Alrededor de las 8, el cadáver de Rodrigo fue trasladado a la morgue del cementerio de Ezpeleta, donde se le efectuó la autopsia que determinó que el artista pereció a raíz de una fractura de cráneo que le provocó una hemorragia cerebral. Olmedo sufrió múltiples fracturas en la zona torácica y abdominal, con hemorragias que no le permitieron sobrevivir.
Hasta la morgue en Ezpeleta llegó, pasadas las 10, Beatriz, la madre de Rodrigo, que viajó desde Córdoba para despedir los restos de su hijo.
La mujer se negó a ver el cuerpo, que tuvo que ser reconocido por otros familiares, y lloró y cantó en público durante la tarde en el programa de televisión "Siempre Sábado", de América TV, donde estaba previsto que el cantante diera ayer un show en vivo.
Allí, Beatriz Bueno entonó las estrofas que llevaron a su hijo a la fama, mientras su nieto Ramiro tocaba la batería con la banda que acompañaba a Rodrigo. Muy dolida y sumergida en una especie de misticismo, la mujer declaró que "con Rodrigo no se termina el cuartetazo" y reveló que piensa seguir adelante con su banda, tal vez liderada por otro de sus hijos.
"Rodrigo no era para estar en esta Tierra, ha sido demasiado querido, ¿qué más le puedo pedir a Dios si fue así como Dios lo quiso?", afirmó, acompañada de la modelo Marixa Balli, que meses atrás se salvó de morir también en un accidente automovilístico en el que murió su novio.
Beatriz alimentó las sospechas de que el choque pudo tratarse de un atentado, al igual que Patricia Pacheco, quien dijo que le pareció sospechosa la aparición de la camioneta.
Hoy, a las 10, los restos de Rodrigo serán trasladados al cementerio de Lanús. Según lo que manifestó su madre, el cuerpo iba a ser cremado, pero el abogado dijo que esto no sería posible porque se harían nuevos peritajes.
Sin cinturón
A pesar de que los expertos en seguridad vial aseguran que el riesgo de morir en accidente empleando el cinturón es diez veces menor, su uso sigue siendo una excepción.
Recientes estudios realizados por Autopistas Urbanas S.A. confirman que sólo una de cada 20 personas utiliza normalmente la banda de protección.
De los 7533 argentinos que murieron en accidentes de tránsito durante 1999, 1100 lo hicieron por no haber tomado esa precaución, según informó la organización Luchemos por la Vida.
La muerte del cantante Rodrigo suma una víctima más a la larga lista de muertos (como Lady Di y su novio Dodi Al Fayed, muertos en un túnel bajo las calles de París) y de heridos, como el boxeador Juan Martín "Látigo" Coggi y el ex presidente Raúl Alfonsín, que se salvaron gracias a abrocharse el cinturón de seguridad.