Misiones: una madre pide eutanasia directa para su hijo con parálisis cerebral
POSADAS. Una gran conmoción causó en la provincia de Misiones el pedido desesperado de Eva Briñócoli, una mujer que pide la eutanasia para su único hijo de 22 años, quien padece parálisis cerebral y convulsiones recurrentes.
"Adrián nació así, con parálisis cerebral y crisis convulsivas. Fuimos a Buenos Aires, estuvo en el Hospital Garrahan, lo medicaron bien, pero no se pudo hacer nada y no hay ninguna esperanza de mejora, así que pedimos terminar con su sufrimiento y que descanse", explicó Briñócoli en una entrevista con el canal 12 de Misiones.
La madre mostró a las cámaras de televisión cómo vive con su hijo y su marido en una casa modesta del barrio de Candelaria, en las afueras de Posadas, donde desde hace 22 años no hace otra cosa que cuidar de su hijo.
"El no se puede valer por sí mismo, tenemos que cambiarle los pañales, higienizarlo, darle de comer, nadie puede venir a casa y tampoco lo podemos sacar", señaló la madre. Además, contó que Adrián se está autolesionando "todo el tiempo".
Lo que solicita Briñócoli para su hijo se conoce como eutanasia directa, que consiste en provocar la muerte del paciente y no está permitida en la Argentina.
Los padres de Adrián quieren que algún juez o autoridad competente escuche su caso. La mujer tampoco ocultó que está agotada y desesperada de los cuidados permanentes que acarrean estar al lado de una persona con total dependencia desde hace 22 años, sin ninguna esperanza de mejora. "Los médicos nos dicen siempre lo mismo: no se puede hacer nada", señaló.
"Yo ya no se si tengo vida por delante, pero también nosotros estamos cansados y además, ¿quién se va a hacer cargo de el cuando no estemos?", se preguntó.
Se autolesiona
En el reportaje televisivo que realizó el programa "El Periodista" que se emite por Canal 12, se pudieron ver imágenes de Adrián jugando dentro de un corralito que le construyó el padre hace diez años para que no se lastimara y poder ocuparse de cualquier tarea durante unos instantes sin el temor a que se infligiera daño.
En mayo de 2012 se sancionó en la Argentina la Ley de la Muerte Digna, que permite interrumpir un tratamiento o evitarlo en algunos casos particulares, donde se considera que va a causar sufrimiento a la persona. También se conoce a esta práctica con el término de ortotanasia.
"¿Qué le diría al que me diga que soy una madre desalmada que pide la muerte para su hijo? Le diría que estén un día completo con Adrián", explicó la mujer.