"Me siento culpable de lo que pasó", dice la hermana de la niña violada en Jujuy
Candela, la hermana de la chica de 12 años violada en Jujuy y cuya hija murió luego de una cesárea legal, tiene 18 años, se fue de su casa hace un año con un bebé de 2 años que es su hijo y que, según ella, es su vida.
Ahora vive en Mendoza y, en diálogo con LA NACION dice: "Cuando me enteré lo que le pasó a mi hermana me descompuse, me sentí muy mal, tuve bronca, tristeza y mucho dolor, me sentí culpable. Me siento culpable de lo que le pasó a mi hermanita, yo la cuidaba, no la dejaba salir sola, si yo hubiera estado en San Pedro esto no pasaba, me arrepiento de haberme ido. Siento culpa. Mis hermanos eran como mis hijos porque mi mamá a veces salía, se iba, y yo los cuidaba". En el relato manifiesta lo que los servicios sociales del Estado ya habían demostrado: Candela se hacía cargo de su hijo y también de sus hermanitos, entre ellos la niña que fue violada y que quedó embarazada.
A los 14 años Candela vivía con su madre, una hermanita, un hermanito muy pequeño y el esposo de su mamá, tenía un novio también adolescente, salía a bailar o se juntaba con los amigos, tomaba alcohol de vez en cuando y creía que tenía todo bajo control. Un día su madrina la observó detenidamente y comenzó a dudar. La llevó al médico. Resultado: Candela estaba de seis meses de embarazo. No se había dado cuenta antes, su mamá tampoco lo había notado.
Candela cuenta que lo primero que se le ocurrió fue no tener al bebé, pero el avanzado estado gestacional la hizo retroceder en la decisión. Confiesa con tono de voz pausado y tranquilo: "Cuando me enteré no lo quería tener. Pero lo tuve y hoy es el amor de mi vida, es mi vida".
Militante
En las redes sociales milita contra el aborto. En la portada de su Facebook tiene la foto de la pequeña Esperanza, la hija que tuvo su hermana. También tiene un posteo con la misma foto donde reza: "Siempre en mi corazón, Milagro Esperanza". Replica historias de mamás adolescentes de su edad. Hoy vive en Mendoza. Se tuvo que ir de Jujuy ya que la relación con su madre no era buena, tanto que el Estado le dio la guarda de ella mientras era menor de edad a su tía.
A los 17 años denunció a su mamá por maltrato. Se fue a vivir a la casa de su tía, hermana de la madre, y la ayudó también la abuela materna. La denuncia expresa que Candela sufrió violencia física y verbal de parte de su mamá. Candela se hacía cargo de las tareas domésticas del hogar, cuidaba de su hijo y de sus hermanitos. Un día le pidió a su mamá que la ayudara y la madre explotó en furia.
Por orden del Estado la madre de Candela y de la niña ultrajada de 12 años debía realizar un tratamiento psicológico para "desnaturalizar la forma violenta de relacionarse con su hija", si no iniciaba tratamiento, la madre no podía tener contacto con la adolescente. Respecto del presunto violador de su hermana, Candela cuenta que "varias veces tuve problemas porque él quería tener una relación conmigo y hasta me ofrecía plata, yo lo saqué sonando".
Estuvo en San Pedro de Jujuy en diciembre. Se dio cuenta que su hermana menor estaba "gordita". Dice "tuve sospechas, pensé que podía estar embarazada, pero no dije nada para no tener problemas con mi mamá. Me dí cuenta que algo pasaba. Creo que me daba cuenta pero no quería reconocerlo", dice.
Candela y su hermana cursaron meses de embarazo siendo adolescentes sin que la madre de ambas se diera cuenta. Candela descubrió que esperaba un bebé a los seis meses de gestación, gracias a su madrina. La hermanita descubrió que estaba de seis meses de gestación por un dolor abdominal, según contó la madre.
Temas
Otras noticias de Debate por el aborto
Más leídas de Sociedad
Calendario escolar 2025. Definieron cuándo empiezan las clases en la Ciudad y las fechas de las vacaciones
Murió una persona. Un grupo de argentinos chocó en la frontera con Paraguay: viajaban para ver a Racing
Seguridad vial. Tras ocho meses cerrado, reabrirán al tránsito un puente clave entre dos ciudades
“Es como jugar al ping-pong con señales de radio”. El asombroso método que científicos usaron para medir el glaciar Upsala