Maradona cumplió su deseo de viajar a Cuba
El ex jugador partió este mediodía hacia La Habana para continuar su tratamiento contra la adicción a las drogas; agradeció a Mascherano y Luis González, que le regalaron la camiseta de River
Diego Armando Maradona viajó hoy a Cuba para continuar con su tratamiento contra la adicción a las drogas en el Centro de Salud Mental (Censam), de La Habana.
"Me voy triste porque dejo a mis hijas y a la gente que me quiere. Pero viajo en busca de un futuro inmediato mucho mejor. Lo bueno es que no tengo que escaparme de nadie y eso me da una tranquilidad enorme", confió Maradona poco antes de partir.
"Estoy bien gracias a Dios. Quiero seguir con lo de Guillermo Cóppola, porque eso me tiene metido en cuerpo y alma. Y después, cuando me recupere, pretendo encarar proyectos personales", manifestó a radio la Red el ex capitán del seleccionado argentino.
Diego quiso dejarles un mensaje a los argentinos en la despedida: "Quiero decirles a todos que estoy muy bien y que cuando me equivoco, me equivoco yo. Porque los problemas deben resolverlos los que los tienen. Por eso ya no quiero más consejos. Los consejos me los dan mis padres", advirtió.
Por último Maradona se mostró agradecido con dos jugadores de River Plate, Luis González y Javier Mascherano, quienes le regalaron sus camisetas a modo de despedida.
"Quiero agradecerles a los dos por ese gesto. Ayer hablé con Mascherano y le dije que es una cosa seria. Gracias a Dios es argentino. Lástima que a Lucho no lo pude encontrar porque se había lesionado", completó.
El tratamiento de Maradona en el Censam se extenderá por espacio de 70 días y será más riguroso que el que llevaba adelante en el spa La Pradera, donde permaneció por tres años.
El vuelo que trasladó a Diego rumbo a su ansiado destino cubano fue el 448 de la empresa panameña Copa Airlines, que partió desde el aeropuerto de Ezeiza a las 12.55, 15 minutos más tarde de lo anunciado.
Maradona fue acompañado en este viaje por su médico personal, Alfredo Cahe, su abogado Héctor Leguizamón, su asistente Gabriel Buono y sus hermanas Ana Estela y Rita (Kity).
Diego llegó a Ezeiza en un helicóptero del Canal 9 de televisión, el mismo en el que ofreció una nota al dueño del medio, Daniel Hadad, el pasado viernes, preveniente de la clínica neuropsiquiátrica Del Parque, donde pasó la noche.
La máquina se instaló en el sector 10, destinado a las aeronaves de menor porte, y desde allí Maradona fue transportado en una camioneta amarilla hasta la puerta de acceso al salón Vip del aeropuerto. En ese lugar permaneció por espacio de media hora, antes de salir caminando hacia el avión.
En los instantes previos a embarcarse Diego se colocó un rosario celeste, firmó una camiseta de Boca para una chica de seguridad y se sacó una fotografía con una pareja que posteriormente advirtió que la cámara no le funcionaba.
También le puso el autógrafo a varias remeras de algodón con su imagen que se adquirían en un salón del aeropuerto a 39 pesos, lo que el astro futbolístico consideró "un robo. Estos le están sacando la plata a mis hijas", acusó. Y envió a su asistente a reclamarle los tickets de venta a los responsables del local.
Acto seguido se subió a la nave, se instaló en el asiento número tres de la clase bussines y esperó la partida, que se produjo apenas 20 minutos después de que él se instalara en su butaca.
Un asado en la quinta de los hermanos Pascual, José y Antonio Mastellone (dueños de la empresa láctea La Serenísima), en General Rodríguez, y un llamado a la clínica y maternidad Suizo Argentina para agradecerle a los médicos del lugar que lo tuvieron como paciente en tres ocasiones, fueron de las últimas actividades que desarrolló Diego en Buenos Aires, además de una nota en Canal 13.
Fuente: Télam